Si vivisteis la época del boom del manga en los años 90, seguro que en algún momento visteis un episodio (o más de uno) de Sailor Moon, el manganime creado por Naoko Takeuchi. Su popularidad era enorme, lo que le sirvió para aparecer en montones de videojuegos en las plataformas de la época (sobre todo, en las de Nintendo). Por eso, quizás no resulte tan sorprendente que fuera el trampolín para que la entonces desconocida Arc System Works diera el salto a los juegos de lucha. Aquí lo podéis ver en detalle:
Hoy en día, Arc System Works es mundialmente conocida por juegazos de lucha muy espectaculares y con un puntito técnico muy característicos, desde BlazBlue o Guilty Gear hasta el reciente y exitoso Dragon Ball FighterZ. Pero a finales de los 80, se dedicaban principalmente a conversiones para consolas de recreativas de éxito, como Vigilante o Double Dragon en Master System.
Ya en los 90, se encargaron de varios juegos de Sailor Moon para la compañía Angel, con aventuras sencillas para Game Boy o beat 'em ups para Mega Drive o Super Nintendo... Hasta que llegó Sailor Moon S: Jougai Rantou!? Shuyaku Soudatsusen para Super Famicom, el que sería el primer juego de lucha uno contra uno de la compañía.
Como podéis ver en el vídeo de aquí arriba, el sistema de lucha de Sailor Moon S para Super Famicom era relativamente convencional, con ataques de "cuarto de luna" (nunca mejor dicho) y ataque, presas y alguna finta, pero también con los Desperation Moves propios de otros juegos de anime y un sistema de personalización de las características de nuestras luchadoras. ¡Y era posible pelear con todas las guerreros! Sin duda, un juego curioso que abrió el camino para el éxito de ASW en el nutrido género del mamporro.
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