Logo Hobbyconsolas.com

Sesión de terror con los Zelda de CD-i: Historias del Tío Bruno

Tio Bruno ZELDA CD-I cabecera
Celebramos el 35 aniversario de The Legend of Zelda de la peor forma posible: jugando a las tres entregas de la franquicia para CD-i. Una experiencia no apta para gente sensible.

El pasado 21 de febrero The Legend of Zelda cumplió 35 años. Aquel juego para el formato Famicom Disk System, que nosotros descubrimos un par de años más tarde ya como cartucho para NES, marcó el inicio de una de las franquicias más queridas de la historia de los videojuegos, y que continúa en plena forma hoy en día. Podríamos hacer repasado los mejores juegos de la saga, pero el Tío Daniel, haciendo gala de su conocida crueldad, propuso algo distinto: una sesión de gameplay con las terroríficas aventuras de Link y Zelda para CD-i. Si no teméis enfrentaros al HORROR, cara a cara, pinchad en el vídeo de abajo. Y que no os avergüence llorar.

¿Cómo surgió esta abominación en tres actos? Bueno, hay que remontarse a los albores de los 90, cuando Nintendo, o más bien su carismático y todopoderoso presidente, Hiroshi Yamauchi, decidió dar marcha atrás al acuerdo que habían alcanzado con Sony para producir la unidad de CD-ROM para Super Nintendo. De un día para otro, Nintendo decidió cambiar de socio, apostando por Philips, lo que acabaría desencadenando la creación de PlayStation a manos de una Sony decidida a volar en solitario. Los planes de los holandeses para crear el CD-ROM de SNES jamás se harían realidad, pero a cambio se llevaron un jugoso acuerdo para producir videojuegos para su CD-i protagonizados por personajes de Nintendo.

Tio Bruno ZELDA CD-I faces of evil caratula

Link: The Faces of Evil y Zelda: The Wand of Gamelon fueron los primeros títulos en surgir de dicho acuerdo. Dos aventuras desarrolladas al mismo tiempo por Animation Magic, una compañía fundada por un americano y un ruso, que no contaban con la experiencia, los medios, el presupuesto y el tiempo suficiente para producir algo que estuviera a la altura de la querida franquicia de Nintendo. Esto, sumado a las limitaciones del hardware de CD-i (una consola diseñada para el multimedia), acabo dando como resultado dos auténticas castañas que llegarían a las tiendas simultáneamente a finales de 1993.

Tio Bruno ZELDA CD-I wand of gamelon caratula

The Faces of Evil estaba protagonizada por Link, mientras que The Wand of Gamenon nos permitía controlar a la princesa Zelda. En ambos juegos se desechó la vista cenital habitual de la saga para apostar por un desarrollo lateral, como el que ofrecía The Legend of Zelda II en NES. En el vídeo de arriba podéis ver el resultado: control infame, un diseño de escenarios absolutamente demencial y una mecánica terrible.

Tio Bruno ZELDA CD-I faces of evil gameplay

Una de las condiciones que Philips impuso a Animation Magic fue que aprovecharan al máximo las posibilidades multimedia del CD-i, así que el estudio reclutó a unos animadores rusos para crear las intros de ambos juegos, además de diversas secuencias “in-game”. Aunque dan escalofríos, las secuencias muestran una animación muy cuidada, pero el diseño de los personajes es horripilante. Aún hoy en día seguimos sin entender cómo Nintendo pudo dar luz verde a semejante despiporre, cuando siempre han controlado al milímetro la utilización, por parte de terceros. de sus propiedades intelectuales.

Tio Bruno ZELDA CD-I zelda adventure caratula

No habían transcurrido ni dos años desde aquel desastre cuando Philips sacó al mercado un tercer Zelda para CD-i, que llegaría al mercado en el verano de 1995. Zelda’s Adventure fue obra de otra compañía diferente, Viridis Corporation, que apostó por retomar la perspectiva cenital clásica de los Zelda, pero con una “particularidad”: el juego utilizaba gráficos digitalizados.

Tio Bruno ZELDA CD-I zelda adventure melenas

The Faces of Evil y The Wand of Gamenon al menos podían presumir de unos escenarios hasta cierto punto bonitos. Zelda’s Adventure ni eso. Aquí nos encontrábamos con una horror pixelado que tenía como protagonista a la princesa Zelda, decidida a rescatar a Link de las garras de Ganon. Ese cambio de roles (también presente en The Wand of Gamenon) es lo único salvable de una aventura esperpéntica, en la que se tarda un mundo en pasar de una pantalla a otra. Y para mantener el "look digitalizado", se decidió prescindir de la animación rusa para mostrar secuencias de vídeo real, a cargo de actores disfrazados como si fuera El secreto del talismán de TVE o una representación de barrio de La vida es sueño de Calderón de la Barca.

Estas tres “peculiares” entrega de Zelda y Hotel Mario fueron el fruto de la fallida asociación entre Nintendo y Philips. Se llegó a dar luz verde a un cuarto título, Super Mario’s Wacky Worlds, un plataformas 2D bastante prometedor cuyo desarrollo acabo cancelándose, aunque su creador acabó filtrando la beta hace unos años. Un triste balance para un acuerdo que acabaría provocando el nacimiento del mayor competidor de Nintendo en las décadas posteriores.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.