Grid Legends Análisis del arcade de conducción con historia de EA y Codemasters
Codemasters continúa su dominio de las carreras con GRID Legends, un arcade de conducción centrado en las carreras sobre asfalto y que innova con la introducción del modo historia y el sistema némesis.
Que un juego de conducción lleve el sello de Codemasters ya es sinónimo de calidad. Hace un año que se hizo efectiva la compra del estudio británico por parte de Electronic Arts, y parecen haber "pisado el acelerador" para no perder impulso.
No hay muchos estudios en el mundo capaces de lanzar, en menos de año y medio, tres juegos del nivel de DIRT 5, F1 2021 y este GRID Legends que nos ocupa. Claro, que los tres juegos tienen bastante en común.
Como vamos a ver en nuestro análisis de GRID Legends, lo que diferencia al título es que está centrado en las carreras sobre asfalto (desde turismos hasta camiones), pero aprovecha modos y sobre todo avances en la física y en el motor gráfico que ya hemos ido viendo en los anteriores trabajos.
Con este arcade de conducción, la compañía consigue cubrir todo el espectro de jugadores: los amantes del rally tienen DIRT (heredero de Colin McRae Rally), los amantes de la F1 pueden apostar por el simulador oficia y los fanáticos del asfalto se quedará con GRID, que es el sucesor de aquel TOCA Touring Car que nos enamoró en la primera PlayStation.
Lo que os podemos adelantar es que nos ha resultado enormemente divertido, que hemos disfrutado de su conducción desde el primer minuto y que tiene muchísimo contenido.
¿Buscabais un arcade de velocidad? Pues girad la llave de contacto y escuchad cómo ruge el motor de GRID.
La historia de GRID Legends
El modo principal del juego está dividido en dos temporadas. La primera de ellas narra cómo nos convertimos en piloto profesional, y se ha bautizado como "Cómo llegaste hasta aquí". Se compone de 36 pruebas muy variadas, con un argumento que se desarrolla entre carreras.
Este argumento está narrado a través de vídeos de imagen real con una producción similar a un documental (imagen digital, movimientos de cámara al hombro, entrevistas personales...) con una producción notable, aunque también hay algunos efectos de croma un poco "cantosos".
No sólo se trata de la típica historia del "underdog" que triunfa partiendo desde lo más bajo de la parrilla, sino que también habla de una rivalidad entre el jugador y otros pilotos, y en general es una narración interesante.
Es una base de la que han partido obras muy buenas como las películas Rush, Ford vs Ferrari o el documental de Netflix Drive to Survive (y no vamos a entrar en las declaraciones de Lewis Hamilton sobre Fernando Alonso) pero ya os adelantamos que no consigue funcionar igual de bien. Ya lo vimos en el modo Braking Point de F1 2021.
En cuanto a las carreras, es decir la parte jugable, no se le puede poner ninguna pega. La historia de GRID Legends nos ofrece todo tipo de eventos al volante de turismos, muscle cars, todoterrenos, monoplazas... en circuitos reales y trazados urbanos de todo el mundo. Hay cambios constantes en la salida (lanzada o desde parrilla), en el clima y en el momento del día en que corremos.
Prácticamente es un catálogo de condiciones y vehículos en que se puede competir. Incluso nos encontramos competiciones de drifting, en que lo importante es encadenar derrapes.
En cada uno de ellos, GRID legends nos plantea un objetivo, que no tiene por qué ser necesariamente ganar. A veces basta con terminar sin que el coche sufra daños, con superar a nuestra compañera de escudería, la piloto Yume Tanaka, o quedar por delante del favorito.
El problema de la historia es que, al tratarse de secuencias grabadas, no tenemos la sensación de que siga nuestras evoluciones como pilotos. Podemos quedar en primera posición en todas las pruebas y encontrarnos con vídeos en que nuestra escudería atraviesa problemas, o "el rookie" no termina de adaptarse.
Lo que sí nos ha gustado es el modo en que se ha adaptado el sistema Nemesis (sí, como el de los juego de Monolith Sombras de Mordor y Sombras de guerra) a la conducción. Si nos chocamos con un piloto en repetidas ocasiones, le cerramos o le hacemos alguna jugarreta, este rival tiene "memoria" y se convierte en nuestro némesis.
¿Y eso qué significa? Pues que a partir de ese momento tendrá una conducción mucho más agresiva contra nosotros, y tratará de devolvérnosla. Y creednos, que conducir contra un enemigo "cabreado" es una experiencia mucho más exigente.
La segunda temporada
En cierto modo, la historia es sólo un "calentamiento". Después de superar "Cómo llegaste hasta aquí" nos queda todavía la mayor parte del juego. A partir de este momento, GRID Legends se convierte en una experiencia mucho más convencional.
Carrera Profesional consta de una serie de competiciones, dividas por categorías y en 4 niveles de dificultad progresiva que nos permiten sacarle todo el partido al impresionante garaje del juego, con 118 coches, y a los 137 circuitos (en 22 localizaciones, que incluyen Barcelona).
En este sentido, la estructura de juego es similar al modo Trayectoria de DIRT 5, pero con un importante salto de contenido. Se presta tanto a partidas cortas de un par de carreras (en 10 minutos) como a echar la tarde entera corriendo, gracias a la variedad en las pruebas.
Tanto en esta temporada regular como en el modo historia, se implementa un sistema de progreso que nos permite ir subiendo de nivel y desbloqueando nuevas posibilidades. Estos puntos de desbloqueo se han bautizado como Racecraft, y se obtienen al realizar combos de trazada ideal, rebufo, proximidad, adelantamientos o sectores limpios (sin ninguna colisión).
Pero como el juego es un arcade también nos recompensa por las colisiones, o por adelantamientos rozando al rival, lo que no es exactamente "buena conducción".
Además, claro está, cada victoria se convierte en créditos, con los que comprar nuevos vehículos y modificaciones. Podemos aumentar nuestras ganancias con patrocinadores e invertirlas para mejorar el rendimiento de nuestro compañero de escudería y nuestro mecánico.
En general, se trata de un sistema profundo, aunque la mejora de los coches está más limitada. No contamos con un taller en que cambiar los componentes (escapes, amortiguadores, transmisión...) por separado, sino una serie de mejoras genéricas: potencia, aceleración, frenada, conducción y extras.
Estas mejoras sólo están disponibles después de haber recorrido una serie de kilómetros con el coche, y se compran con créditos. Lo mismo ocurre con el apartado visual; podemos personalizar nuestro coche, pero sólo con una serie de opciones prediseñadas (que son bastante numerosas).
Arcade, con niveles de simulación
Podemos ajustar el nivel de exigencia de GRID Legends a nuestro gusto. Aunque se trate de un arcade, si queremos una experiencia desafiante y más realista, el juego de Codemasters también es capaz de ofrecerlo.
Basta con desactivar ayudas como la trazada ideal, la transmisión automática, el control de tracción o la asistencia de contravolante. Por defecto, los daños son sólo visuales, pero también podemos hacer que afecten al rendimiento del coche, e incluso activar fallos críticos, que nos dejen en la cuneta.
Un aspecto que regresa de juegos anteriores (y que también podemos desactivar para tener una experiencia más real) son los flashbacks. Tenemos un número limitado de oportunidades para "rebobinar" un tramo de la carrera y corregir nuestros errores.
La física y el control son una delicia. Ya hemos adelantado que el estudio ha alcanzado un nivel brillante en todos sus juegos, y se mantiene en el punto justo en que cualquiera es capaz de ganar carreras en nivel medio... mientras que hacerlo en nivel leyenda es un auténtico logro.
Pero si queremos un auténtico reto, lo mejor es sumergirse en el modo multijugador. El online soporta hasta 22 jugadores simultáneos, con la posibilidad de unirnos a una sesión creada por otro usuario o crear nuestra propia carrera (seleccionando pista, condiciones, coches, hora del día...).
En nuestras partidas, en PS5, ha funcionado de maravilla, tanto para encontrar eventos como una vez en carrera. Y añade algunas opciones interesantes, como la posibilidad de "alquilar" un coche competitivo si no lo tenemos en el garaje, a cambio de una parte de las ganancias.
El modo online soporta crossplay entre todas las plataformas, y la posibilidad de iniciar sesión durante la carrera profesional para que otros jugadores se unan a nuestras competiciones. Evidentemente no podemos activar los "flashbacks" para rebobinar la acción.
En ese caso, esta opción se convierte simplemente en recolocar nuestro vehículo en pista si hemos sufrido un accidente o simplemente cometimos un error durante la trazada.
Impecable en lo técnico
GRID Legends luce de maravilla. Lo hemos jugado en la versión de PS5 y alcanza una resolución 4K con 60 FPS muy estables (sólo se nos ha ralentizado una vez durante el análisis en un accidente múltiple con muchos coches implicados).
Los modelos de los vehículos están clavados a la realidad, con un nivel de detalle enfermizo (que no es tan alto en algunas perspectivas interiores). En cuanto a los daños, se limitan a los kits de carrocería, pero dan una buena sensación tras los impactos.
En lo que respecta a los circuitos, destaca la construcción de los trazados urbanos (Londres, Shanghai, Dubai...) sobre las pistas oficiales. Y todos muestran matices dependiendo de la iluminación global en distintos momentos del día.
A la cabeza del apartado técnico se sitúan los efectos del clima. La lluvia y nieve (que no son dinámicos) están recreados de una forma extraordinaria, y afectan al comportamiento de los coches.
El buen nivel técnico del juego se extiende al apartado sonoro (con secuencias y órdenes de carrera dobladas al catellano). No sólo nos resulta muy inmersivo el sonido de motores y derrapes, sino que la música ambienta a la perfección las carreras del modo historia, dándole un punto extra de emoción.
El uso del Dualsense no destaca por la vibración, pero sí por los gatillos de resistencia variable, que nos ayudan a sentir cuándo clavamos los frenos o la aceleración y el cambio de marchas. Por último, se agradece el uso del SSD para eliminar tiempos de carga entre las pantallas de selección de carrera, ajustes y la propia competición.
Un gran arcade, sin demasiadas novedades
Como decíamos al comenzar la review de GRID Legends, Codemasters se mueve con comodidad en este desarrollo. En cierto modo lo que el estudio hace es aplicar lo aprendido en DIRT 5 y F1 2021 a su saga centrada en carreras sobre asfalto.
A medio camino entre el arcade y la simulación, dependiendo de las opciones que activamos, el juego hace bien todo lo que se propone. Y además resulta divertidísimo, aunque no seamos unos fas acérrimos del simracing, como es mi caso.
Es "conservador" si lo comparamos con otros juegos del estudio, pero eso no es necesariamente malo. La principal pega que encontramos es lo limitado de su garaje comparado con otros juegos como Forza Horizon 5 (550 coches) o el próximo Gran Turismo 7 (420 coches).
Aún así, no son pocos los coches que ofrece GRID Legends, y ponerse al volante de todos ellos es una gozada. Y nos ha gustado mucho el modo en que incorpora una historia o el sistema némesis.
VALORACIÓN:
Codemasters nos brinda otro estupendo arcade de carreras, que incorpora modo historia, sistema némesis y una enorme variedad de pruebas. Con un control muy fino, y un apartado técnico sólido, que destaca por la recreación de los coches, la física y los efectos del clima.LO MEJOR:
Un arcade de velocidad muy variado e increíblemente divertido. Incorpora modo historia y sistema nemesis.LO PEOR:
Las secuencias de la historia no se corresponden con los resultados en pista. El sistema de modificación de los coches está algo limitado.Plataformas:
PC,
PS4,
Xbox Series X,
Xbox One,
PS5
Versión comentada: PS5
83
Muy bueno
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