Cadena perpetua fue promocionada de un modo que no gustó a Stephen King para parecer "más prestigiosa"

Si bien Stephen King tiene un listado de adaptaciones que supera por mucho al de cualquier otro escritor, no todas las versiones cinematográficas de sus novelas terminaron bien paradas. No es el caso de Cadena perpetua, claro, que es considerada una de las mejores películas de la historia, aunque en su momento fue un fracaso en taquilla.

La película de Frank Darabont ganaría su lustre después de su paso por la cartelera, y eso que en Columbia Pictures hicieron lo posible por darle prestigio al filme durante la promoción, a costa de "omitir" en gran medida la autoría de Stephen King.

Irónicamente, el estudio no consideró que la asociación de la película con el escritor de Maine fuese una buena baza para explotar durante la promoción de Cadena perpetua, por lo que no se le dio mucho bombo a dicho dato.

Lo habitual cuando se trabaja con una adaptación de Stephen King, es que la promoción, ya sea de una película o una serie, pivote en torno al nombre del ilustre escritor con tópicos como "Basada en el bestseller de Stephen King" o "Del maestro del terror, Stephen King", y similares.

Una curiosa decisión para promocionar la película sin Stephen King

Cuando se estrenó Cadena perpetua en 1994, Stephen King era tremendamente reconocible y ya había visto alguna de sus adaptaciones pasar por los Óscar, como Misery, que le valió la estatuilla a Kathy Bates. 

Pero en Columbia temían que asociasen el nombre de Stephen King con películas como Cujo o Cementerio de animales, lo que "restaría prestigio" a Cadena perpetua.

Como hemos dicho, no fue una decisión inteligente en absoluto: el estreno de Cadena perpetua recaudó tan solo 28,3 millones en taquilla, solo 3 millones más que su presupuesto de producción. Incluso para una película de los 90, esas cifras eran muy pobres.

Pocas adaptaciones de Stephen King prescinden del nombre del escritor en su promoción, puesto que el Rey del Terror mueve montañas de fans. Cierto es que no todas sus adaptaciones al audiovisual son dignas y se acercan, siquiera, a la sombra de Cadena perpetua, pero esa ya es una historia para otro día.