Nuevo blog de opinión en el que os hablamos sobre la reciente subida de precio de PlayStation 5 en varios mercados.
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En el E3 de 1995, Sony anunciaba en uno de los movimientos más recordados en la historia de la feria que la primera PlayStation costaría cien dólares menos que Sega Saturn, su principal competidora, consiguiendo un estruendoso aplauso.
El pasado jueves, 25 de agosto de 2022, Sony anunciaba que PlayStation 5 sube de precio en varios mercados, incluido el europeo: a partir de ahora, tanto el modelo con lector de discos como el digital costarán cincuenta euros más (549,99 y 449,99, respectivamente). Nadie ha aplaudido.
El motivo de esta "difícil decisión", según explica Jim Ryan en el blog oficial de PlayStation, es el entorno económico mundial y la alta inflación. Tras dejar claro que PS5 no sube de precio en Estados Unidos (allí la competencia con Xbox está más igualada, así que no interesa) y detallar cómo quedan los precios en los distintos mercados tras el aumento, se despide sin muchas más explicaciones.
Normalmente, cuando una compañía toma una decisión aparentemente negativa, intento tratar el tema con la cabeza fría y con perspectiva. "Tiene que haber una buena razón que no se haya hecho pública", "hay datos que desconocemos y por eso no lo entendemos", pienso.
Hoy no puedo.
PlayStation 5 es, pese a los problemas de desabastecimiento, la consola de la actual generación más vendida. Y puedo entender que sí, la cosa está mal (Meta Quest 2 subió de precio a finales de julio), pero si tenemos en cuenta que la máquina ya lleva dos años a la venta y que gran parte del catálogo se puede jugar también en PS4... lo que debería hacer PS5 es bajar de precio, no subir.
Me pongo en la piel de la persona que lleva meses (e incluso años) visitando las tiendas y obteniendo un "agotada" por respuesta, viendo cómo las nuevas remesas online vuelan en cuestión de segundos y teniendo que aguantar que la única forma de conseguirla sea mediante los dichosos packs... y las únicas palabras que me vienen a la cabeza son "movimiento anti-consumidor".
Del “Yo no soy tonto” al “¿y si lo eres?”: sobre los abusivos lotes y packs con las nuevas consolas
Supongo que lo normal ahora sería preguntarse si sigue mereciendo la pena comprar PS5 tras el aumento de precio.
Pero entiendo perfectamente que la gente, quemada, lo que se esté preguntando en estos momentos sea: ¿me compro una Xbox?
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