Mark Hamill desvela cuál es el objeto más valioso de la película de Star Wars que conserva
De entre todos los objetos del rodaje de Star Wars que Mark Hamill pudo llevarse a casa, el actor escogió algo que, para él, no tiene precio.
Es tradición que, una vez finalizado el rodaje de una película, los actores y el equipo se lleven algún recuerdo de su paso por la producción. Star Wars no es ninguna excepción a esa regla.
Adam Driver, por ejemplo, se quedó el sable de luz y el casco de Kylo Ren en la trilogía de las secuelas. Diego Luna se llevó a casa unos cuantos créditos del rodaje de Rogue One: Una historia de Star Wars.
Como no podía ser de otra manera, Mark Hamill no falta a su cita con las anécdotas de Star Wars. El actor que dio vida a Luke Skywalker.
A través de Twitter, Hamill respondió a la pregunta directa de Rupert Myers sobre cuál era el artículo más valioso que se había quedado de sus días en el rodaje de Star Wars. El actor destaca que se trata de las botas de Luke Skywalker que usó en Star Wars episodio IV: Una nueva esperanza.
Mark Hamill admite que no tiene ni idea del precio que tendrán ese par de botas actualmente, pero dice que no le importa, ya que no tiene intención alguna de venderlas.
Algunos artículos de utilería de los rodajes famosos llegan a alcanzar cifras muy locas en subastas. Star Wars es una de las franquicias mejor valoradas en ese territorio, con piezas vendidas por cifras astronómicas.
El sable de luz de Luke en Una nueva esperanza y El Imperio contraataca, por ejemplo, alcanzó los 250.000 dólares, y el blaster de Han Solo en El retorno del Jedi ascendió hasta los 550.000 dólares.
De entre las ventas más locas, encontramos una réplica del Ala-X de Luke en Una nueva esperanza que alcanzó recientemente los 2,3 millones de dólares. La pieza de utilería de Star Wars que mayor precio ha alcanzado es una réplica de R2-D2 que se vendió por 2,7 millones.
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