Crítica de Jeepers Creepers: el renacer, un intento fallido de reflotar la franquicia

La cuarta entrega de Jeepers Creepers quiere funcionar como un reboot de la saga, que por definición debería ser un soplo de aire fresco en alguna dirección: presentación de nuevos personajes. un giro de tuerca ingenioso o una profundización en su mitología. Desgraciadamente, no funciona satisfactoriamente en ninguno de esos planos.

Para arrancar obvia lo sucedido en Jeepers Creepers III siendo, en principio, una especie de continuación autoconsciente de la parte 2. Decimos esto porque hace acto de presencia el recurso manoseado del metalenguaje, que la saga Scream parecía hacer exprimido y requetexprimido tanto como para invitar a que otros cejasen en el empeño... pero hasta en esto es vaga la película.

Como punto de partida encontramos un flashback al pasado para conocer a una pareja que se cruza en la carrertera con la criatura, siendo acosados por ella hasta ser echados de la carretera. Probablemente es la parte mejor construida de la cinta a nivel de tensión narrativa e interpretaciones porque se traslada de forma eficiente el agobio y la sensación de acoso casi sobrenatural.

Posteriormente viajamos al presente, momento en el que una pareja viaja a una convención de terror. Ellos son Chase y Laine y ambos tienen secretos que van a terminar siendo perturbadores: él quiere pedirle la mano y ella ha descubierto que está embarazada cuando descubren que el Creeper, figura de referencia en la propia convención, les esta acechando.

Después de ganar un concurso de cosplay, serán conducidos a una decrépita casa en la que tienen que participar en un escape room que va a convertirse en una montaña rusa de los horrores habida cuenta de que es el lugar en el que mora el Creeper.

Ni frío ni calor

A una película de terror como Jeepers Creepers: el renacer no se le puede pedir un guión demasiado elaborado ni una puesta en escena espectacular, pero al menos sí un mínimo de coherencia, de imaginación, de humor o de habilidad para generar al menos inquietud.

El viaje que nos propone la película es tan infructuoso como frustrante porque se toma en serio a sí misma sin tener ni idea de hacia dónde quiere ir. Se insinúan algunas líneas argumentales que podrían haber tenido su miga por medio de las precogniciones de la protagonista pero ni están bien articuladas ni llegan a ninguna parte.

Tampoco es una película que suponga una interesante adición al corpus de la franquicia por conseguid añadir información relevante nueva: se habla del resurgir de esta criatura infernal, de su ciclo de caza y de sus métodos sangrientos sin que haya nada en verdad que suponga un descubrimiento.

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Jeepers Creepers: el renacer - Galería de imágenes (3 imágenes)

Los 88 minutos de metraje de Jeepers Creepers: el renacer se hacen bastante largos porque lla película tiene poco que aportar. No es tanto que sea serie B, sino que más allá de la amenaza sobrenatural no hay nada.

Ni siquiera se sustenta en el morbo de "ver al bicho": se supone que tiene cualidades extraordinarias en lo referente a la inteligencia, la velocidad, la fuerza y puede además regenerarse e incluso echar mano de la telequinesis, pero todo esto no se muestra en pantalla porque no hay presupuesto.

Aunque el actor Jarreau Benjamin pone su expresión corporal al servicio del Creeper, la cinta está tan mal coreografiada y va tan justa de recursos que parece más torpe y menos letal de lo era de esperar. Tampoco es que el acabado visual ayude: el montaje es especialmente apresurado en la parte final, en la que todo se resuelve con tres planos y la fotografía a veces se asemeja a la de un móvil.

Ni siquiera se respeta la unidad de tiempo: se supone que toda la parte central de Jeepers Creepers: el renacer se desarrolla a lo largo de una noche pero a través de los tablones y las ventanas entran rayos de luz diurna que no se corresponden.

Cuando en un slasher te estás preguntando cuándo van a rodar cabezas (porque te aburres), significa que algo no anda bien... así que, definitivamente, no va a ser un renacer, como anuncia el título. ¿Habrá que esperar 23 años hasta que se despierte un Creeper verdaderamente aterrador?