Análisis de Blacksad: Under the Skin para PS4, Xbox One, Nintendo Switch y PC

Blacksad: Under the Skin es la primera adaptación del famoso cómic español ganador de cuatro premios Eisner al videojuego, obra del guionista Juan Díaz Canales y el ilustrador Juanjo Guarnido. Del proyecto se han encargado Ys Interactive y Pendulo Studios, el estudio madrileño especializado en las aventuras gráficas con títulos a sus espaldas como Yesterday Origins, New York Crimes, o Hollywood Monsters.

En este análisis vamos a repasar si es una adaptación fiel a la esencia del Blacksad original, y cómo ha quedado el resultado final de uno de los cómics más reconocidos de los últimos años en España (y a nivel internacional) en el mundo del videojuego. ¿Ha quedado a la altura de las expectativas? Vamos a comprobarlo.

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Un caso idóneo para Blacksad

En Blacksad: Under the Skin encarnamos a John Blacksad, un gato antropomórfico que trabaja como detective en la Nueva York de los años 50. Hasta aquí todo coincide con lo que sabíamos por los cómics originales, pero se ha optado por no adaptar ninguno de los cinco títulos, es decir, tenemos una historia completamente nueva, que aunque no ha sido escrita por sus creadores originales, sí que ha estado supervisada por ellos.

La trama se centra en el caso de la desaparición de la estrella del boxeo Bobby Yale, y el suicidio de su mentor y dueño del gimnasio donde entrenaba, Joe Dunn. La hija de Dunn, Sonia Dunn, contratará nuestros servicios para que encontremos a Bobby antes de un combate importante, pero a medida que avanzamos con nuestra investigación, averiguaremos que nada es lo que parece.

La historia podría estar sacada de uno de los guiones de Juan Díaz Canales, y adapta con éxito la atmósfera que vemos en los cómics y en las mejores historias del género ‘’noir’’, con varios temas de fondo habituales como la corrupción, las apuestas ilegales, el racismo, las secuelas de la guerra o el comunismo.

El guión es una de las mejores partes de Blacksad: Under the Skin y a pesar de no estar entre las grandes obras de cine o novela negra, tiene todo lo que le pedimos a una trama de crímenes e investigación. Es entretenida, con grandes giros de guión y mantiene el suspense, aunque en ocasiones también peca de un ritmo demasiado lento. 

A lo largo de nuestro camino, nos iremos encontrando con diversos personajes antropomórficos del universo de Blacksad. La mayoría de ellos son originales, pero los fans de la saga también tienen sus propios guiños, con la presencia del comisario Smirnov o el fotógrafo Weekly.

Detalles como estos nos recuerdan que podríamos estar ante un capítulo sacado directamente de los viñetas de uno de los cómics, con una trama bien cerrada y resuelta que puede variar en función de cómo juguemos, con hasta seis finales distintos.

Poniéndonos en la piel (o pellejo) del detective

Y vayamos ya con cómo se juega a Blacksad: Under the Skin. Como no podía ser de otra forma, la parte central del juego es la investigación, y tendremos que recorrer diferentes escenarios para encontrar pistas sobre el caso, bien interactuando con distintos objetos, o interrogando a los testigos mediante conversaciones con varias ramas de diálogo.

Aquí no contamos con el habitual inventario que nos hace almacenar objetos como en muchas aventuras gráficas, y en este caso las pistas que encontremos las anotaremos en nuestra libreta, o se quedaran como ideas con las que luego podemos sacar una deducción relevante sobre el caso. Por ejemplo, podemos encontrar un rastro de pisadas y luego analizar a un sospechoso para ver si coinciden o no.

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El gameplay tiene algunos problemas con el control del personaje, ya que puede resultar demasiado lento, además de tener algunos fallos con la cámara, que no parece colocarse siempre en el lugar más idóneo para interactuar con los objetos.

Pero no todo en Blacksad: Under the Skin sucede durante nuestro de examen sobre el terreno, ya que tendremos que interactuar durante las cinemáticas. En las escenas de vídeo tomaremos algunas decisiones en tiempo real que afectarán al desarrollo de la trama.

Y también tendremos acción pura, ya que se darán distintas situaciones en las que tendremos que actuar mediante QTE, que pueden ir desde esquivar golpes con nuestro stick, a pegar puñetazos, o pulsar repetidamente un botón.

Además, tendremos que hacer algunas deducciones en tiempo real, o investigar a los sospechosos gracias a nuestras habilidades de detective que nos permitirán observar algunos detalles de los personajes para sacar más pistas.

Llegar hasta el final nos puede llevar unas 8 o 10 horas, pero si queremos desentrañar todos sus secretos y finales, la experiencia de juego se alarga todavía más, y tenemos coleccionables en forma de cromos deportivos que añaden algunas horas extras. 

Las sombras de la investigación

Los grandes problemas de Blacksad: Under the Skin llegan a nivel técnico, que es lo que más flaquea, con grandes errores que lastran por completo la experiencia general del título. Tiene muchísimos fallos como ralentizaciones y caídas de frames constantes mientras controlamos al personaje. 

También hay fallos con muchas de las texturas que tardan mucho en cargar, algunos bugs que nos han provocado tener que reiniciar conversaciones e incluso niveles desde el principio, u otros que directamente nos sacan del juego. Se nota que le ha faltado tiempo de desarrollo a pesar del retraso y que todavía está todo por pulir, al menos en la versión de PS4, que es la que hemos probado nosotros (aunque parece algo generalizado, independientemente de la versión).

Estos fallos son verdaderamente molestos y están presentes incluso en las cinemáticas, donde parece que el juego no termina de funcionar correctamente, con errores entre las sincronizaciones de los diálogos, en los QTE, o cuando tenemos que usar las habilidades de Blacksad.

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Gráficamente los modelados de la mayoría de personajes están bien conseguidos, pero los escenarios y el tono no nos hacen meternos en la estética que destacaba tanto en el cómic, más que en algunas situaciones. 

Blacksad: Under the Skin brilla mucho más cuando estamos en localizaciones oscuras y nocturnas, queda mejor plasmada la esencia ‘’noir’’ que se pierde en los escenarios diurnos con colores más vivos y luminosos, donde se desarrolla gran parte de la aventura.

Lo que sí que destaca es el apartado sonoro, con una banda sonora muy bien elegida con piezas musicales que se encargan de introducirnos en ese ambiente neoyorkino de la época con mucha presencia del jazz y del blues, tan característicos de las mejores obras del cine negro.

Las voces están completamente dobladas al castellano, y la mayoría con un buen resultado, aunque como comentábamos, en ocasiones no terminan de encajar con lo que se nos está mostrando en este momento en la escena.

Blacksad: Under the Skin podría haber sido un gran lanzamiento, pero su gran guión e historia y sus interesantes mecánicas quedan lastradas y en un segundo plano por los numerosos problemas de rendimiento, que empañan lo que podría haber sido la experiencia final.

Aún así, estamos ante un título que disfrutarán mucho los fans de los cómics originales, con una buena oportunidad de volver a ver al detective creado por Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido en un nuevo caso. Pero si no sois aficionados de las aventuras gráficas o del Blacksad original, sus errores pesan demasiado en el resultado final.

Si se llegan a pulir todos estos problemas de Blacksad: Under the Skin con futuras actualizaciones podríamos estar ante un gran exponente del género y con la adaptación que se merece uno de los cómics españoles más reconocidos de los últimos años. Pero en su estado actual, mejor esperar a ver cómo evoluciona...