Los pokémon más odiados por los jugadores de Pokémon GO
Cuando en 2016 Niantic lanzaba Pokémon GO para iOS y Android, pocos se esperaban que su éxito y popularidad fueran tan enormes a día de hoy. Ya no sólo entre fans de la saga de Nintendo o de los videojuegos, sino que Pokémon GO ha enganchado a todo tipo de personas en todos los rincones del mundo.
Pese a que inicialmente sólo incluía pokémon de la primera generación, poco a poco se han ido añadiendo muchas más criaturas del resto de generaciones; desde Johto o Hoenn a Sinnoh o la reciente Galar de Pokémon Espada y Escudo. En Pokémon GO tendremos que capturar todos los pokémon posibles, entrenar a nuestro mejor equipo y derrotar a toda clase de rivales, como en la saga RPG para consolas.
Sin embargo...hay pokémon que casi todo el mundo evita y no quieren atrapar. Y no, no hablamos de los habituales Pidgey o Rattata, que ya nos dieron pesadillas en los juegos originales. Pista: uno de los diez elegidos protagoniza la imagen de portada de este reportaje.
¿Quieres saber cuáles son los 10 pokémon más odiados de Pokémon GO? Pues adéntrate en esta selección de criaturas de todas las generaciones, que desearás no tener que atrapar o enfrentar en tu smartphone...
Bidoof
Este pokémon debutó en la cuarta generación de Pokémon, con las ediciones Perla y Diamante. Se trata de una variante del clásico Rattata o incluso Zigzagoon, de tipo normal y que encontraremos con bastante frecuencia en Pokémon GO.
Pese a que es un pokémon bastante bonito (y plasta, no nos engañemos), muchos jugadores de la comunidad de Pokémon GO creen que es más molesto que adorable, y que su grito característico es desesperante. Pobre Bidoof, te llevas el primer ''hate'' de esta lista.
Cherrim
La evolución del pequeño Cherubi es otro de los odiados por la comunidad de Pokémon GO, aunque esta vez se debe a otro motivo. De tipo planta y debutante en la cuarta generación, la característica principal de este pokémon es que tienes dos formas: encapotado (estándar) y florecido (clima soleado o sol abrasador).
Muchos usuarios de Pokémon GO se quejan de que Cherrim no tiene forma shiny, y que la dificultad de atraparlo no compensa con su potencial, amén de gran cantidad de Ultra Balls desechadas para intentar hacerse con él.
Zubat
Algunas cosas nunca cambian, y el odio a Zubat es una de ellas. Desde que debutó en la primera generación de Pokémon Rojo / Azul / Verde en 1996, la sensación de encontrarse con varios murciélagos Pokémon es poco menos que desesperante. La ventaja es que sus dos evoluciones son bastante poderosas, en especial Crobat.
El principal motivo del odio que genera en Pokémon GO es que es más difícil de capturar de lo que parece, ya que está volando constantemente, y algunas veces se da como recompensa en algunas batallas.
Sunkern
Este pequeñín de tipo planta nunca ha sido demasiado popular, ni tan siquiera cuando debutaba en la segunda generación Pokémon, con Plata / Oro / Cristal. Sus bajas estadísticas (todas igualadas a 30) y su debilidad juegan mucho en su contra, y su evolución Sunflora tampoco mejora demasiado.
Lo cierto es que no existe un motivo más concreto del por qué del odio a Sunkern en Pokemon GO, quizás sea porque simplemente es una de esas criaturas adorables, que como peluche mola pero poco más.
Murkrow
Este pokémon cuervo de tipo siniestro no cuenta con el apoyo de la comunidad de Pokémon GO, y es de esos que una vez capturados se convierte en enemigo público número 1. Se podría decir que es el otro Pidgey en la segunda generación, pese a que Honchkrow, su evolución, es un pokémon muy interesante y fuerte.
Los jugadores se quejan de que su forma shiny (de color morado) es muy difícil de conseguir, y que su frecuencia de aparición llega a ser desesperante, algo que en los títulos originales de Johto no era tal.
Exeggcute
Aquellos tiempos en los que atrapábamos a Exeggcute y a su evolución Exeggutor en el Safari quedaron muy atrás, en los juegos de la primera generación. Sí, este pokémon huevo de tipo planta sigue siendo difícil de capturar, ya que su circulo de captura es muy pequeño.
Pero si hablamos de dificultad, evolucionarlo se convierte en una ardua tarea que no vale la pena en relación a su potencial, aunque no es ni mucho menos un pokémon débil. La mayoría de jugadores abandonan su captura para siempre cuando consiguen un ejemplar lo suficientemente fuerte.
Gulpin
La verdad es que este venenoso pokémon introducido en la tercera generación nunca tuvo una buena reputación, y lo mismo podemos decir de su evolución, Swalot. Este extraño y bizarro diseño es el motivo principal por el que la comunidad de Pokémon GO odia a Gulpin, además de su complejo de mofeta.
Este es otro caso en el que no hay un motivo de peso para odiarlo, simplemente es más común de lo que debería ser... y te puedes llevar un buen Gas venenoso de regalo.
Yanma
Creo que no hay dudas de que Yanmega es uno de los pokémon de tipo bicho más molones...pero para ello primero tendrás que evolucionar a Yanma. Esta pequeña libélula es muy escurridiza, no es demasiado común y su ratio de captura no es nada sencillo.
Si descubristeis a Yanma en Pokémon Plata / Oro / Cristal, generación en la que debutó, no había demasiados incentivos para atraparlo, pero a partir de la cuarta generación existe la motivación de conseguir su evolución. Suerte gastando Poke Balls mientras esquiva todos nuestros intentos...por eso se le odia tanto en Pokémon GO.
Nosepass
Otro de esos pokémon odiados sólo por su diseño, el cual tenemos que reconocer que es bastante bizarro, y ya lo era en su debut en la tercera generación.. Su evolución, Probopass, sube la apuesta con una extraña barba bajo su enorme nariz de roca...
Un usuario de Pokémon GO dijo que su primer pokémon de sello rojo, con habilidades y características especiales, fue Nosepass, y no se le notaba muy ilusionado. En todo caso, si a ti te gusta, tranquilo, porque no hay un motivo racional para odiar a este pequeño narizotas.
Castform
Sin duda, el caso que más lástima da en toda la lista. Hay que reconocer que la idea de Castform es genial, con sus tres aspectos distintos en relación a la meteorología, y son realmente bonitos. Pero el problema es el mismo que ocurría en los juegos de tercera generación, donde debutaba, Rubí, Zafiro y Esmeralda.
Castform es un pokémon muy débil, con unas estadísticas muy bajas, y lo peor es que no tiene evolución. Muchos jugadores de Pokémon GO se preguntan el por qué Game Freak no le dio una forma evolucionada a este pokémon, porque más allá de sus tres variantes no tiene sentido tenerlo en tu equipo.
¿Qué te parece esta selección de Pokémon más odiados por los jugadores de Pokémon GO? ¿Crees que su odio en Pokémon GO está justificado? Hay que decir que muchas veces son manías que cada jugador tiene, o que simplemente esperábamos un mayor poder o evolución, pero todos tienen sus cosas únicas y eso convierte a Pokémon es algo genial e inolvidable.
Descubre más sobre Ángel Morán Santiago, autor/a de este artículo.
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