Los juegos de acción siempre han sido una pléyade destacable en la industria de los videojuegos. Acción directa y sin complicaciones que ponen la mirilla apuntando directamente a la diversión desenfrenada y sin complejos. Una vertiente sempiterna a la cuál se le trata de dar un enfoque diferente en cada nuevo producto con el fin de romper el mercado. No siempre es fácil. Muchos lo intentan, pocos lo consiguen. Pero lo que está claro es que la realidad virtual es una herramienta en la que los creativos han depositado muchas expectativas para alcanzar esta revolución.
Algo parecido ocurre en el mundo del cine. En los últimos tiempos estamos viendo en el séptimo arte con los filmes del denominado estilo gun-fu, estilo en el que John Wick se ha convertido en un auténtico referente. Los creativos de videojuegos están tratando de trasladar ese estilo a la realidad virtual y el nuevo Blood & Truth es una buena muestra de ello.
London Studio se está ocupando de este título presentado oficialmente en la conferencia de Sony en Paris Games Week. Los mismos responsables de London Heist, una de las demostraciones que más impactaron cuando el dispositivo PS VR comenzaba a mostrarse. Pero era simplemente eso, una demostración. Que ahora, por fin, es dotada de más profundidad siendo fiel a dicho estilo. Podéis llamarlo sucesor espiritual, que está de moda.
Tras jugar un nivel completo llegamos a la conclusión de que en Blood & Truth básicamente encontramos un juego de acción para PlayStation VR que busca transmitir al jugador ser el héroe. Hacer sentir esa sensación de superioridad que tienen los protagonistas de películas que disparan a los enemigos a dos manos prácticamente sin mirar. Y lo consigue, provocando que la experiencia sea intensa y divertida. Aunque se nota su prematuro estado de desarrollo y que todavía tiene cosas por pulir.
Al igual que en London Heist, el control es muy intuitivo y dinámico. Podemos llevar el arma en la mano que queramos, y tenemos un cinturón en el que portar cartuchos de munición, que tendremos que agarrar y poner en el arma simulando el movimiento para llevarlo a cabo.
La demo que hemos jugado tiene varios elementos diferenciadores. Tomamos el rol de Ryan Marks, quien debe infiltrarse en un casino para sacarle información a un soplón. Durante el comienzo de la misión nos infiltramos desde un callejón, accediendo por medio de una escalera que trepamos agarrando alternamente los peldaños con nuestras manos y, posteriormente, abrir una puerta con una ganzúa, en una acción que no resulta demasiado intuitiva.
Una vez dentro llegamos a una sala de control en la que buscar por las cámaras a nuestro objetivo. Una vez localizado, toca seguirlo por la propia red de vigilancia hasta determinar donde se aloja. Y tras eso, nos pillan y empieza la acción.
Las secuencias de disparos no tienen demasiado misterio. Pero también hemos visto dos vertientes. En primer lugar, las que se realizan de forma estándar. Es decir, el juego nos indica los puntos en los que podemos colocar al personaje y, pulsando un botón, hacemos que vaya hacia allí. Pero no podemos cubrirnos demasiado y estos momentos, aunque el título te insta a no parar de moverte, resultan un tanto forzados y poco prácticos. Blood & Truth debe mejorar el sistema de cobertura en este aspecto.
Después, se desata el frenesí. y lo hace gracias a una secuencia sobre raíles en el que el personaje se mueve automáticamente por los pasillos del casino y, simplemente, tenemos que disparar a todo lo que se mueva. Incluso la acción se vuelve a cámara lenta durante unos segundos si disparamos a algún extintor u objeto explosivo. Aquí es donde Blood & Truth, haciendo transmitir al jugador esa superioridad ante las huestes enemigas de la que hablábamos antes. Así, consigue que nos sintamos como el jodido John Wick.
La demo concluye dando caza a nuestro objetivo. Al parecer, habrá diferentes elecciones a lo largo de la aventura, ya que pudimos cargárnoslo o dispararle a la pierna para que 'cante la traviata' y nos diga la información que necesitamos. Nos suplicó clemencia y optamos por la primera opción. Tras esa escena, un mastodonte armado con una gatling irrumpe y solo nos queda saltar por la ventana para salir de allí.
Blood & Truth parte de una idea simple, pero a la vez fresca y efectiva. Tiene problemas de diseño, pero London Studio todavía tiene margen para mejorar. Promete ser una de las apuestas estrella para VR, ya que ofrecerá acción, diversión e incluso una gran carga narrativa a la que no le faltarán pequeños toques de humor.
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