Logo Hobbyconsolas.com
Logo HobbyCine

Crítica de Final Space, temporada 1 - Ya en Netflix

Jesús Delgado

Final Space, temporada 1
Final Space es la serie de animación de Conan O'Brien y Olan Rogers que rinde tributo a clásicos de la ciencia ficción como Star Wars, La Guía del Autoestopista Galáctico y Futurama. Una comedia fantástica que sorprende y que analizamos hoy.

En 2018, la cadena TBS emitió su nueva apuesta por el género de la comedia y de la ciencia-ficción, la serie animada para adultos Final Space. Este programa, pergeñado por el cómic Olan Rogers y producido por varias figuras del late show Conan, entre las que se cuentan el propio Conan O'Brien, aterrizó poco después en nuestro país de mano de TNT. Ahora, quienes no pudierais ver la temporada 1 en dicha cadena, podéis hacerlo a Netflix, que como responsable de su distribución internacional, ya se la ha sumado a su catálogo.

¿Pero qué es esto de Final Space? Desde lejos parece una "copia" de Futurama o una historia de ciencia-ficción más. De hecho, sus títulos iniciales pueden parecer pretenciosos y que la serie está orientada a un público poco exigente y muy impresionable. ¡Mas aún! Sus primeros minutos pueden haceros pensar que estamos ante una serie que quiere ir de graciosa y se hace cargante. ¡Nada más lejos de la realidad!

Ciertamente, la serie no empieza con el mejor de los pies. La premisa está más sobada que unos bollos pasiegos. Pero, la verdad sea dicha, al poco que echa a rodar, funciona como un tiro. La trama comienza con el arquetípico perdedor (algo nulo intelectualmente y bastante torpe), llamado Gary Goodspeed

Encuentra aquí la mejor literatura de Ciencia-Ficción

Gary cumple condena en una nave prisión llamada Galaxia 1 durante cinco años. ¿El motivo? Voló por los aires un escuadrón entero de destructores espaciales en tierra y la cantina mexicana a la que asistían sus tripulaciones. ¡Y todo para impresionar a una inalcanzable oficial técnico! A Gary, por suerte, le queda solo una semana de presidio para volver a la vida civil. Sin embargo, el destino no quiere que sus últimos días en la Galaxia 1 sean apacibles.

Una criatura alienígena con forma gelatinosa, a la que bautiza como Mooncake, se hace amiga de Gary. Tras esta, misteriosamente, viene toda una legión de cazarrecompensas al servicio del líder militar alien conocido como el Lord Comandante. Gary y Mooncake comenzarán a huir de las fuerzas del déspota galáctico, hasta que comprendan que no hay mejor defensa que un buen ataque. 

Y hasta aquí te contamos. En los siguientes párrafos os damos los motivos por los que debéis de ver Final Space. Luego nos lo agradeceréis.

Que no cunda el pánico, Fry: Llama a la Normandía, y que la Fuerza te Acompañe

¡Menudo popurrí de franquicias os hemos hecho con el ladillo! ¿Verdad? Olan Rogers, creador de la serie, tiene pìnta de ser un frikazo, como nosotros. No en vano, a él le debemos el corto de 2012 dedicado a Megaman X. Y su Final Space empezó como un corto animado que puede verse Youtube, lo que también revela las inquietudes que le mueven por dentro y cuáles han sido sus fuentes.

Como os decíamos antes, Final Space no es original. Nada de eso. A todos los niveles, solo refina lo que ya han hecho otros. Su humor es bastante fácil, a veces sutil, otras demasiado evidente, y sus homenajes recuerdan a demasiadas obras ya realizadas. Su diseño de personajes recuerda mucho a Padre de Familia, Rick y Morty y Paradise PD, por lo que en un primer vistazo, puede pasar muy desapercibida. Que, además, sus personajes parezcan haber salido del grupo de rechazados de casting de Futurama, tampoco ayuda.

Pero esta falta de frescura no hunde la serie. Precisamente, Olan Rogers saca fuerzas de ella para construir una divertidísima, trepidante y muy funcional space opera canalla. Por un lado, empecemos hablando de su animación. Ciertamente, el diseño de personajes es muy simplista y poco detallado, hasta feo si nos apuráis. Pero en esta simpleza encuentra un provecho: el de una animación digna de una producción cinematográfica. Hay una enorme agilidad entre frames, un lujoso uso del color y una riqueza de planos apabullantes. Ahorrando en detalles, se logra una fluidez de animación asombrosa y poco habitual en series.

El segundo punto fuerte se lo debemos a los compositores Shelby Merry y Jake Sidwell, cuyos sonidos nos llevan directamente a la trilogía original de Mass Effect. Gracias a su trabajo, hay muchas veces que no podemos evitar acordarnos del pobre Shepard y de sus momentos más emocionantes e intensos. Sobre todo, durante la secuencia inicial de cada capítulo y en los momentos más dramáticos y nada graciosos de la serie.

Hablemos de las mejores series para adultos de dibujos animados

Como un consideración paralela a este mismo punto, hemos también destacar la calidad del trabajo de sus actores y actrices de voz. Tener a David Tennant (Doctor Who, Patoaventuras, Jessica Jones) como actor del villano da mucha personalidad al personaje. Pero que, además, el resto del elenco pertenezcan al reparto de cómicos del late-show de Conan, ya hace que el resultado sea de primer nivel. Dicho esto, hay que decir que la versión española es maravillosa y no hay que hacerle ascos. Como ocurre con Rick y Morty (valga la comparación), tanto la traducción como el trabajo de doblaje son una gozada a todos los niveles.

La tercera pata de Final Space es su argumento. Como no nos cansamos de decir, no es original en modo alguno. Tanto es así, que los que recordéis al pobre Roger Wilco, protagonista de los clásicos Space Quest, encontraréis no pocas semejanzas entre Gary y el atolondrado limpialetrinas de Sierra. Además, hay muchos elementos de la obra de Jack Vance, de Star Wars, de La Guía del Autoestopista Galáctico, de la propia Futurama y de toda una pléyade de obras de ciencia ficción de una u otra orientación. De ahí que la familiaridad y la rápida asimilación de conceptos estén a la orden del día.

En cuarto lugar, hemos de señalar que sí, que la serie es muy predecible. ¿Pero eso importa? Aunque tenemos una idea de por dónde nos va a llevar, al final siempre acaba por sorprendernos, jugando al despiste. Dicho de otro modo, usa el cebo del arquetipo y del estereotipo para inducirnos a creer una cosa, que luego resulta no ser así. Os avisamos: ojo con el episodio final de la temporada 1, que tiene más miga de lo que parece. 

También hemos de hablar de la violencia, porque sabemos que hay padres atolondrados y buenrollistas que, a veces, no discriminan con esto de los dibujos animados. En Final Space hay violencia explícita, desmembramientos y muertes muy cafres. Todo ello, por cierto, muy bien justificado respecto al tono de la historia, la atmósfera de la trama y lo que se quiere contar en ella. Pero no se deje llevar por la euforia, amigo. Esto no es los Halcones Espaciales ni el Robotech que emitía Telecinco (recordemos que el Macross original era más cafre de lo que vimos en Occidente). Esto está hecho para gente más o menos formada.

Resumimos: Final Space no ha sido una serie que, todavía, cuente con un nutrido grupo de seguidores en nuestro país, pero es una buenísima serie de animación y ciencia ficción, que recomendamos a los fans del género y a aquellos que echen de menos a Morty y al abuelo Rick, al tontorrón de Fry y a los personajes de las novelas de Douglas Adams. Echadle un vistazo. Ya nos los agradeceréis luego.

VALORACIÓN:

Divertida e inteligente comedia de ciencia-ficción, que hereda premisas de clásicos. Poco revolucionaria, pero tremendamente eficiente, con una grandísima animación.

LO MEJOR:

La animación, la aplicación de los arquetipos y tropos, su BSO, la sorpresa que da tras la primera mala impresión. El doblaje y su VO. Su BSO.

LO PEOR:

Poco revolucionaria. La falta de sorpresas. Al recurrir a personajes estereotipados y a homenajes, la serie se hace algo previsible
Hobby

79

Bueno

Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.