Acaba el año y, como viene siendo costumbre, en HobbyConsolas.com inundamos la página con listados y Top 10's repasando lo mejor que nos ha dejado el año, tanto en videojuegos como en cine y series. Pero en esta santa casa hay sitio para todo, así que tampoco queremos olvidarnos de los juegos que, por decirlo de alguna manera, no han llegado al mínimo de calidad exigido.
Que vamos a repasar los peores juegos de 2017, vaya. Porque este año será sin duda recordado como uno de los mejores por la calidad y cantidad de los lanzamientos (con joyas como The Legend of Zelda: Breath of the Wild o Super Mario Odyssey), pero nadie es perfecto y también ha tenido unos cuantos puntos negros (diez, para ser exactos).
Pero como en Hobby Consolas nos nutrimos de maletines rebosantes de papeles verdes (entre otros colores) y somos incapaces de puntuar un juego por debajo del 80, hemos acudido a Metacritic para elaborar este listado con los 10 peores juegos de 2017. El popular agregador recoge las valoraciones otorgadas en los análisis de los medios más prestigiosos para sacar una nota media, así que si pensáis que Vroom in the Night Sky ha sido injustamente infravalorado y merece ser el GOTY 2017 (estáis en vuestro derecho, no dejéis que nadie os diga lo contrario), tened en cuenta que la culpa es de otro. Como siempre.
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10. Rugby 18
¿Os gusta el Rugby? ¿Y los videojuegos? Entonces Rugby 18 NO es vuestro juego. Este título es tan rematadamente malo que cualquier parecido con el deporte real es mera coincidencia. Para que os hagáis una idea, el Trivial es mejor simulador de Rugby que Rugby 18. Si os consideráis aficionados y no queréis odiarlo, hacednos caso: alejaos de este juego.
Nota: 42
9. Touhou Kobuto V: Burst Battle
La saga Touhou es relativamente popular entre los amantes de los bullet hell (shoot'em ups caracterizados por la inmensa cantidad de disparos en pantalla), pero lo que tenemos aquí se trata de un spin-off que nunca debería haber pasado de la fase inicial de desarrollo: a nivel técnico bien podría pertenecer a la sexta generación (PS2, Xbox, GameCube y Dreamcast), y su sistema de control es tan desastroso que querréis pegaros un millón de tiros.
Nota: 42
8. Tokyo Tatto Girls
Si pensáis que detrás de semejante título se esconde algún juego de palabras o un significado oculto, no podéis estar más equivocados: Tokyo Tattoo Girls es, literalmente, un juego sobre chicas que viven en Tokyo y consiguen poderes especiales a través de tatuajes. Pero esta curiosa premisa pasa a un segundo plano cuando nos metemos en el meollo, que no es más que estrategia simplona, incapaz de mantener nuestra atención más allá del tutorial. Tatuarse es menos doloroso que pasar cinco minutos con este juego.
Nota: 41
7. Inner Chains
El Kickstarter de Inner Chains apuntaba maneras, prometiendo una aventura de acción en primera persona con una ambientación oscura de estilo biomecánico, como nunca antes se había visto. Desgraciadamente esto es lo único destacable, pues su jugabilidad es la de un FPS genérico que sólo consigue despertar bostezos. Ahora bien, hay que reconocer que si sus creadores pretendían causar terror, lo han conseguido sobradamente.
Nota: 40
6. Drive Girls
El creador de la saga Senran Kagura se atreve con con otro género, aunque vuelve a recurrir a voluptuosas muchachas con escasa ropa para tratar de llamar la atención... porque está claro que no sabe hacerlo de otra forma. Es decir, Drive Girls mezcla velocidad, acción y humanos que se transforman en vehículos... Y aun así es un juego horriblemente aburrido.
Nota: 39
5. Troll and I
Imaginad por un momento que en The Last Guardian, además de al muchacho protagonista, pudiésemos manejar a Trico, abriendo así posibilidades multijugador. Y ahora Imaginad que Trico, en lugar de un gato con plumas, fuese un troll gigante. Ese sería sin duda un juego de lo más interesante... Pero Troll and I no es ese juego. De hecho, es preferible pasar el resto de nuestros días escondidos bajo un puente antes que tener que martirizarnos más de medio minuto con esta aberración.
Nota: 39
4. Dying: Reborn
La realidad virtual es el futuro, decían. Será divertido, decían. Lo que nadie dijo es que un juego como Dying: Room, que ya en su versión normal no es para tirar cohetes, vería su contenido reducido en la versión de PSVR, convirtiéndose así en la primera experiencia que da ganas de vomitar incluso antes de ponerse el casco.
Nota: 38
3. Randall
Un juego de plataformas donde el protagonista, Randall, debe enfrentarse a una dictadura haciendo uso de sus poderes telepáticos. Resulta curioso cómo una propuesta tan interesante puede fallar estrepitosamente a causa de unos controles nefastos (¿es que nadie ha testeado este juego antes de lanzarlo?) y una cantidad de bugs tan elevada que es necesario usar insecticida antes de coger el mando.
Nota: 38
2. Road Rage
Esta suerte de sucesor espiritual de la saga Road Rash apuntaba maneras, siguiendo la estela de las entregas originales para ofrecer carreras de motos ultra-violentas. Pero para violencia, la que siente uno al ponerse a los mandos. Si sois capaces de jugar sin sentir la imperiosa necesidad de destrozar Road Rage con una palanca, sois demasiado puros para este mundo.
Nota: 26
1. Vroom in the Night Sky
Y el peor juego de 2017 es, con diferencia, Vroom in the Night Sky. Y, curiosamente, ¡es el único de toda la lista que hemos tenido el honor de analizar en Hobby Consolas! Un juego de carreras de escobas en el que ni el poco texto que lo acompaña se salva de erratas. David Martínez, encargado de analizarlo, tuvo a bien otorgarle un 15; una de las notas más bajas en la historia de Hobby Consolas. Desde aquí le mandamos un fuerte abrazo por haber tenido que vivir una experiencia tan traumática.
Nota: 17
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