En nuestro análisis de Red Wings os contamos si merece o no la pena este juego de combate aéreo que llega hoy a Nintendo Switch en formato físico, incluyendo algunos extras.
Lanzado hace casi un año en formato digital, Red Wings llega hoy a las tiendas de la mano de Meridiem Games, quienes siguen apostando firmemente por el formato físico, ya sea en Nintendo Switch (hace poco lanzaron Oddworld Collection) como en PS5 o PS4 (Terminator Resistance Enhanced ).
Ahora le llega el turno a un interesante arcade de combate aéreo que, como vamos a ver en este análisis de Red Wings para Nintendo Switch, es ideal para quienes busquen un juego con dos cualidades: que ofrezca un planteamiento para partidas cortas y con alto valor rejugable.
Red Wings: Aces of the Sky Baron Edition - trailer de lanzamiento
Como el propio título adelanta, Red Wings alude a uno de los pilotos más famosos de la aviación, el famoso Barón Rojo, una figura que surcó los cielos en la I Guerra Mundial con el bando alemán.
Este detalle ya deja el telón de fondo bien asentado: los combates aéreos de la I Guerra Mundial, aunque a diferencia de otros juegos de corte similar, aquí todo es bastante arcade y accesible, además de estar rematado con un atractivo estilo visual Cel Shading.
La propuesta jugable de Red Wings gira en torno a tres modos distintos. Por un lado está la campaña, que en realidad es doble, ya que podemos elegir tanto a la Triple Alianza como a la Triple Entente.
Cada facción cuenta con sus propias misiones y sus propios aviones, por lo que son distintas... aunque las sensaciones jugando sean prácticamente las mismas. Además, cada campaña cuenta con sus propias páginas de cómic, viñetas que dan algo de fondo a la historia.
Pero que nadie se llame a engaño: aquí la Historia es puramente testimonial, no hay nada de decisiones políticas, estratégicas ni nada: sólo un puñado de pilotos que se juegan la vida en el aire, dejando a un lado todo lo demás.
Dicho esto, las misiones suelen abordar todos los tropos del género: abatir oleadas de naves enemigas, derribar objetivos específicos (como zepelines de observación enemiga), proteger a nuestros efectivos, misiones de bombardeo de objetivos o una suerte de "carreras" que nos invitan a pasar por ciertos checkpoints...
Poco más se puede hacer en el aire, y sobre todo en esta época, en la que la tecnología aeronáutica estaba en pañales. Es decir, el trasfondo histórico y tecnológico de la época limita bastante el diseño de las misiones. Aun con todo, el enfoque arcade está siempre presente, presente incluso en detalles como unos aros flotantes que también nos recuperan combustible nivel de daño de la nave.
Por suerte el control de Red Wings es tan bueno como sencillo, lo que hace que la acción sea bastante satisfactoria y fácil de coger desde el minuto uno: con el stick izquierdo controlamos la dirección del vuelo, mientras que con el derecho, la velocidad; con R y ZR disparamos, ZL para hacer zoom sobre la mira y con L para dar giros más cerrados...
Poco más: no hay control de flaps, ni nada que lo haga un poco más simulador. Es un control directo y sencillo. Y si te estás preguntando ¿y los botones X, Y, A y B? No te preocupes, a eso llegaremos en breve, porque también tienen uso...
Este planteamiento de las misiones tienen a su favor que son relativamente cortas (algunas no llevan ni 5 minutos), aunque son altamente rejugables. Porque, como muchos éxitos de móvil, cuentan con un sistema de puntuación de 1 a 3 estrellas, que invitar a rejugarlas para alcanzar mayor puntuación.
Aquí entra en juego el tiempo empleado, el combo de bajas que realicemos (cuando hemos dicho que era un arcade, era por algo)... Las estrellas ganadas las podemos canjear en nuestro árbol de habilidades.
Contamos con cuatro habilidades especiales, asociadas a cada uno de los botones frontales. Estas habilidades tienen un período de enfriamiento, pero las podemos usar en cuanto estén disponibles, y nos ayudan en la batalla de distinto modo.
Así, podemos realizar toneles que nos vuelven invulnerables momentáneamente, realizar un rápido giro de 180º, llamar a un escuadrón para que nos ayude o, la más impresionante de todas, abatir a un piloto de un tiro. Podéis ver esta última debajo de estas líneas...
Aparte de estas cuatro habilidades, que tienen mejoras como un enfriamiento más rápido, existen otras que nos permiten mejorar el daño de nuestra ametralladora, su capacidad de atravesar blindaje, aumentar la cantidad de combustible que podemos llevar (y que podemos recuperar volando a través de unos aros flotantes)...
Además, en cualquier momento podemos reasignar las estrellas ganadas para activar las mejoras que necesitemos en una misión en concreto, lo que hace aún más accesible la acción. Y lo mejor de todo es que la campaña está diseñada para que un segundo jugador se nos una en modo local y nos ayude.
Nuestro progreso en la campaña, además, desbloquea nuevos tipos de aviones (5 por cada bando), así como skins especiales para cada modelo (por ejemplo, con daños en el chasis).
Fuera del modo campaña que tiene cerca de 50 misiones entre los dos bandos, hay otros dos modos de juego. "Sobrevivencia", que nos reta a abatir oleadas de aviones enemigos y conseguir la mejor puntuación en el ránking online (ahí entran en juego los combos) y Enfrentamiento, que es para dos jugadores a pantalla partida.
Estos enfrentamientos se pueden disputar compartiendo los JoyCon (es decir, uno cada jugador, perdiendo el control de la velocidad) y nos permiten participar en tres tipos de partida: batalla de puntos (gana el que primero alcance el tope marcado), batalla de tiempo (el que alcance mayor puntuación en el tiempo fijado) o escondite (debemos buscar al oponente entre aviones iguales).
Podemos definir nosotros algunas características, como el tope de puntos a alcanzar (10.000, 20.000, 100.000...) o, en algunos modos, si queremos presencia de bots que nos ayuden, lo que también anima la acción con más aviones a la vista.
El problema de estos modos, como la campaña, es que tras las primeras partidas, ya lo has visto todo y sólo nos esperan situaciones repetidas de lo visto anteriormente, con enemigos más resistentes, un nuevo escenario de fondo, con más oleadas de enemigos... pero poco más.
Dicho mal y pronto, Red Wings no es un juego que destaque por su variedad. Quizá se podrían haber diseñado más tipos de misión, aunque del mismo modo, es innegable que donde brilla realmente el juego es en el combate aéreo (las misiones de bombardeo nos han parecido ligeramente inferiores).
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Red Wings Nintendo Switch (6 imágenes)
Dicho esto, lo que sí nos ha conquistado es la parte técnica: el cel shading le sienta que ni pintado al diseño de los aviones o en las secuencias como la habilidad de disparo que hemos mostrado antes. Además, Red Wings no petardea ni aun cuando confluyen muchos aviones, disparos y explosiones en pantalla.
Los tiempos de carga, superada la carga inicial brillan casi por su ausencia, y el arte que ilustra las misiones remite a los libros bélicos del siglo pasado, con un estilo muy marcado y satisfactorio. En líneas generales, visualmente está muy cuidado y tiene personalidad propia.
También incluye música que intenta transportarnos a la época del juego (como la que escucharemos en la radio del menú principal) y se han introducido opciones como controles por movimiento que, aunque no son lo más preciso del mundo, ahí están para el que le guste probar este tipo de control.
En cuanto a la la edición física de Red Wings: Aces of the Sky - Baron Edition, disponible desde el 2 de julio para PS4 y Nintendo Switch, podéis ver arriba sus contenidos.
Viene presentada en una caja especial de cartón, una suerte de sobrecubierta que protege tanto el juego en físico como sus dos extras: un póster y un libreto con algunas de las ilustraciones que se ven en el juego (cómic y cortinillas entre misiones). Podéis verlo debajo de estas líneas...
Por todo esto, Red Wings es un título que tiene todas las papeletas para gustar a los fans de la acción aérea. Adolece del principal defecto de muchos juegos del género (poca variedad de situaciones), pero lo compensa con un buen diseño de la acción y características que se agradecen, como el toque RPG de las habilidades o su sistema de puntuación.
Pero sobre todo, Red Wings es el típico juego al que puedes estar volviendo durante meses, porque su esquema de partidas cortas invita a ello, y eso sin contar con el innegable atractivo de poder compartirlo con otro jugador en cualquier momento y lugar.