El éxito de Dune hace repuntar la popularidad de su valiosísima adaptación al manga

El estreno de Dune: Parte dos ha devuelto a muchos el interés y aprecio por la saga creada por Frank Herbert. La película de Denis Villeneuve es un ejercicio narrativo y cinematográfico de una de esas obras que estaban consideradas como "inadaptables".

Pero el director Canadiense no sabe qué significa esa palabra y se lanzó al ruedo, dividiendo la novela original en dos películas que, muy probablemente, verán continuidad en una tercera que adapte El mesías de Dune, la segunda novela de la saga.

Hoy, sin embargo, nos toca hablar de otro tipo de adaptación, ya que Dune ha visto casi todos los formatos, desde los videojuegos hasta el manga.

Nos referimos, claro, a la adaptación de Shōtarō Ishinomori (Ishinomori Shōtarō), ilustre mangaka que fue pupilo del legendario autor de Astro Boy, Osamu Tezuka (Tezuka Osamu). 

Una versión de Dune tremendamente valiosa

A lo largo de la década de los setenta, Shōtarō Ishinomori adaptó tanto la novela original de Dune como El mesías de Dune e Hijos de Dune. Su estilo artístico es muy apreciado y la adaptación al manga que realizó es considerada como una de las mejores. Podríamos compararla en ese formato con el trabajo de Villeneuve en la gran pantalla.

Tal y como informa Comicbook, el auge de popularidad de Dune a raíz del estreno de la nueva película ha hecho que el manga de Shōtarō Ishinomori se viralice.

Desgraciadamente, los ejemplares del mismo son tremendamente escasos y, todos los sentidos, auténticas piezas de coleccionista. Solo hay que ver algunas imágenes del arte que incluían estas adaptaciones de Dune al manga para entender por qué son tan codiciadas.

Shōtarō Ishinomori falleció en 1998, pero dejó un legado que incluye joyas como esta adaptación de Dune, Cyborg 009, Kamen Rider o Super Sentai, la serie original que dio lugar a los Power Rangers.