Crítica de Becky, el thriller de acción de estreno directo en Movistar+

Movistar vuelve a la carga con una nueva película, en esta ocasión de estreno directo en la plataforma, dado que no ha pasado por salas comerciales con anterioridad y por tanto permanecía inédita.

Ya solo con el arranque de la película, sabemos que Becky se va a poner bastante turbia: se intercalan los planos de la joven protagonista en el instituto con los de una serie de presos que van a escapar de prisión. ¿En qué momento se cruzarán sus caminos?

La acción se hace esperar mientras vemos este curioso montaje paralelo, algo guasón, que compara el centro docente con el internamiento. Los pasos de los reclusos entre grilletes se mezclan con las apuradas carreras de los muchachos cuando suena el timbre, las instrucciones de los profesores con las de los funcionarios de prisiones...

Cuando el padre de Becky la recoge para pasar un fin de semana en su casa del lago, ella no espera que traiga compañía. Tras la muerte de su madre, víctima de un cáncer, Jeff se decide a rehacer su vida volviendo a casarse con su novia, Kayla.

La noticia le sienta como un mazazo y, muy enfadada, se interna en el bosque con su perro alejándose de ellos. En ese impás, un peligroso neonazi llamado Dominick y sus secuaces irrumpen en el lugar y amenazan con torturar a Jeff si no les dicen donde se encuentra una llave que esconde un bien muy preciado para ellos.

Una vez que descubren que la niña está en las inmediaciones, a Becky no le quedará más remedio que encarar la situación y enfrentarse a ellos con lo que tiene a mano para tratar de rescatarlos.

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Maneras creativas de emplear en material escolar

Jonathan Milott y Cary Murnion se conocieron en la Parsons School of Design formando un tándem creativo responsable de la divertidísima y muy recomendable Cooties: dulces criaturas de 2014; de Bushwick, que llegaría tres años después, y ahora también de Becky.

Sigue intacto su espíritu gamberro y su poco convencional manera de abordar la violencia, concebida como espectáculo de casquería que repelerá a los delicados de estómago (no hay apuro a la hora de mostrar borbotones de sangre y encarnizadas peleas) pero a la vez atraerá a los fans de festivales como el de Sitges, por el que de hecho pasó la cinta.

Dentro de esa mala leche suya tan particular (y que tanto suele jalearse en nuestras muy añoradas salas de cine llenas de amantes de la acción) ha ryecursos tan divertidos como ver a la adolescente utilizando su material escolar como arma contra las malas bestias que atacan a su familia. Y a quienes ella deja a la altura del betún. Creedme cuando os decimos que no volveréis a ver con los mismos ojos las maderas de colores o la regla graduada que no falta en un estuche escolar.

Lulu Wilson que, ojo al dato, leyó el guión con solo once años por primera vez, asume el reto de convertirse en un icono de rebeldía con verdadero empeño. Su camiseta a rayas, sus vaqueros y su gorro hacen del atuendo de "ardillita" algo imperecedero. Una aparente inocencia que quedará hecha añicos cuando la veamos empleándose a fondo en patearles el culo a los neonazis que han arruinado su tranquilidad.

La actriz, una joven diva del terror y el thriller ya si tenemos en cuenta su paso por películas como Ouija: el origen del mal, Annabelle: Creation y series como La maldición de Hill House y Heridas abiertas, tiene talento y presencia y sabe explotar ambas cosas.

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Frente a ella, el caso contrario: el cómico Kevin James (El Halloween de Hubie) cambia de registro en Becky para dar vida a un perverso, manipulador y sanguinario asesino al que no le tiembla el pulso para conseguir lo que se propone. Así que sale de su área de confort para afrontar un nuevo reto.

En fin, en resumidas cuentas, sin grandes pretensiones, más allá de ofrecer un entretenimiento digno, la película da lo que promete y resulta satisfactoria. Lo mismo el guión habría ganado agilidad e impacto de no detenerse tanto a explorar el drama familiar precedente ni explicar de dónde procede la furia de la niña, a fin de cuentas, lo que importa es cómo lleva a cabo su venganza. Y el final, deja buen sabor de boca.