Crítica de Memento Mori, serie española de suspense de Prime Video

Prime Video continúa en su plan de sacar adelante numerosas producciones nacionales y, poco después de lanzar la película de ciencia ficción Awareness, ahora llega Memento Mori, un thriller en formato miniserie de seis episodios.

En principio, Memento Mori tiene los distintos elementos para conseguir la base de público suficiente en este tipo de contenidos: basada en una novela de éxito perteneciente a la saga escrita por César Pérez Gellida, una trepidante búsqueda de un despiadado asesino, imágenes truculentas y caras conocidas.

Como muestra de lo que comento, aquí está el trailer de Memento Mori en el que se adelanta mucho de lo que aparecerá en la serie.

En Memento Mori el espectador sabe quién es el asesino desde el primer momento, algo lógico teniendo en cuenta su carisma y vivencias, por lo que se puede situar a ambos lados de la narración: la policial y la criminal.

Es una serie muy compacta en lo visual y narrativo y bien podría haber sido una película, aunque que haya terminado en serie no es algo malo, ya que no adolece de una extensión alargada, sino que avanza a ritmo seguro impulsado por la realización y unas interpretaciones acertadas que rozan el exceso en algunos momentos.

Tal como se muestra en el teaser, el asesino es un personaje excéntrico, un tópico en el género, por lo que su comportamiento siempre se mueve entre lo inquietante y lo ridículo. Afortunadamente, la dirección de actores es acertada y Yon González, Francisco Ortiz, Manuela Vellés, Juan Echanove y todo el reparto son creíbles ante la cámara.

Valladolid como zona de caza

En un presente donde Madrid y Barcelona suelen ser ambientaciones habituales de estas series, Memento Mori se desarrolla en Valladolid, ciudad en la que el asesino se dedica a matar, amputar, dejar poemas y, en cierto modo, trolear a la policía. 

Un grupo de policías, que cuenta con la ayuda del psicólogo criminalista Carapocha y una especialista en literatura, busca entender sus motivaciones y saber quién es para cazarlo, al menos en un principio.

Memento Mori tiene una serie de giros bastante sorprendentes a mitad de temporada y en el tramo final. Estos pueden ser acogidos por el espectador con sorpresa o cierto enfado, y no se pueden juzgar las reacciones porque ambas son entendibles. La serie no busca la indiferencia, sino dar que hablar.

Todo esto ocurre además con una potente banda sonora que coge fuerza y está llena de hits que se escuchan en distintos momentos de la trama, sea como acompañamiento sonoro o música que reproducen y cantan los mismos protagonistas. Que la saga de libros se llame Versos, canciones y trocitos de carne ya sirve de pista al respecto.

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Imágenes de Memento Mori (7 imágenes)

Memento Mori tiene dos problemas. El principal es que puede recordar a otras series ya vistas en muchos aspectos. No inventa nada, lo traslada a unas circunstancias distintas y, bajo una tonalidad visual que recuerda a las series nórdicas, busca agarres en el espectador.

El segundo problema es la recepción de los espectadores ante algunos momentos que no citaré porque son spoilers que destrozarían el visionado. ¿Ridículos o magníficos? En la mano de cada uno estará el decidirlo. Personalmente, algunos me parecen bien llevados y otros me han molestado.

En caso de que Memento Mori tenga éxito, seguro que hay una segunda temporada, y todo apunta a que es de esas series que crecerían con la suma de tramas. Veremos cómo es la acogida en Prime Video.