3 películas sobre sequías y la crisis climática que dan algo de miedo ver en la actualidad
Está siendo un abril especialmente seco y eso puede hacernos pensar en algunas películas sobre el cambio climático que en el presente dan un poco más de miedo.
El cine de ciencia ficción ha servido como referencia para valorar cualquier avance tecnológico que llega, como puede ser ahora con ChatGPT, pero también cuando se sienten posibles cambios que nos afectan como sociedad.
El cambio climático, o la crisis climática, es algo que nos está sacudiendo desde hace tiempo y este 2023 va camino de ir un paso más allá en nuestro país en cuanto a sequías se refiere.
Esto nos puede llevar a pensar en distopías e historias que hemos visto en pantalla y que son cada vez más inquietantes.
Ya no hablamos de ciudades contaminadas, sino de paisajes desérticos y problemas con el agua, como se pueden encontrar en estas tres películas que vamos a citar.
Mad Max: Furia en la carretera
Mad Max: Furia en la carretera es una referencia más que habitual cuando hablamos de esta temática.
Toda la saga de películas sitúa al espectador en un futuro distópico y desértico, pero este largometraje de 2015 eleva aún más la catástrofe y el paisaje hacia un mundo donde el agua es, quizá, lo más valioso que se puede encontrar, y con lo que se puede comerciar.
Mientras estamos a la espera de que llegue Mad Max: Furiosa, esta es una película que se puede ver una y mil veces por lo espectacular que resulta.
Rango
Cambio de tono y género por completo para acercarnos a una comedia de animación dirigida por Gore Verbinski y protagonizada por un camaleón.
El protagonista, Rango, es un camaleón que por una serie de circunstancias acaba siendo el sheriff de un poblado al que acaba de llegar. ¿Su primer caso? Solucionar el problema que tienen con el agua a causa de la sequía.
Esta es una película algo extraña y sorprendente, pero que merece la pena y se centra en el problema que estamos tratando.
Blade Runner 2049
Aunque relaciones Blade Runner 2049 con la contaminación y las ciudades caóticas, en la secuela dirigida por Dennis Villeneuve se muestra qué ocurre cuando se sale de la ciudad y los parajes desérticos y casi inhabitables que existen.
Años después Villeneuve volvió a los desiertos en Dune, película aún más asfixiante con este tema, pero que ya escapa de la distopía climática para ir hacia tonos más fantásticos. Aun así, el director canadiense parece sentirse cómodo en estos entornos y pronto volveremos a verlo en Dune: Parte 2.
En todo caso, desiertos, tierras hostiles y problemas con el agua. Inquieta ver estas películas, ¿verdad?
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