El mercado del streaming cambia y Netflix o Apple TV+ ya no ven con malos ojos aliarse con la competencia
Nunca digas "de esta agua no beberé", porque algún día tendrás sed y te tocará pasar por el aro. Algo así les está pasando a las plataformas de streaming.
No es ningún secreto que el streaming está sufriendo como pocos sectores los tiempos pospandemia. Netflix, HBO Max, Disney+ y Apple TV+, entre otros, disfrutaron de las vacas gordas cuando los confinamientos dejaron poco margen de entretenimiento más allá de los videojuegos, las series y películas o cotillear por el balcón.
Pero fue —por suerte— algo pasajero que ha dejado un mercado saturado tras de sí que, además, no está sabiendo adaptarse a los nuevos tiempos. Las subidas de precio y las limitaciones en servicios como Netflix o Disney+ están teniendo consecuencias negativas en la cantidad de usuarios que se mantiene en dichas plataformas.
Aunque en España ver paquetes de operadoras como Vodafone o Movistar Plus+ con Netflix, HBO Max o Disney+ incluidos, es una rareza absoluta al otro lado del charco. En Estados Unidos, Netflix y Apple se echaban las manos a la cabeza ante la mera idea de formar parte de paquetes para los usuarios.
Los tiempos cambian y los planes con anuncios se han convertido, irónicamente, en una fuente de ingresos para las plataformas de streaming mucho más rentable que los planes básicos, puesto que la publicidad se paga mejor que una suscripción. Por ello, servicios como Netflix ya no miran con tanta suspicacia esas insólitas alianzas.
Netflix, HBO Max y Apple TV+, a la caza de suscriptores con publicidad
Cuantos más suscriptores con publicidad tenga una plataforma, mejores datos tendrá y mayores ganancias. Tal y como informa The Hollywood Reporter, Netflix y Max se han aliado con Verizon en Estados Unidos para ofrecer un paquete que incluye sendas suscripciones con publicidad al 40% de descuento de su precio por separado.
El medio también informa de que Apple TV+ estudia una maniobra similar que incluya un paquete con Paramount+ a un precio atractivo para los consumidores.
En realidad, uno de los ejemplos de cómo debería progresar este sistema lo tenemos operando en España y se llama SkyShowtime, que incluye contenidos de distintas plataformas a un precio muy competitivo —y sin anuncios, debo añadir—.
De momento, las grandes plataformas de streaming abogan por mantener su independencia a base de formar parte de estos paquetes que les sigan reportando usuarios suscritos al plan con anuncios que, salvando las distancias, convierte el streaming en televisión convencional de pago con algunas diferencias que casi son anecdóticas en los tiempos de las smart TV.
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