Trucos y consejos para exprimir al máximo PSVR2 y configurar el visor de manera óptima

Entrar por primera vez a una experiencia de realidad virtual o realidad aumentada no es del todo sencillo, y aunque tengas ya experiencia con ello, cada visor de estas características suele ser un mundo distinto.

Y cuando hablamos de realidad virtual, quizá lo primero que se te viene a la cabeza es el nuevo visor PlayStation VR2 que ha lanzado Sony al mercado, y que está contando con una serie de dudas que queremos resolverte.

De hecho, hay muchas quejas de los primeros compradores que afirman que las PlayStation VR2 son algo incómodas, que causan náuseas o que tienen desenfoque, y todo tiene una solución si sigues nuestros consejos.

Y es que un dispositivo de estas características, de alta vanguardia, y también caro, requiere de una serie de configuraciones iniciales para sacarle el máximo provecho, así que bienvenido a esta guía de configuración para principiantes de PSVR2.

Trucos y consejos para exprimir al máximo PSVR2 y configurar el visor de manera óptima

Algunas configuraciones que debes hacer a las PSVR2:

Si los cascos te resultan incómodos…

No eres el único, hay muchas quejas sobre que estas PlayStation VR2 son bastante incómodas, pero es totalmente normal porque nuestro cuerpo no está preparado, de forma natural, a llevar estos dispositivos en la cabeza.

Lo que te recomendamos, es apuntar a que la parte posterior de la correa, es decir, la parte con el dial, quede lo más cerca posible del cuello, mientras que la zona acolchada de la parte delantera, debe quedar bien sobre nuestra frente.

Cuando lo hayas situado bien, es hora de apretar el dial en la correa trasera para que soporte todo el peso de los auriculares, eliminando la presión sobre la nariz.

Sobre el tema de la rueda IPD, mucha gente empuja la lente haciendo un efecto de pellizco en el puente de la nariz, en este caso intenta verificar que el IPD sea correcto.

Arreglando el desenfoque

Primero debes comprobar que estás utilizando el visor en la posición correcta, como te hemos dicho antes, y asegúrate de haber empujado la visera hasta el fondo. A veces, un posicionamiento incorrecto, aunque sea de milímetros, afecta al desenfoque.

Verifica una vez más el tema del IPD, cámbialo y experimenta hasta que encuentres el enfoque adecuado.

También puedes centrarte en mirar algún texto del juego para conocer si hay un problema cromático.

Y claro, limpia las lentes del visor, porque a veces una pequeña mota o algo de suciedad, va a provocar que no veas las cosas tan nítidas como te gustaría.

 Esa malla granulada fina de la que muchos hablan

Mucha gente está obsesionada con un efecto gráfico, como de especie de malla granulada fina que cubre la pantalla, una especie de filtro sobre la parte superior de los gráficos.

Esta malla permanece estática, por lo que es perceptible, pero solo aparece cuando hay algunos colores muy llamativos en entornos con muy poca luz.

Este efecto es totalmente normal del visor, y no hay ninguna forma de retirarlo, así que debes acostumbrarte a ello hasta que el cerebro sea capaz de desconectarlo por completo

Ajustando el volumen

A diferencia del primer visor, aquí no podemos ajustar el volumen desde el cable, por lo que si estamos jugando tendremos que interrumpir la partida, para subir o bajar el volumen, y también debes acostumbrarte a ello.

Múltiples usuarios

Al igual que con los juegos normales, si queremos contar con diferentes configuraciones, en este caso bastante importantes, puedes configurar perfiles para cada uno de los jugadores.

Esto guarda la configuración para cada persona una vez que se haya pasado por la calibración inicial.

Pero puede que en algunas experiencias en concreto, tengas que reiniciar el juego cada vez que cambies de perfil, así que lo debes tener en cuenta.

Lo ideal es que realices calibraciones cada vez que un nuevo jugador se ponga las gafas.

El problema de las náuseas

Esto es inherente de la realidad virtual, y pasa con cualquier visor, así que no te preocupes. Si te sientes mareado, deja el visor durante un buen rato, hasta que te recuperes, incluso hasta el día siguiente.

Mientras vayas jugando días y días, se irá acostumbrando tu cuerpo y tu mente al tema de las náuseas y las sufrirás mucho menos más adelante.