Las previsiones de taquilla para la secuela de ¡Shazam! se están haciendo realidad, para desgracia de todo el equipo implicado en el filme. ¡Shazam! La furia de los dioses no tuvo el mejor de los fines de semana de apertura, pero aún podía salvar los muebles si se mantenía en ciertos márgenes en su segundo asalto en taquilla.

Pero no ha podido ser: la película de DC Comics protagonizada por Zachary Levi se ha desplomado en la taquilla estadounidense y ha caído un 68 %. De este modo, cosecha uno de los peores segundos fines de semana de todo DC. La película eleva su recaudación hasta unos tímidos 102,4 millones de dólares en todo el mundo.

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A Shazam 2 solo la superan las caídas de Batman v Superman: El amanecer de la Justicia y de El Escuadrón Suicida.

A pesar de que ¡Shazam! La furia de los dioses no es una película concebida para ser un gran taquillazo, el mayor esfuerzo del filme de David F. Sandberg en comparación con la cinta de 2019 hace que en Warner tuvieran mayores expectativas sobre su rentabilidad.

Una sucesión de penurias para ¡Shazam! La furia de los dioses

Pero la tormenta en torno a DC Studios y el futuro del Universo DC bajo el mandato de James Gunn y Peter Safran, así como esa controversia con Dwayne Johnson sobre el cameo el actor que rechazó en Shazam 2, han ayudado a que el interés en el filme decaiga aún más.

Tampoco está de más recordar la fatiga del género de superhéroes que afecta, principalmente, a Marvel y DC Comics, haciendo que haya menos interés en ver las producciones de sendos estudios.

Zachary Levi regresó como Shazam en la secuela, pero está por verse si el actor continuará reteniendo el papel en el futuro del Universo DC. La idea original era que sí continuase, pero este tropezón de la película deja los planes con el actor en el aire.

¡Shazam! La furia de los dioses continúa esta semana en taquilla, pero se antoja muy improbable que remonte lo suficiente como para rentabilizar su presupuesto de producción de entre 110 y 125 millones, sin contar el presupuesto de marketing.