Elizabeth Olsen se ha consagrado como Wanda Maximoff entre los fans de Marvel Studios tras Bruja Escarlata y Visión, pero ¿qué ha hecho más allá del UCM? ¡Lo repasamos aquí!
Tras el éxito de Bruja Escarlata y Visión, serie que se ha convertido en una de las producciones de Marvel Studios más aclamadas por los fans, nadie puede discutir que Elizabeth Olsen se ha ganado por derecho su rol como Wanda Maximoff dentro del Universo Cinematográfico de Marvel (UCM). Un rol que parecía secundario en Vengadores: La era de Ultrón, Capitán América: Civil War, Vengadores: Infinity War y Vengadores: Endgame pero que, ahora, tras la serie de Marvel en Disney Plus, tiene un potencial inabarcable e inimaginable.
Elizabeth Chase Olsen (16 de febrero de 1989; Sherman Oaks, California) nació como la tercera hija del matrimonio formado por Dave Olsen y Jarnie Jones, siendo considerada durante mucho tiempo como "la hermana menor de las gemelas Olsen". Durante su primera década de vida no sólo tuvo que lidiar con la fama desmesurada de sus hermanas mayores, sino también con la ruptura del matrimonio de sus padres y la recomposición del núcleo familiar, ya que el padre se casó con otra mujer y tuvo dos hijos.
Muy pronto tuvo claro que quería dedicarse a la interpretación, aunque primero se introduciría en los mundos del ballet y del canto. Esto no pareció cuajar mucho con la personalidad de Elizabeth Olsen, ya que una vez graduada en el Campbell Hall School (North Hollywood) se apuntó a la Tisch School of the Arts de Nueva York e incluso acabaría estudiando en la Escuela de Teatro de Arte de Moscú, dejando bien clara su preferencia laboral y artística, decantándose finalmente por la interpretación. Ahora, con la actriz consagrada en el UCM tras Bruja Escarlata y Visión y con la perspectiva de reencontrarnos con Wanda Maximoff en Doctor Strange en el Multiverso de la Locura... ¡repasamos su trayectoria hasta llegar al punto en el que nos encontramos!
Esta es la trayectoria de Elizabeth Olsen hasta la fecha
Para que entendáis el vínculo de Elizabeth Olsen con la interpretación, la actriz comenzó su carrera profesional... ¡con tan sólo cuatro años de edad! En aquella primera década de vida (básicamente, los años 90) actuó haciendo de sí misma en un gran número de producciones de sus hermanas mayores, Mary-Kate y Ashley Olsen. Estamos hablando de series televisivas como Full House, Our First Video, Olsen Twins Mother's Day Special o la aclamada The Adventures of Mary-Kate and Ashley Olsen. También quiso participar en la película de Spy Kids, pero desafortunadamente su audición no pasó el corte final y el papel cayó en manos de Alexa Vega.
A pesar de su amor por la interpretación y su pasión por el aprendizaje artístico de dicha profesión, lo cierto es que Elizabeth Olsen estuvo muy cerca de dejar el mundo audiovisual de Hollywood a mediados de los 2000. Y es que no sabemos si lo recordáis, pero en 2004 (ella tenía apenas quince años) se formó un boom mediático en torno al trastorno alimenticio de su hermana Mary-Kate que provocó una presión enorme en la adolescente y la llevaron a esquivar todos los focos para centrarse única y exclusivamente en sus empresas académicas. Por fortuna, pudo remontar aquella situación y acabar teniendo una oportunidad tras consolidar su formación.
No sería hasta 2011, una vez terminada su etapa en la Tisch School of the Arts y su paso por Moscú, cuando tendría su primer papel importante dentro de la industria audiovisual norteamericana. Sería en la independiente Martha Marcy May Marlene, filme que levantó un gran revuelo en Sundance, Cannes y otros festivales, y que encandiló a la crítica tanto como película como por el papel que interpretó Elizabeth Olsen, dando vida a una joven que sufre problemas de salud mental tras escapar de una secta y regresar con su familia. Una cinta que recomendamos muchísimo si no habéis tenido la fortuna de ver y apreciar, porque seguramente os sorprenderá.
A partir de ahí, comenzó un breve periplo en distintas producciones de diferentes índoles, géneros y temática. Pasó por la adaptación americana de Silent House (2011), que no convenció a casi nadie; después se dejó caer por Luces rojas (2012), de nuestro querido Rodrigo Cortés, compartiendo cartel junto a titanes interpretativos de la talla de Cillian Murphy, Sigourney Weaver y Robert De Niro; lideró junto a Josh Radnor la comedia dramática titulada Amor y letras (2012), y co-protagonizó junto a Dakota Fanning el drama romántico Very Good Girls (2013). Por no mencionar también en aquel año Amores asesinos, In Secret y el remake americano de Old Boy.
Estábamos en 2013 y Elizabeth Olsen formaba ya parte de una generación de actrices que llamaban a las puertas de las grandes productoras, abriéndose hueco entre un gran número de intérpretes que querían destacar en un mercado súper competitivo y voraz, un mercado que suele desgastar y se alimenta de jóvenes estrellas que brillan fulgurantemente durante un par de años y luego se consumen como una vela expuesta al fuego durante toda una noche. En definitiva, estábamos en 2013 y Elizabeth Olsen había sido nominada al Premio BAFTA a la estrella emergente. Un premio que se llevó Juno Temple y en el que había otras actrices de la talla de Alicia Vikander (Tomb Raider).
Apenas un año después trabajaría en Godzilla, junto a Bryan Cranston y Aaron Taylor-Johnson y, meses después, anunciaría que protagonizaría con Tom Hiddleston el biopic Hank Williams, una voz a la deriva. Curiosamente, pocos meses después sería también confirmada junto a Aaron Taylor-Johnson para interpretar a Bruja Escarlata en Vengadores: La era de Ultrón. Un papel que, como hemos mencionado, repetiría a lo largo de los siguientes años dentro del UCM hasta llegar a Bruja Escarlata y Visión. ¡Y lo que queda todavía por ver de ella en los próximos proyectos!
Ya dentro de Marvel Studios ha protagonizado la comedia dramática Ingrid cambia de rumbo (2017), la sobrecogedora Wind River (2017) escrita y dirigida por Taylor Sheridan y el filme titulado Kodachrome (2017); además, también ha aparecido en la serie de Facebook titulada Sorry for Your Loss, en la que no sólo era la actriz, sino que funcionaba como productora ejecutiva. Por otro lado, ha aparecido como artista invitada en Drunk History y HarmonQuest.
Como veis, tuvo un inicio muy interesante con una llamativa cinta en la que reveló un gran potencial y que suscitó mucho interés en festivales y entre los críticos de cine, pero no se cerró la puerta exclusivamente a ese tipo de filmes y comenzó a experimentar con todo tipo de propuestas hasta llegar al punto en el que estamos. Podría recordar un poco a Scarlett Johansson, aunque hay que admitir que ella fue una absoluta musa indie en sus inicios con un gran número de películas aclamadas por la crítica que le han permitido después hacer lo que le salga de las narices sin temor a equivocarse.
En definitiva, Elizabeth Olsen apenas lleva una década actuando como quien dice. Su pistoletazo de salida tuvo lugar hace diez años exactamente, pero su futuro es verdaderamente interesante. Con tan sólo 32 años, a ver quién le dice a esta señorita que ya ha tocado techo porque, honestamente, le queda tanto cielo por acabar que no podríamos describirlo con palabras. Lo único que podemos hacer es estar agradecidos por lo que está por venir y disfrutar de un talento en potencia, un diamante en bruto que todavía se está puliendo y del que apenas hemos visto empezar a brillar.
Y a vosotros, ¿cuál es la película de Elizabeth Olsen que más os gusta?
Descubre más sobre David Lorao, autor/a de este artículo.
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