En poco más de dos semanas, Barbie y Oppenheimer aterrizarán con fuerza en las salas de cine de casi todo el mundo para ofrecer a los espectadores dos propuestas que no pueden ser más distintas.

Barbie, la película de Greta Gerwig (Mujercitas) con Margot Robbie y Ryan Gosling al frente de un reparto espectacular, nos lleva al colorido mundo de Barbie en una combinación satírica muy bizarra con la muñeca de Mattel en el centro de la acción.

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Por su parte, Christopher Nolan nos propone Oppenheimer, un oscuro biopic sobre uno de los conocidos como "padres de la bomba atómica". Cillian Murphy se mete en la piel de uno de los hombres que cambió la historia para siempre. Una figura trágica a la par que brillante.

Sendas películas se estrenan el 21 de julio en cines y protagonizan una suerte de "duelo" que, en términos de taquilla, ganará muy probablemente Barbie por su calificación por edades y su tono más relajado. Sin embargo, no es el primer "baile" que tiene Christopher Nolan en estos términos.

Un nuevo tango para Christopher Nolan, esta vez con Barbie

Tenemos que remontarnos 15 años atrás, hasta julio de 2008, concretamente el 18 de aquel mes, cuando Mamma Mia! se estrenaba en los cines para ofrecer un verano musical sin parangón. Christopher Nolan estaba en plena trilogía de Batman y le tocaba estrenar El Caballero Oscuro.

Tal y como recuerdan en Looper, ambas películas disfrutaban de elencos estelares y premisas atractivas que las convirtieron en producciones muy queridas por el público y en sendos taquillazos. El Caballero Oscuro fue la película más taquillera de 2008, mientras la película de Phyllida Lloyd quedó en quinta posición, pero con una muy buena recaudación.

Barbie y Oppenheimer comparten ese encanto de un duelo en la cartelera que, en realidad, no es tal, pero que genera un interés genuino en ver películas muy distintas en las salas de cine, lo que hace que, en última instancia, el Séptimo Arte salga ganando.

Siempre se puede hacer como Tom Cruise y ver tanto Barbie como Oppenheimer, salvo que vivas en Vietnam, que ha vetado la película de Greta Gerwig por un conflicto geopolítico.