Como hemos mencionado en nuestroanálisis de Resident Evil 3 Remake, Nemesis es uno de los elementos definitivos de esta entrega. No es sólo es el enemigo más inteligente y letal que nos hemos encontrado en ningún Resident Evil, sino que la persecución a la que nos somete a lo largo de todo el juego es lo que marca el ritmo del juego. Cuando jugamos como Jill Valentine terminamos obsesionados con la posibilidad de que Nemesis aparezca en cualquier momento, para acabar con nosotros.
Nemesis es el arma biológica definitiva de Umbrella. En el remake de Resident Evil 3 podemos ver cómo se "construye" esta versión evolucionada del Tyrant y se lanza sobre la ciudad de Raccoon para que acabe con los miembros de los STARS que sobrevivieron a los hechos de la mansión Spencer (en el primer juego). Desde luego, se trata con más profundidad de lo que vimos en el juego original de 1999 para PSX, pero ¿es mejor el nuevo Nemesis?
En este reportaje os dejamos alguna de las claves que hacen que el monstruo haya mejorado considerablemente. Por supuesto, estas mejoras no sólo se limitan al apartado gráfico y los cambios en el diseño (que fueron controvertidas cuando Capcom mostró las primeras imágenes de la criatura) sino a elementos más profundos, que también alteran la jugabilidad.
Antes de continuar, os advertimos que el siguiente artículo no contiene spoilers del argumento, aunque evidentemente desvela alguna de las nuevas habilidades del monstruo.
Nemesis es más ágil e inteligente
El monstruo es implacable en ambas versiones. No sabemos cuándo aparecerá, pero siempre tenemos la sensación de que se encuentra tras nuestros pasos. En el original, se limitaba a seguirnos sin descanso, haciendo valer su superioridad física, pero en el remake nos encontramos con una nueva forma de actuar.
En primer lugar porque el monstruo es más ágil y puede saltar para cortarnos el paso. También es más inteligente, y cuando creemos haberle dado esquinazo, puede utilizar sus tentáculos para que Jill pierda el equilibrio y volver a colocarse a nuestro lado. Nemesis no tiene problemas en quitarse de enmedio a los zombies que puedan estorbarle en su misión, y también rompe paredes o lanza coches que le obstaculicen.
Para compensar estas nuevas habilidades de la criatura, Jill cuenta con un movimiento de esquiva que nos puede salvar el pellejo en el último momento. Si dominamos el "timing" con este movimiento, nos quitaremos de encima alguno de sus letales puñetazos.
Nemesis es capaz de transformar a los zombies
Una de las nuevas habilidades de la bestia es la de transformar a los muertos vivientes. Nemesis utiliza los tentáculos que salen de sus brazos para "evolucionar" a los zombies; las nuevas criaturas tienen un nuevo y aterrador aspecto, son más resistentes a los disparos y además poseen un aguijón con que atacar a distancia.
Es uno de los cambios de Nemesis en la nueva versión que más nos gusta, y que resulta más desafiante para el jugador: añade variedad a los enemigos y un punto extra de dificultad en algunos tramos del juego.
Unas transformaciones más radicales
Ya sabemos que el monstruo es capaz de cambiar su forma a lo largo del juego. Esto es algo que también se ha tomado del original de 1999. No vamos a revelar todas las formas de Nemesis, pero sí os podemos asegurar que cada vez se vuelve más grande y va perdiendo su forma "humanoide".
Otro de los elementos que más nos gusta del nuevo Nemesis es que estas transformaciones tienen un motivo "argumental" y están justificadas por las situaciones que atravesamos durante el juego, no se trata simplemente de darle un aspecto más amenazador para el siguiente enfrentamiento. Nuestros disparos le arrancan partes del traje, si se sumerge en el agua se transforma en una criatura "adaptada" y si le arrancamos alguno de sus miembros, desarrolla nuevos apéndices.
Las armas de Nemesis
Nemesis es letal con las manos, pero en este caso, "se luce" con dos armas demoledoras. Se trata del lanzallamas y el lanzacohetes. Por una parte, causan un enorme daño, pero es que además son capaces de dañar elementos del entorno. En el caso del lanzallamas, es capaz de generar daño de área, incendiando partes del escenario que tenemos que atravesar a toda velocidad. Por su parte, el lanzacohetes cuenta con un sistema de guía láser, que lo hace enormemente preciso.
Enfrentarse (o mejor dicho, escapar) de Nemesis cuando está armado requiere cambiar nuestra estrategia. De hecho, el tanque de combustible que lleva cuando equipa el lanzallamas es uno de sus puntos débiles, y nos da una oportunidad de hacerle frente.
El uso del entorno
Si ya hemos mencionado que Nemesis es más inteligente por el modo en que nos corta el paso, o la forma en que traza la ruta de persecución, también hay que aplaudir que sea capaz de usar elementos del entorno como arma. Ocurre en un par de ocasiones, pero es una manera de demostrar el poder de la bestia.
Análisis de Resident Evil 2 Remake
Si bien es cierto que se trata de elementos "scriptados", es decir, que forma parte del guión del juego y siempre se desarrolla de la misma forma, cuando vemos que arranca un trozo de pared para golpearnos (u otros objetos aún más espectaculares) es capaz de dejarnos boquiabiertos.
Nemesis deja caer objetos
Por último, aunque ya hemos mencionado a lo largo de todo este artículo que el monstruo es implacable, sí que podemos detener su avance. No es fácil, pero podemos utilizar objetos interactivos del escenario (los barriles explosivos y los generadores que provocan ondas eléctricas) para dañar a Nemesis. Incluso -si andamos sobrados de munición- podemos dispararle hasta que cae durante unos segundos.
Como ya os hemos adelantado en el análisis, el juego cuenta con un sistema de logros, con que podemos conseguir moneda para comprar extras. Pues bien, uno de estos logros consiste en derribar a Nemesis para que deje car un objeto, así que merece la pena intentarlo.
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