La evolución es la aventura más grande que ha emprendido la raza humana. No podríamos afrontar el análisis de Ancestors The Humankind Odyssey para PS4 y Xbox One si hace millones de años un antepasado nuestro no hubiera afilado un palo por primera vez para cazar o defenderse de sus depredadores. A partir de ahí sólo hizo falta adaptarse al medio y seguir experimentando... hasta tener en nuestras manos este título. 

Se trata de un análisis que llega rodeado de cierta polémica, ya que su creador Patrice Desilets (conocido por su trabajo en Prince of Persia Las arenas del tiempo y en los primeros Assassin´s Creed) ha mostrado sus descontento por las calificaciones que el juego recibió en su versión de PC, que apareció el pasado verano. Nosotros nos vamos a despojar de prejuicios a la hora de analizar Ancestors The Humankind Odyssey en su versión de consola (que llega con mejoras, como un tutorial más completo o misiones adicionales). 

De hecho partimos de que nos parece un planteamiento apasionante. A lo mejor alguno recuerda el malogrado proyecto BC de Peter Molyneux para Xbox. Aquel juego, que nunca llegó a lanzarse, ya nos proponía gestionar los recursos de una tribu de hombres prehistóricos para sobrevivir, aunque se tomaba algunas licencias históricas, como la convivencia del hombre y los dinosaurios. Pues bien, en este caso, nos encontramos con un sistema de supervivencia mucho más realista, en una etapa que se remonta aún más en la historia. Comenzamos siendo un primate en África, hace 10 millones de años. 

La Tierra era más joven, y nuestra tribu, en medio de la jungla, se encuentra desprotegida. Es el momento de empezar a adaptarse.

17 minutos de gameplay de Ancestors The Humankind Odyssey

La supervivencia del más fuerte

Ancestors se desarrolla como un "sandbox" muy atípico. En primer lugar porque el juego está diseñado para que tengamos la mínima información posible. El interfaz (incluso en el modo más visible) está muy limitado y no tenemos muy claro qué objetos se pueden utilizar y cuáles son simplemente parte del escenario. Esto sirve perfectamente al objetivo del juego: nos sentimos desprotegidos, confusos... y el avance es lento. Los primeros pasos son titubeantes (imaginamos que como ocurrió en el amanecer del hombre). Se trata de conseguir pequeños logros como reconocer herramientas básicas -palos piedras, plantas- relacionarnos con otros primates de la tribu o ponernos de pie. 

Además de las misiones básicas de investigación, que nos hacen avanzar en la historia, tenemos que mantener el nivel en tres medidores de supervivencia: comida, bebida y sueño. Y por supuesto, evitar los peligros de la jungla, desde el envenenamiento por comer ciertas plantas a los ataques de depredadores, las caídas o el frío. Parecen muchos factores a tener en cuenta, pero después de ver cómo mueren algunos miembros del clan, le podemos coger el truco. Así es la evolución: algunos tienen que morir para que el resto de la manada aprenda. 

Y precisamente la sensación de grupo es otro de los aspectos que se han cuidado en esta historia de nuestros antepasados. Tenemos que emparejarnos (acicalando a un macho o una hembra fértil), proteger a los pequeños y crear refugios y herramientas. Cada cierto tiempo, surgirá una mutación, o desarrollaremos una neurona que nos permitirá realizar acciones nuevas, y evolucionar. Y así, poco a poco irán pasando los días y los años, mientras aumentan nuestros dominios. Como podéis ver, se trata de un estilo de juego "realista" que nos anima a jugar a nuestro ritmo.

Si queréis profundizar aún más en los pormenores de este desarrollo, os animamos a que volváis a leer nuestro análisis de la versión de PC.

Análisis de Ancestors The Humankind Odyssey en PC

La función crea el órgano

El sistema de control es muy arriesgado. ¿Cómo reflejar la motricidad limitada de aquellos primates? ¿Y el desconocimiento del medio? En nuestra impresión la idea es brillante, pero la ejecución, no tanto. Podemos movernos como un simio, trepando por árboles y balanceándonos con ayuda de ramas y lianas. Pero siempre que estamos en movimiento se limitan nuestras acciones. Si queremos usar los sentidos, amedrentar a un enemigo, oler una planta... tenemos que detenernos y ejecutar la acción. A veces hay que activar la "inteligencia", concentrarnos sobre los objetos útiles y memorizar su localización. 

El miedo es una parte importante de la supervivencia, y está muy bien tratado en el juego. Cuando salimos de un entorno conocido, se limita nuestro campo de visión y empezamos a tener alucinaciones de depredadores (sonidos e imágenes). Si no conseguimos calmarnos, nuestro personaje entrará en pánico y saldrá huyendo, de modo que tenemos que reconocer elementos hasta tranquilizarnos y "conquistar" la zona. 

La evolución repetitiva

Todos los logros de nuestro homínido resultan muy satisfactorios, cuando lo hacemos por primera vez. Nuestro primer refugio, la primera herramienta de piedra (chocando dos rocas de composición diferente) o cuando conseguimos hacerle frente a un depredador. El problema es que "la aventura de la vida" se compone de repetir estas tareas una y otra vez, cada vez que nos trasladamos a una nueva localización, y eso termina por volverse tedioso. 

Otro de los inconvenientes del juego es la cantidad de fallos técnicos que arrastra. Hay que tener en cuenta que se trata de un equipo de desarrollo pequeño, pero el motor Unreal Engine da para mucho más. A veces estos fallos nos pueden "sacar" de la historia, como cuando vemos a nuestro simio atravesar rocas, o a los cocodrilos flotando por encima del manglar... pero esto no es tan grave. Lo que resulta mucho peor es sufrir fallos en el control. Resulta muy complicado moverse por la jungla, ya que el salto es impreciso y el sistema de balanceo requiere mucha práctica (y no termina de funcionar). 

Análisis de Conan Exiles para PS4, Xbox One y PC

En su favor hay que decir que el escenario es gigantesco, y cuenta con distintos ecosistemas para añadir un poco de variedad (además de la jungla inicial podemos visitar la sabana, la costa, el desierto o las cuevas, con sus propias especies animales y vegetales). Y como ya mencionamos en nuestro primer análisis, el apartado sonoro está cuidado y encaja con la ambientación prehistórica general. 

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Si invertimos tiempo, Ancestors The Humankind Odyssey nos premia con una experiencia única, e incluso educativa. Pero no puede competir con otros juegos de supervivencia por culpa de sus limitaciones, tanto técnicas como en la variedad del desarrollo.