Crítica de Bleach, la película de acción real de Netflix

Cuando se habla de que Netflix va a hacer o ha hecho una adaptación de tal o cual anime, un rayo atraviesa nuestras cabezas y nos es imposible obviar que la plataforma VOD es responsable de la película de Death Note. Esto normalmente hace que nos entren sudores fríos y nos echemos a temblar como en una peli de miedo. Pues bien, con la ayuda de Warner Bros Japón, Netflix ha sacado adelante su proyecto de realizar una película de acción real de Bleach, otro célebre anime.

En esta ocasión, se otorgaron los mandos de la película de Bleach a un director que había demostrado su competencia a la hora de adaptar animes a acción real. Shinsuke Sato es responsable, entre otras, de la adaptación de 2016 de Death Note: El nuevo mundo, con bastante mejor resultado que su posterior adaptación en Netflix. Con esta premisa, se espera que esta adaptación del manga de Tite Kubo alcance mejores resultados de los que han tenido otras adaptaciones recientes.

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En efecto, si no hacíamos la rima no nos quedábamos a gusto. La película de Bleach en Netflix trata durante sus 108 minutos de condensar prácticamente toda la primera temporada del anime, más o menos los primeros 17 episodios. Ichigo Kurosaki, quien demuestra poseer un don especial para ver a los espíritus, sufre un cambio radical en su vida cuando conoce a Rukia Kuchiki, una shinigami (una diosa de la muerte, para los profanos) y adquiere los poderes propios de esa condición.

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Bleach Netflix (11 imágenes)

Naturalmente, la cosa se complica a la hora de enfrentarse a los poderosos Hollow (espíritus malignos- al tiempo que nuestros protagonistas hacen frente a la cruda realidad que es que, a los demás shinigami no les hace mucha gracia que se presten sus poderes. Todo esto es, por supuesto, una preview rápida de las bases de la historia de la película. No os vamos a destripar la trama a aquellos que vengáis de nuevas sin haber leído el manga o visto el anime.

Aciertos y ausencias

Uno de los puntos fuertes de esta nueva película de Netflix es la cantidad de personajes que se dan cita en la historia, cada uno con un carisma especial. El manga y el anime están repletos de personajes secundarios que enriquecen la historia y dan tanto una profundidad mayor como momentos inolvidables. Esta adaptación del anime rescata a la mayoría de ellos y los recrea con un nivel de fidelidad bastante aceptable, teniendo en cuenta las complicaciones.

Sin embargo, hay grandes ausentes como Kon, el alma modificada de Ichigo que da una nota de humor siempre bienvenida. También echamos en falta en las visitas al Almacén de Urahara la presencia de ese trío tan particular de empleados: Ururu, Jinta y Tessai. Aunque la interpretación de Seiichi Tanabe como Kisuke Urahara nos ha resultado de lo mejor, aunque sea breve. Además, que el doblaje al castellano del personaje haya corrido a cargo de Pep Ribas, al igual que en el anime, le ha dado puntos.

Adaptándose al anime

Es evidente el esfuerzo que el equipo ha hecho para adaptar planos y estética al anime de Bleach. Antes de nada, atentos a la aparición fugaz del Seireitei, os dejará con ganas de más. Todos los actores han sido seleccionados cuidadosamente para alcanzar un parecido razonable con los personajes que representan, salvando las distancias, claro. Además, en España como hemos mencionado, podemos agradecer que, además de Pep Ribas, hayan vuelto a prestar su voz Óscar Muñoz, Nuria Trifol, Isabel Valls, Juan Carlos Gustems y Carmen Ambrós a Ishida, Orihime, Tatsuki, Isshin y Yuzu respectivamente.

Muchas de las localizaciones donde se ha filmado esta película de Netflix respetan la estética que recordamos del anime, algo que vimos, con menos éxito en la adaptación Fullmetal Alchemist. Sin embargo, en su ambición por ser una recreación fiel de las escenas del anime, algunas secuencias de combate se ven forzadas a realizar efectos especiales que quedan demasiado antinaturales, y dan bastante el cante.

A grandes rasgos, esta adaptación de Bleach al cine es más que digna. Obviando la ausencia de personajes que hace que partes de la historia que recordamos pueda quedar huérfana y ciertas variaciones que se han realizado en el tramo final de la película, se puede decir que Bleach goza de un buen nivel de fidelidad. Por supuesto no es un calco del anime, y cuando ha tenido que adaptar algo a la pantalla se ha hecho. Pero para compensarnos nos regalará cierto espectáculo en el combate final, aunque nos deja con ganas de ver un bankai, pero tampoco tocaba....