Logo Hobbyconsolas.com
Logo HobbyCine

Crítica de Jurassic World: Dominion - Baño de nostalgia y escala XXL

- Actualizado:
Jurassic World: Dominion

Crítica de Jurassic World: Dominion, la sexta película de la saga Parque Jurásico dirigida por Colin Trevorrow y protagonizada por Chris Pratt y Bryce Dallas-Howard. Estreno en cines el 9 de junio.

¡Larga ha sido la espera para poder hablaros de Jurassic World: Dominion, la tercera entrega de la nueva trilogía que arrancó en 2015 con Jurassic World y prosiguió en 2018 con Jurassic World: El reino caído.

A grandes rasgos, se percibe como un episodio que quiere ensanchar las fronteras de la franquicia más que nunca introduciendo un mayor número de especies (aquí podéis leer acerca de las que aparecen en la cinta) pero sobre todo abriendo el espacio y dejando atrás uno de los elementos básicos de la saga como era la constricción del espacio para evitar la propagación de los saurios.

Como ya quedó patente desde los primeros avances, vais a verlos en todo tipo de hábitats: desde ciudades hasta desiertos, paisajes helados o interaccionando con animales de los que pueblan el mundo que conocemos a día de hoy.

Así que hay algo de impactante en el metraje que hace que, a pesar de que los efectos especiales y la animatrónica sean más que correctos, se perciba con extrañeza... y también en buena medida como un sueño pesadillesco a veces, hecho realidad.

El caso es que, ya sabéis, ¡la vida se abre paso! Las devoluciones a Parque Jurásico son tantas y tan grandes, que los espectadores enamorados de aquella primera piedra surgida del singular binomio Steven Spielberg-Michael Crichton van a encontrar un montón de deliciosos homenajes.

No nos referimos solo al cacareado retorno de Laura Dern, Sam Neill, Jeff Goldblum o BD Wong en el rol del Doctor Henry Wu, sino a secuencias completas que son calcadas a las de la primera película y el retorno de criaturas como el dilophosaurus.

El caso es que toda esa parte de la película Jurassic World: Dominion es la que tiene más interés y miga mientras que el resto, es bastante plana. Espectacular a nivel visual, sin duda y con nervio en alguna que otra secuencia de acción, pero también mucho menos atractiva.

Así, la mayor fortaleza de la película, se convierte en su mayor debilidad también: no hay comparativa posible entre lo que fue una obra maestra en todos los sentidos (utilización de nuevas tecnologías, respeto y dignificación de las más punteras teorías paleontológicas, ecologismo, reflexiones éticas, etc.) y una película que solo crece cuando se espeja en ella.

No podemos dejar de señalar en nuestra crítica de Jurassic World: Dominion que se trata del episodio más largo hasta la fecha: cerca de dos horas y media de metraje en total. Ni que decir tiene que eso no la hace mejor, sino que por el contrario hace que pase por bastantes baches de ritmo y por momentos que se paladean de forma muy distinta.

A quienes les pese el desarrollo de vínculos emocionales entre humanos y dinosaurios con cierta antropomorfización de las criaturas, tendrán quejas, como las tuvieron con las películas anteriores, pero hay que reconocerle a Colin Trevorrow que haya conseguido crear momentos muy emotivos sin dejar de lado a referentes seminales como las cintas de stop-motion de Ray Harryhausen.

Jurassic World Dominion

Lo que llama la atención de forma más poderosa en Jurassic World: Dominion es el exiguo argumento: al salir de la sala de cine la sensación es que no se comprenden las motivaciones del villano, ni tiene ni pies ni cabeza su comportamiento.

Tampoco es que sea ninguna sorpresa su implicación en la trama, que pone en peligro el equilibrio natural y puede llevar al desastre... A santo de qué se la juega de esa forma es algo que nunca se llega a explicar.

El caso es que, por lo que se ve, no tiene nada que ver de forma directa con la coexistencia entre los humanos, la fauna y flora del siglo XXI y la fauna modificada genéticamente... ¿?

Hay varias patadas en el estómago al mundo científico que van a doler mucho a más de uno como que una supuesta persona que es un exponente en su materia que habla de que la vida se inició en la Tierra hace 65 millones de años [no tengo emoji para insertar aquí pero sería facepalm]. 

 

La película es muy entretenida y no te deja indiferente, pero no siempre en el buen sentido. Es a menudo una colección de exuberantes secuencias que abusan de carnívoros dientudos poniendo a los personajes en apuros con un salvamento increíble de último minuto. Es imposible dejar de mirar la pantalla y el acabado de los efectos visuales es sobresaliente, pero no hay trasfondo.

Se echa en falta profundidad, argumento y el mensaje ecologista porque muchas de las cuestiones que se abordan: la caza furtiva, las pelas de dinosaurios clandestinas, el tráfico de animales, etc. ya se apuntalaron con más tino en las entregas precedentes.

¡Y hasta aquí podemos leer! Recordad que podréis disfrutar de Jurassic World: Dominion en los mejores cines mañana mismo, 9 de junio! ¡Os esperamos en los comentarios!

Adicionalmente os recordamos que podéis viajar al Cretácico viendo la serie documental de la BBC Planeta prehistórico en Apple TV+ y que en Netflix tenéis Jurassic World: Campamento Cretácico, que también enlaza con Parque Jurásico y forma parte del canon de la saga. ¡Larga vida a los grandes saurios del pasado!

VALORACIÓN:

Hace más grande la primera entrega de la saga porque nos recuerda lo buena que fue y cuánto cambió el panorama en su día, pero no pasa de ser entretenida, le falta mucha enjundia.

LO MEJOR:

La vieja escuela en todos los sentidos: el reparto maduro, los homenajes, guiños, la banda sonora que no remite a Parque Jurásico.

LO PEOR:

Está muy mal narrada, es confusa y tiene muy poco argumento más allá de acción, rodada eso sí con esmero. ¡Es un cacao!
Hobby

60

Aceptable

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.