Crítica de You temporada 3 - Si este thriller ha destronado a El juego del calamar, es por algo

Resulta muy satisfactorio seguir una serie que arranca con unos primeros episodios torpes y poco a poco se va convirtiendo en algo mucho mejor. Eso es lo que ha pasado con You, el thriller erótico de Netflix que arrancó con una primera temporada más centrada en el morbo puro y duro y ha sabido reinventarse.

You sigue contando la historia de Joe Goldberg (el estupendo Penn Badgley), un chico con tendencia a idealizar y enamorarse obsesivamente de chicas cada cierto tiempo, hasta el punto de matar, literalmente, por ellas. Sin embargo, la temporada 2 de You nos sorprendió con un gran giro, al descubrir que su chica ideal, Love, era tan asesina como él.

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Ahora, la temporada 3 aborda las consecuencias de todo aquello: Love había quedado embarazada de Joe, así que se han casado y han comenzado una nueva vida en los suburbios, lejos de Los Ángeles, convencidos de que van a ser mejores personas por ellos y por su hijo.

Desde el principio, hemos comentado que uno de los puntos fuertes de la serie de Netflix es la divertida y sólida interpretación de Penn Badgley (Gossip Girl) al ser alguien capaz de poner ojitos de perrito tierno y a la vez insinuar con una mirada que está pensando en cómo descuartizarte.

Pero esa fuerza se ha visto multiplicada por el mayor peso específico de Love en esta temporada, a la que interpreta una magnífica Victoria Pedretti (La maldición de Hill House). Y es que si Joe está trastornado, Love está directamente como unas maracas, a pesar de que se esfuerza por hacer que la familia sea feliz.

Es gracias a ese juego de "escenas de matrimonio pero entre asesinos" que la temporada 3 de You ha sabido reinventar el concepto de la serie para darle un toque más adulto, sin que pierda sus matices de erotismo y thriller criminal.

En cierto modo, la relación de Joe y Love quiere reflejar las inseguridades que cualquier matrimonio puede sentir (¿estamos condenados a aburrirnos el uno del otro? ¿es mi pareja demasiado buena para mí?), solo que en vez de arrojar un jarrón al suelo, aquí apuñalan a alguien.

Así, los 10 episodios (de unos 50 minutos cada uno) de los que consta esta tercera temporada de You dan para que los personajes se desarrollen bastante y, además, expresen sus emociones. Y es que, por primera vez, Joe puede hablar abiertamente con alguien sobre que es un asesino.

Pero, por supuesto, también hay momentos para "affairs", tórridos revolcones y muertes truculentas, solo que en esta ocasión, los momentos más eróticos no se recrean tanto ni se hacen tan largos, algo que lastraba mucho la primera temporada.

Además, la serie tiene tiempo para criticar algunas de las miserias de nuestro tiempo: la gente superficial y vacía que vive para las redes sociales, la toxicidad de los barrios "ideales" que te critican por la espalda... O incluso el peligro que pueden suponer los antivacunas en determinados contextos.

En conjunto, encontramos unas reflexiones más interesantes. La serie ya no va tanto de gente guapa que se encapricha de otras personas y la acaba liando, sino sobre cómo esa gente guapa se siente espantosa por dentro.

Aún así, algunos episodios no pueden evitar volver por sus fueros y forzar a que Joe y Love sean excesivamente caprichosos en cuanto a sus pulsiones (tanto sexuales como homicidas), en lo que parece un esfuerzo por "cumplir con el expediente" de lo que debería tener la temporada.

En la parte criminal, esto hace que se vean venir ciertos giros y que no impacten tanto. Aún así, en esta ocasión hay tantos personajes secundarios bien desarrollados que, al igual que el mirón de Joe, no podemos evitar ojear para ver cómo reaccionarán en estas circunstancias. 

En ese sentido, tenemos una mención especial para Marienne, interpretada por una Tati Gabrielle que os sonará de Las escalofriantes aventuras de Sabrina y aquí tiene mucha presencia.

En conjunto, y aunque no hay nada realmente revolucionario en sus episodios, hemos quedado gratamente sorprendidos por cómo ha sabido cambiar para bien la serie. 

Tanto es así, que en el momento de escribir estas líneas es lo segundo más visto de Netflix en España... Y en EEUU ha destronado en audiencia a la intocable El juego del calamar.

Seguramente sea porque todos tenemos algo de perversos en nuestro interior y nos guste ver cómo otros se meten en líos. Solo es cuestión, como intentan Joe y Love, de saber encontrar nuestra brújula moral para conseguir no perder el norte...