Snowrunner Análisis del juego de conducción extrema para Nintendo Switch

Hace un año que analicé Snowrunner para PS4, Xbox One y PC y casi puedo decir que me cambió para siempre (al menos en cuanto a mis gustos por los juegos de conducción). Aún sin haber jugado a sus dos antecesores (Mudrunner y Spintires) me enamoré de esta conducción todoterreno, en entornos de una naturaleza salvaje y basada en enormes desafíos que no tenían nada que ver con la velocidad. 

Después de haberle echado muchas horas al juego de Saber Interactive, soy un "converso" de esta simulación. Si queréis saber más sobre lo que ofrece este planteamiento, lo mejor es que echéis un vistazo a nuestro análisis original de Snowrunner, en que nos explayamos en todos sus detalles. Ahora sólo vamos a hacer un rápido resumen de sus características, centrándonos en las diferencias de la versión de Switch. 

Snowrunner es un juego de conducción como ningún otro. Un simulador "de nicho" en que la velocidad pasa a un segundo plano y lo importante es llegar a nuestro destino. Lo que marca la diferencia es el terreno: montañas, zonas pantanosas, carreteras destrozadas se encargan de poner a prueba nuestra habilidad al volante de vehículos 4X4 y camiones.

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La "gracia" del juego está en dominar la caja de cambios (para meter la reductora o cambiar la tracción 4X2 o 4X4 dependiendo del terreno), manejar un cabestrante para anclarnos a troncos cercanos y buscar la mejor trazada para llevar nuestra mercancía a la meta sin terminar encallados en la nieve o con el coche destrozado.  Y aunque al principio esto puede parecer lento y muy exigente, una vez que entendemos las mecánicas del juego, la conducción se disfruta mucho. 

Conducción realista en entornos salvajes

A esto ayuda la recreación muy fiel de 40 vehículos "inusuales" (desde viejas rancheras de los 70 a vehículos militares o al lujoso Hammer H2) y tres entornos abiertos, en el norte de los Estados Unidos y en Rusia, que muestran ciclo día noche y diferentes condiciones climatológicas. 

¿Habéis oído alguna vez que lo importante es el viaje, y no el destino? Pues en Snowrunner esto es muy cierto, y la planificación de cada encargo, escoger el vehículo más adecuado, la ruta que nos va a causar menos problemas y ponernos a ello se convierte en una experiencia única. 

Tenemos misiones sencillas como realizar una entrega en un tiempo límite, sacar un camión encallado en el barro o visitar algún punto del mapa, pero el "alma" de SnowRunner son los encargos complejos. Estas misiones consisten en hacerse con el tipo de remolque adecuado y trasladar una carga (desde vigas a combustible) a diferentes puntos del mapa. 

Lo que más nos gusta es que se puede disfrutar simplemente descubriendo los caminos y poniendo a prueba los vehículos.  Nuestros logros nos permitirán acceder a mejoras con los que conseguir más potencia, suspensión elevada, ejes desbloqueados... y opciones de personalización visuales, que añaden aún más profundidad a un desarrollo entretenido, aunque de ritmo lento. 

Snowrunner en Nintendo Switch

La versión de Nintendo Switch tiene algunas limitación técnicas. Lo importante se conserva: tanto la física de los camiones sobre diferentes terrenos como el tamaño de los tres mundos abiertos (Michigan, Alaska y Rusia), pero el paso a la consola híbrida llega con abundantes recortes gráficos. 

Se nota bastante la menor resolución, que afecta a la flora, el firme e incluso las texturas de edificios y carteles. Sólo se salvan los vehículos, que siguen teniendo un aspecto sólido y realista (y que se van ensuciando con la conducción sobre barro). 

La iluminación en las horas nocturnas es deficiente, y el filtro de granulado cinematográfico (que podemos desactivar en el menú de opciones)  "emborrona" bastante la imagen. 

La distancia de dibujado se ha recortado, los charcos tampoco muestran reflejos, y el "popping" de arbustos y obstáculos que aparecen repentinamente es clamoroso. Saber Interactive fue también el estudio que se encargó de realizar el port de The Witcher 3 Wild Hunt para Switch, y nos da la impresión -en ambos casos se trata de mundos abiertos- de que han aprovechado alguno de los trucos que permitieron trasladar el juego de CD Project RED.   

El juego de Switch no permite cargar mods. pero a cambio ofrece un modo de juego cooperativo local con varias consolas (el modo online para 4  también está presente en todas las versiones). En este modo podemos organizar convoys, con los que realizar entregas con mayor seguridad, ya que podemos remolcar con el cabestrante a compañeros atascados o tener un vehículo de exploración que reconozca el camino para los "pesos pesados".

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Con todo, el contenido se ha trasladado de forma íntegra a la consola híbrida, y podemos seguir disfrutando de esta simulación tan exigente en cualquier parte (los defectos visuales son menos evidentes si lo hacemos en modo portátil).