Las redes sociales han encontrado a sus nuevos enemigos: los hijos de los actores con carreras prominentes.
Siempre ha sido así, en cualquier industria muchos de los hijos con padres que han trabajado en ella acaban dedicándose al oficio de su progenitor e incluso heredando su negocio. Una situación que se vive especialmente en la industria del cine, especialmente en Hollywood donde hay toda una generación de los llamados "nepobabies" tanto en el cine como en la televisión de ahora.
"Hijos de" que se han convertido en el nuevo objetivo del odio de internet después de que Lily-Rose Depp, hija de Johnny Depp y Vanesa Paradis, asegurase en una entrevista que su éxito no tiene nada que ver con el hecho de que sus padres sean famosos en la industria del cine. "Para mi no tiene sentido reducir el trabajo de alguien a la idea que es algo generacional".
"No tiene sentido. Si el padre o la madre de alguien es médico y su hijo es médico también, nadie va a decir: "bueno, es médico porque sus padres también lo son", aseguraba Lily en una entrevista con la revista Elle. Unas declaraciones que no han sentado bien a muchos, sobre todo, por la obviedad de que para ser médico hay que estudiar una carrera y para ser actor no es realmente necesario.
Este comentario de la hija de Johnny Depp ha generado una avalancha de comentarios en redes que han acabado salpicando a otros "nepobabies", especialmente a la hija del director Judd Apatow y la actriz Leslie Mann, Maude Apatow, una de las protagonistas de la serie de HBO Max, Euphoria que, por cierto, también está creada por un "nepobaby", el hijo del director Barry Levinson.
Ella ha sido otras de las que se ha pronunciado contra la etiqueta que le acusa de haber conseguido su trabajo a través del nepotismo. "Intento que no me afecte porque, obviamente, entiendo que estoy en una posición privilegiada. Mucha gente en mi misma posición ha conseguido demostrar lo que vale a lo largo de los años, así que yo voy a seguir trabajando".
Tal como dice Apatow, los hijos del nepotismo han existido siempre en la industria del espectáculo, pero lo cierto es que ahora estamos viviendo una época en la que prácticamente todas las "estrellas emergentes" del panorama tienen algún tipo de conexión con personalidades ya conocidas dentro del "mundillo".
Jamie Lee Curtis sale en defensa de los "nepobabies"
Aunque es evidente, se ha de señalar que el hecho de que una persona haya tenido más oportunidades que cualquier otra por tener padres metidos en la industria, no significa atacar a su talento, pues no todos los hijos del nepotismo tienen la misma formación o dedicación a su trabajo. Y esto, precisamente lo que ha querido recalcar la veterana Jamie Lee Curtis.
Hija de los míticos actores del Hollywood dorado Tony Curtis y Janet Leigh, la actriz lleva 44 años en el mundo del cine y de la televisión desde que hiciese su debut con 19 años en un episodio de la serie Quincy. "Nunca he entendido, ni lo haré, qué cualidades hicieron que me contratasen ese día".
"Pero desde que conseguí el contrato en Universal no ha habido un día en mis 44 años de carrera en el que no se me haya recordado que soy la hija de dos estrellas de Hollywood. La actual conversación sobre los nepobabies solo se ha creado para humillar, denigrar y hacer daño", aseguraba la actriz en una reciente entrevista.
Sin duda, la actriz es un claro ejemplo de lo que se puede conseguir con un pequeño empujón dado por el apellido de sus padres pero con un interés real en conseguir hacerse un hueco en la industria del cine por su talento y su gran trabajo.
Los "nepobabies" que no salieron tan bien
Puede que Jamie Lee Curtis sea el ejemplo de los "hijos de" que consiguieron salir adelante gracias a su talento, pero también hay muchos ejemplos en Hollywood de "nepobabies" que dejaron el nombre de sus padres por el suelo. Como por ejemplo, Chet Hanks, hijo de los actores Tom Hanks y Rita Wilson que intentó aprovechar su apellido para introducirse en el cine y en la música.
Sin embargo, ninguna de sus incursiones salieron como él esperaba y esto sumado a su habitual consumo de cocaína y su tendencia a destrozar las habitaciones de los hoteles, ha hecho que se convierta en "el hijo de Tom Hanks que todo el mundo se olvida que existe".
Algo parecido a lo que le sucedió a Jaden Smith, hijo de los actores Will Smith y Jada Pinkett-Smith, que después de participar en dos superproducciones como fue el reboot de Karate Kid y la película After Earth junto a su padre, decidió dejar de lado la actuación ante la evidencia de que no era lo suyo.
Quizá lo que peor sienta a la gente de internet de los actuales "nepobabies" es su gran expansión, pues antes muchos de ellos incluso llegaban a cambiarse el nombre para no ser reconocidos por sus padres, pero ahora exhiben sus apellidos sin pudor e incluso posan en alfombras rojas junto a sus progenitores. ¿Es esta la era del nepotismo en Hollywood?
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