La realidad virtual está cada vez más presente en nuestras vidas, ya sea a través de los juegos en ordenadores y en consolas, o de las aplicaciones para smartphones, así como en el mundo de la ficción, con el reciente estreno de Ready Player One. Se trata de una tecnología que, para algunas personas, todavía se encuentra algo verde, pero que igualmente guarda un gran potencial para el mundo del entretenimiento digital.
Una empresa que ha apostado fuerte por esta tecnología es Sony, que lanzó en 2016 su propio casco de realidad virtual conocido como PlayStation VR, o PSVR, y lo ha ido surtiendo con el lanzamiento constante de nuevos juegos y experiencias de realidad virtual, o la inclusión de modos "VR" en alguno de los juegos de PlayStation 4.
Nosotros hemos podido asistir esta Semana Santa al PSVR Spring Showcase de Londres, en donde hemos probado algunos de los juegos de realidad virtual de PS4 que vienen pisando fuerte para las próximas fechas. Algunos son juegos de carreras, otros son títulos de acción o de terror en primera persona e, incluso, nos hemos topado con un MOBA en VR. La oferta de juegos de PSVR presentada durante el evento fue de lo más variada, y a continuación os contaremos un poco de cada uno de estos títulos en camino para PlayStation VR.
Los próximos juegos de realidad virtual para PSVR
WipEout VR
Empezamos con uno de los juegos que más nos han impresionado en VR, y que además es el único juego del evento que ya está disponible en PS4. El pasado martes se publicaba de manera gratuita la actualización de WipEout Omega Collection que añadía el soporte para la realidad virtual, y ese mismo día pudimos competir en nuestras primeras carreras de naves con el casco de realidad virtual de Sony.
Y menudas carreras que fueron. El modo VR de WipEout es toda una experiencia digna de repetirse una y otra vez. Cada curva y cada giro, cada looping y cada salto, causan una emoción increíble cuando los superas a toda velocidad mientras adelantas a tus rivales, y se han mantenido intactas todas las cualidades del juego original.
Lo más impresionante es el hecho de que el juego no nos haya mareado en absoluto, en parte gracias a que se ha eliminado el difuminado por el movimiento en el modo VR, y también gracias a que el juego permite que la cabina se mantenga estable a pesar de los movimientos que haga la nave. Sin duda, WipEout VR es uno de esos casos en los que un juego gana en enteros con el salto a la realidad virtual y, una vez lo has probado, te costará volver a jugarlo si no es en el modo de VR. Si disponéis de un casco PSVR y tenéis el juego, no dudéis y lanzaros a probarlo.
Animal Force
Seguimos con un juego que le da un giro al concepto de los Tower Defense, y lo adapta al entorno de la realidad virtual. Animal Force es un divertido juego de la mano de ISVR que llegará a occidente dentro de poco. En él, tendremos que defender nuestro planeta de la invasión de un ejército extraterrestre haciendo uso de distintos animales a modo de torretas, como en cualquier Tower Defense.
Sin embargo, aquí las defensas se deben organizar en un entorno 3D virtual. Cada oleada de enemigos adapta una trayectoria y unos caminos diferentes, y nosotros debemos atrapar a los distintos animalillos que nos lleguen con el mando move de PlayStation para luego posicionarlos en distintas zonas de la pantalla, teniendo en cuenta las tres dimensiones, o también podemos mantenerlos sujetos para que disparen a los enemigos allá donde les llevemos.
Sobre el papel esto no supone un gran cambio, pero al jugarlo supone una experiencia de lo más divertida y muy accesible, con un ritmo frenético que hace que no te pares quieto mientras juegas. Animal Force también cuenta con varios modos de juego cooperativos y competitivos al estilo de un "party game", con soporte para un jugador con casco y varios jugadores con mandos, que amplían la oferta jugable de este curioso título de PSVR.
Smash Hit Plunder
Smash Hit Plunder es otro de los títulos que tuvimos la oportunidad de probar la pasada semana. En él asumimos el papel de un mago que acaba de heredar el castillo de su tía, pero no se trata de un castillo normal y corriente, sino de un castillo embrujado por un espíritu que busca cobrar una deuda pendiente.
Si algo nos han enseñado los videojuegos, es que la mejor manera de conseguir dinero fácil en un mundo de fantasía medieval es rompiendo jarrones, y eso es de lo que trata este juego. Armados con nuestros mandos move de PS4, debemos recorrer las estancias del castillo en busca de monedas mientras arramplamos con cada vasija, cada plato y prácticamente cualquier objeto a nuestro alcance en busca de dinero.
A nivel jugable se trata de una experiencia un tanto entretenida, en especial con la gran cantidad de objetos que podemos encontrar y arrojar. Y lo es aún más cuando jugamos con amigos (ellos con un mando y tú con el casco), lo cual convierte la búsqueda en una pelea por ver quien encuentra más dinero mientras tratas de estorbar al resto de jugadores.
Blood & Truth
Por otra parte tenemos a Blood & Truth, un juego nacido como la continuación de The London Heist y que bien podría ser el título que necesita la realidad virtual de Sony para dar el salto al público mayoritario. En su base se trata de un juego de acción en primera persona que nos hará recorrer los bajos fondos de Londres con el objetivo de rescatar a nuestra familia de un peligroso criminal.
Durante el nivel que pudimos probar, tuvimos que realizar todo tipo de acciones con los mandos move: subir escaleras de mano, arrastrarnos por conductos de ventilación o colocar y armar unos explosivos, entre otras acciones. El movimiento siempre es continuo (sin teletransportes) pero es automático, eso sí, por lo que no podemos movernos fuera de unos caminos predefinidos. Pero sin duda lo que más brilla de este juego son los tiroteos.
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El sistema es parecido al de The London Heist, pero en esta ocasión contamos con la posibilidad de movernos de cobertura en cobertura con tan solo pulsar el botón central del mando move. Con una mano disparamos y con la otra podemos coger los cargadores para recargar, devolver las granadas que nos lancen o realizar otras tareas. También podemos realizar algunos movimientos para lucirnos, como hacer malabares con el arma al más puro estilo de los pistoleros del oeste.
Cabe mencionar que el juego también nos permite tomar distintas decisiones en algunos momentos de la historia. Al final del nivel conseguimos atrapar a nuestro objetivo, un criminal que conocía cierta información de vital importancia para nosotros, y el juego nos daba distintas opciones para descubrir lo que sabía. Podíamos ser más agresivos o más afables al preguntarle, también podíamos amenazarle y asustarle con un disparo cerca de su cuerpo e, incluso, disparar a una de sus piernas para forzarle a hablar. Sin duda, se trata de una de las mayores producciones para PSVR hasta la fecha, y un juego que puede suponer la punta de lanza de la plataforma de realidad virtual de cara a las próximas fechas.
Firewall Zero Hour
Sin alejarnos mucho del género de la acción, le llega el turno a Firewall Zero Hour, un shooter táctico muy en la línea de juegos como Rainbow Six Siege, pero totalmente adaptado para la realidad virtual. Nosotros pudimos disputar un par de partidas con el Aim Controller en su modo multijugador competitivo, en el cual dos equipos de 4 jugadores deben atacar (o defender) un objetivo dentro de un edificio, y gana aquel equipo que complete su cometido, o que acabe con el equipo rival.
Por supuesto, cada jugador solo tiene una vida por ronda, y también cuenta con un equipamiento específico en función de su clase, ya sean armas de corto alcance o armamento pesado, granadas cegadoras o minas, etc... Aquí, el movimiento también es continuo y es exactamente idéntico al de cualquier shooter de este género fuera de la realidad virtual. Uno puede incluso correr o agacharse con rapidez sin que haya sensación alguna de mareo, y el giro de la cámara se da en pequeños incrementos de pocos en pocos grados para no causar malestar.
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El uso de la realidad virtual no solo te permite enfrascarte en la partida, sino que convierte algunas acciones típicas de estos juegos, como el hecho de apuntar por la mirilla o asomarse por las esquinas, en una acción natural que realizas con tu propio cuerpo, lo cual hace que la experiencia sea mucho más inmersiva. Sin duda se trata de una propuesta ideal para los fans de los shooters tácticos en primera persona que busquen dar un paso más en su inmersión dentro del género.
Dark Eclipse
Pero no todo es acción en primera persona, y el PSVR Showcase de Londres nos dejó con alguna curiosidad como Dark Eclipse, todo un MOBA hecho y derecho, pero diseñado con las cualidades de la realidad virtual en mente. Probablemente más de uno piense "¿Un MOBA en la realidad virtual? Menuda locura", pero el hecho es que Dark Eclipse logra adaptar correctamente este género al entorno de PSVR con bastante sencillez.
Una vez nos enfundamos el casco, en pantalla se nos muestra todo el mapa del juego, renderizado en tres dimensiones. Con las manos podemos desplazar el mapa y rotarlo a nuestro antojo, para visualizar el campo de batalla de distintas maneras, mientras vemos a nuestros héroes avanzar por su carril y atacar a los monstruos cercanos. Nosotros disputamos una partida contra la IA en la cual cada uno manejábamos a tres héroes diferentes (el juego contará con más de 20 héroes de salida).
Para dar ordenes basta con arrastrar el icono de uno de los héroes hasta una nueva posición, o hacia un enemigo para que lo ataque, y también se puede construir torretas de distinto tipo, para lo cual hay que talar los árboles de la zona. Se trata de una jugabilidad simple y con un buen ritmo, que no goza de la profundidad estratégica de los grandes juegos de este género, pero que ofrece una experiencia muy entretenida dentro de su género para PSVR.
Star Child
Star Child es un título un tanto misterioso. Desde su presentación en el pasado E3 2017, no se ha revelado prácticamente nada acerca de este juego de PSVR, más allá de que encarnaremos a una mujer llamada Spectra, y que nos enfrentaremos a numerosos peligros mientras avanzamos por un planeta alienígena.
Es por ello que, cuando pudimos probar el juego en el evento, lo hicimos con cierta curiosidad en un principio, y con bastante fascinación según avanzamos. La demo que jugamos, de apenas unos minutos de duración, nos situaba al principio de la aventura, nada más aterrizar en el planeta. Tras abandonar nuestra nave nos adentramos en una oscura cueva de colores oníricos y tenues, con la única iluminación que produce la flora local.
Según avanzaba nuestra heroína, la cámara (y nosotros) nos íbamos desplazando con ella a cierta distancia, lo cual ayudaba a que te quedaras ensimismado con todos los elementos que se iban descubriendo: las plantas y las luces, las rocas y las plataformas, las criaturillas que habitan en su mundo, incluso algún peligro que acechaba en la oscuridad. También pudimos resolver algún puzle simple para seguir con el avance.
En este sentido, Star Child no utiliza la realidad virtual como una parte activa de la jugabilidad, sino más bien como una herramienta para que te adentres en su mundo. De la misma manera que la oscuridad de un cine ayuda a centrarse en la película, el casco de PSVR hace que te olvides de todo lo demás en cuanto te pones con Star Child, y permite que te maravilles con sus entornos según te adentras en su mundo. Puede que fuera una de las demos más breves del evento, pero Star Child nos ha dejado con ganas de más con tan solo mostrar un poco de lo que ofrece.
The Persistence
Volvemos a la acción en primera persona con The Persistence, un roguelike de ciencia ficción con toques de terror que nos lleva a una nave abandonada en el espacio cerca de un agujero negro. La nave en cuestión es una nave colonizadora que ha dejado de funcionar tras sufrir varios problemas, y su sistema de clonación, que debía recrear a los colonos cuando llegaran a su destino, ha empezado a producir mutantes sanguinarios más similares a los zombies que a sus seres originales.
Como el último superviviente de la tripulación, debemos adentrarnos en la nave para solucionar sus problemas y salvar la misión, pero eso no es tarea fácil. Cada vez que "revivimos", la nave adopta una forma diferente, que cambia la posición de las habitaciones y sus enemigos, así como de los objetos y los replicadores de armas. El juego hace uso de un movimiento continuo y fluido, que no da muchos problemas al avanzar, y también cuenta con algunos elementos de sigilo a la hora de moverse por la nave.
En cuanto al combate, al principio solo podemos bloquear y atacar cuerpo a cuerpo con nuestra arma básica pero, según encontremos replicadores de armas, podemos usar nuestros recursos para obtener armas con las que defendernos, desde pistolas y cañones perforantes hasta armas antigravitatorias, que nos permiten hacer flotar a los enemigos con la mirada y estamparlos contra las paredes del escenario. No obstante, las armas y los recursos son escasos, y los enemigos son feroces, por lo que hay que utilizarlas con cautela.
La ambientación es uno de los puntos fuertes de esta propuesta, una nave oscura y en mal estado, con pasillos estrechos que dan paso a zonas más abiertas y con varios niveles, y con unos enemigos variados que, si te pillan por sorpresa, te ponen los pelos de punta. Además, tus amigos se pueden unir a la partida con su teléfono o tablet, para ayudarte a encontrar ciertos lugares y distraer a los enemigos, o para apagar de golpe las luces y darte un buen susto mientras se divierten a tu costa. En general, se trata de una propuesta muy interesante y que aprovecha bastante bien las cualidades de la realidad virtual.
Track Lab VR
Track Lab VR es el título más reciente de todos los presentes en el evento de PSVR. De hecho, el juego se anunciaba de manera oficial el pasado martes, después de dos años de desarrollo en secreto. No se trata de un juego fácil de describir, desde luego, puesto que Track Lab VR combina los puzles con la creación y edición de pistas de sonido, en un juego musical de realidad virtual.
Nosotros disponemos de una serie de piezas para generar pulsos con los que damos sonido a los distintos componentes que seleccionemos. Con total sencillez, y sin necesidad de tener conocimientos musicales (aunque eso siempre ayude), podemos crear pistas de sonido básicas, bases musicales, loops de sonido y todo tipo de elementos con los que confeccionar nuestras canciones. Todo el sistema es intuitivo y accesible, y se presenta de una manera muy visual en el entorno virtual.
Para crear nuestros temas disponemos de un modo libre, pero también hay una serie de puzles, divididos en distintos niveles, que nos enseñan poco a poco a crear las piezas de una canción mientras completamos cada desafío. En el rato que tuvimos para jugarlo, fuimos capaces de crear una base simple con tambores, platillos y bajo en muy poco tiempo, pero seguro que los jugadores que posean una fuerte base musical son capaces de crear pistas más elaboradas en un santiamén.
Salary Man Escape
Terminamos con un juego de puzles aparentemente simple, pero que muestra una gran profundidad según avanzamos por sus niveles. En Salary Man Escape tenemos que hacer que el empleado de una empresa llegue hasta una puerta para huir de su trabajo y así superar el nivel, un objetivo simple y directo.
Para ello solo podemos mover ciertos bloques del nivel, los cuales muchas veces están apilados los unos encima de los otros, y convierte al juego en una especie de Jenga en VR. No obstante, a cada nivel se introducen nuevas situaciones que cambian bastante el planteamiento de los problemas. En ocasiones nos encontramos con algunos puzles basados en el peso y en la rotación de unas aspas, en otras tenemos que hacer que varios grupos de empleados lleguen a la meta al mismo tiempo...
Con una propuesta simple en apariencia, Salary Man introduce poco a poco nuevas mecánicas en sus niveles para mantener fresca la jugabilidad y ofrecer un buen reto. Y no podemos terminar de hablar sobre él sin mencionar su estilo, el cual satiriza el mundo corporativo y empresarial con un diseño sobrio, que emplea muy pocos colores, y que muestra distintos mensajes con cierta sorna en las plataformas y los bloques de cada nivel.
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