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Hemos jugado Avatar: Frontiers of Pandora y parece digno de una superproducción de James Cameron

Avatar Frontiers of Pandora

¿Puede uno de los proyectos más ambiciosos del cine convertirse en un videojuego de aventuras que rompa moldes? Ubisoft quiere lograrlo con Avatar: Frontiers of Pandora. Nosotros hemos podido jugarlo durante varias horas y, desde luego, nos va a traer espectáculo a espuertas.

Han pasado 14 años desde que la primera película de Avatar asombrara por su avanzadísima tecnología visual. Aunque tuvo su videojuego oficial de Ubisoft, este pasó bastante desapercibido. Ahora, tras el éxito de Avatar: El sentido del agua, el universo jugable de los na'vi busca una nueva oportunidad con el muy prometedor Avatar: Frontiers of Pandora para PS5, Xbox Series X|S y PC.

En esta ocasión, los acontecimientos son algo anteriores a lo que se nos cuenta en la segunda película, con una na'vi desconocida como protagonista. Ella fue entrenada por la RDA y luego dormida en animación suspendida. Varios años después, despierta sola y desorientada.

Poco a poco, deberá colaborar con la resistencia para frenar a la RDA en su intento de explotar la frontera occidental, un área del planeta Pandora que no se ha visto en las películas. 

Nosotros hemos podido probar el juego en una sesión de cerca de 2 horas, para hacernos una idea de cómo funcionan su desarrollo principal, sus misiones secundarias y la exploración del mundo. En esta sesión, tuvimos que buscar una serie de ingredientes naturales por Pandora, aprender a vincularnos a un ikran para volar con él y sabotear unas instalaciones de la RDA.

Lo primero que llama la atención es que la inmensa mayoría del tiempo jugamos en vista subjetiva (a diferencia del juego original, que era en tercera persona), lo que busca que nos sumerjamos más en la vida de Pandora

Esto es importante, porque tendremos un enorme entorno natural que podremos explorar a placer, ya sea para recopilar recursos, para buscar basas abandonadas o para dar con otras misiones secundarias.

De hecho, como el entorno es tan grande y, lógicamente, tan "marciano" a nuestros ojos, será clave recurrir a nuestra brújula, al mapa general del menú de pausa y a nuestro instinto na'vi, al que accedemos pulsando un botón y que nos muestra con un pilar de luz la ubicación de nuestro objetivo principal, además de los rastros de animales que haya cerca, entre otras pistas.

También nos sirve para detectar si hay cerca plantas o animales que podemos escanear para nuestra base de datos, o bien interactuar con ellos para, por ejemplo, arrancar frutos. Esta faceta de "cosecha" varía su resultado según la hora del día o el cuidado con el que los arranquemos, mediante un sencillo minijuego. Así, los frutos pueden estar en mejor estado y ayudarnos más.

A la hora de explorar, hemos de tener en cuenta también que algunas plantas se pueden tocar para ayudarnos a trepar e incluso algunas hacen las veces de "muelle" para hacernos saltar más alto. También las hay tóxicas, así que hay que escanear a menudo y andar con ojo.

En el enorme mapeado, podemos encontrar nuestra base de operaciones, en el gran árbol, donde podemos interactuar con otros na'vi o con aliados humanos. Es allí donde podremos mejorar nuestros dispositivos o acceder a una buena cantidad de misiones secundarias que nos ayuden a subir de nivel y mejorar nuestras habilidades.

Avatar: Frontiers of Pandora

Con los materiales que recojamos, podemos fabricar sobre la marcha munición, algo que será crucial cuando nos crucemos con animales hostiles o con patrullas de la RDA. Lógicamente, podemos cazar animales cuando queramos para aprovechar sus nutrientes. Al recogerlos, nuestro personaje dará gracias por esos alimentos. Recordad que somos uno con la naturaleza...

Con otros animales, podemos intentar apaciguarlos y acercarnos lentamente a ellos, mientras les hablamos para calmarlos. Conseguirlo requiere bastante paciencia, la verdad.

Pacíficos sí, pero si hay que disparar, se dispara

Os hemos hablado antes de las armas y, como supondréis, vamos a tener a nuestra disposición tanto arcos tribales de los na'vi como armas de fuego de la RDA. Las de fuego son más contundentes pero costará dar con munición, mientras que los arcos permiten fabricar munición fácilmente y los hay pensados para corta distancia, pero un estilo más "francotirador", etcétera.

Eso sí, aunque los na'vi son tremendamente ágiles y versátiles, habrá que usar el coco para atacar a los soldados, pues un par de ellos con sus gigantes mechas pueden despacharnos en un segundo. Por cierto, para sanarnos, hemos de comer lo que tengamos a mano en el inventario, siempre que nos den un respiro.

Avatar: Frontiers of Pandora

Todas estas facetas se podían ver en la primera misión que jugamos y, aunque reconocemos que al principio resulta algo desconcertante enfrentarnos a tantos seres desconocidos, poco a poco nos vamos acostumbrando a un mundo tan diferentes. 

La clave está en ser conscientes de todos los recursos a nuestra disposición y aprovecharlos. Si vamos explorando poco a poco, descubriremos desde animalillos diminutos hasta enormes y fascinantes moles.

En cualquier caso, la segunda misión resultó bastante más interesante: había que escalar una gigantesca montaña para dar con el ikran al que debemos vincularnos, para acercarnos poco a poco a él y estrechar el lazo.

Como era de esperar, aquí nos toca visitar las icónicas rocas flotantes y es donde se pone más a prueba la faceta plataformera del juego, con saltos de vértigo que pueden hacernos caer al vacío, pero también algún puzzle espacial en el que encontrar las plantas que nos abran el camino.

También fue aquí donde más se lució el juego a nivel visual, con escenarios llenos de luz, color... ¡y altura, por supuesto! Proporciona una mezcla de miedo y fascinación el ir ascendiendo poco a poco por esta montaña, a la vez que una épica música nos acompaña.

Bienvenidos a Líneas Aéreas Pandora

Una vez arriba del todo y con el ikran "dominao", comienza la deseada parte de vuelo, esta vez en tercera persona, en la que podemos dirigir de forma sencilla a nuestra montura, para que acelere a toda pastilla (aunque eso lo cansará después de un rato, claro) o que se lance en picado para darnos tanto espectáculo como un cambio estratégico de posición. 

En pleno vuelo, podemos tanto alimentar al ikran para sanar sus heridas como disparar a los enemigos, algo que resulta sorprendentemente cómodo, incluso con cambios de arma rápidos.

Avatar: Frontiers of Pandora

Movernos sin parar y apuntar a los malos se volverá cada vez más importante, ya sea para abatir pequeños drones o para hacer explotar enormes helicópteros. Ya sabéis: disparar a las hélices los hará caer mucho más rápido, pero también podremos apuntar directamente a los soldados que nos disparen desde ellos para cortar el fuego enemigo de raíz.

Como supondréis, estas partes de vuelo nos han parecido la parte más divertida por ahora, pero también hay que compaginarlas con momentos en los que bajar a una superficie para sabotear alguna maquinaria de la RDA. Esto se hace con un escáner que podemos activar para dar inicio a un minijuego en el que seguir un circuito con el stick para cumplir la tarea.

Una vez tengamos el objetivo al descubierto, habrá que dispararle, montar en el ikran y salir disparados antes de que estalle todo, en una dinámica rápida y espectacular. Podemos bajarnos del ikran cuando queramos y llamarlo para que nos busque con una pulsación de la cruceta, incluso en plena caída.

Con todas estas rutinas jugables interiorizadas, nos enfrentamos al último tramo de la sesión de preview, consistente en infiltrarnos en una enorme base de la RDA para inutilizar varias maquinarias clave.

Claro, podríamos volar con nuestro ikran por encima y disparar a lo loco o bien usar nuestras armas desde tierra, pero la base está enormemente protegida y pueden llamar refuerzos, así que lo ideal es ser muy sigilosos, usar nuestros sentidos para ver quién patrulla y por donde y avanzar poco a poco, sin que nos detecten.

Sin duda, esta es la parte más "Assassin's Creed" del juego (aunque os reconocemos que no es la única que nos ha recordado a esa franquicia) y es fundamental tener paciencia para aprovechar las rendijas entre la vigilancia enemiga.

La Gran Madre de todas las aventuras

Así pues, como podéis ver, Avatar Frontiers of Pandora parece un juego amplio, con muchas facetas jugables por descubrir... Y estamos seguros de que apenas hemos visto un pequeño porcentaje de lo que nos tiene que ofrecer.

Avatar: Frontiers of Pandora

Vale, es cierto que quizá se nota un poco la "plantilla Ubisoft" en el diseño de juego (como decimos, puede recordaros a los Assassin's o a Far Cry), pero lo que hemos visto es muy espectacular, variado y lleno de posibilidades de experimentación.

El 7 de diciembre descubriremos hasta qué punto podemos sentirnos parte de este mundo y cuánto puede sacar partido a las consolas más recientes (nosotros jugamos por streaming desde un PC), para que al ponernos a los mandos de Avatar: Frontiers of Pandora podamos decir "te veo".

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