Desde Alien hasta Gladiator II, Ridley Scott siempre ha hecho historia y ha conquistado a las masas

Ridley Scott es sinónimo de cine, de buen cine, así que con cada nuevo proyecto que estrena, se eleva el hype por parte de la comunidad cinéfila, y más ahora que el cineasta tiene ya 86 años. 

Eso sí, el director de Blade Runner nunca ha mostrado ningún interés en retirarse y no parece que vaya a ocurrir en un futuro próximo, pues después de Gladiator II Ridley Scott cuenta con varios largometrajes ente manos.

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Ridley Scott debutó como director de largometrajes con Los duelistas (1977), pero fue con su siguiente película, Alien, el octavo pasajero (1979) con la que hizo historia. 

Esos diseños del xenomorfo realizados por H. R. Giger o el personaje de Ellen Ripley interpretado por Sigourney Weaver se convirtieron en un referente del cine de terror.

Ridley Scott volvió a hacer historia en 1982 con su siguiente película: Blade Runner, posiblemente la mejor adaptación de una novela que hayamos visto en pantalla. Podríamos decir que, del mismo modo, la cinta definió la estética cyberpunk. 

Ridley Scott sigue haciendo historia

Tanto Alien, el octavo pasajero como Blade Runner iniciaron universos en expansión que han recibido varias continuaciones y que se siguen ampliando a día de hoy, además de haber servido como inspiración a infinidad de obras desde entonces. 

Algo que podríamos decir de casi cualquiera de sus largometrajes: Thelma & Louise (1991) es un referente de las road movies, Gladiator (2000) del cine moderno ambientado en la antigua Roma, o Marte (The Martian) (2015) de las películas espaciales.

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Porque otras de las claves del cine de Ridley Scott es que no se ha limitado a explorar un único género, y a lo largo de su carrera ha dirigido todo tipo de proyectos: desde thrillers como Black Rain (1989) hasta biopics como La casa Gucci (2021). 

Pero el patrón siempre es el mismo: son producciones que todo el mundo está deseando ver y que recaudan millones de dólares en taquilla. Incluso su última cinta, Napoleón (2023), que fue una decepción en su recreación histórica, logró sacarnos de nuestras casas para comprobarlo de primera mano, consiguiendo recaudar 221 millones de dólares a nivel internacional.

Ahora la expectación está muy alta por la secuela de Gladiador, que llega 24 años después que la película original, y a la que regresa parte del elenco de la primera entrega. Una película que no faltará en los calendarios de nadie que sea fan de Ridley Scott y de la cinta de Russell Crowe.

En el horizonte, Ridley Scott cuenta con varias cintas en camino como: Bomb, descrita como “un thriller de acción con potencial de franquicia” que ofrecerá “un papel excelente para un joven actor”, o un nuevo biopic, en esta ocasión sobre el grupo Bee Gees, con cuyos integrantes estuvo a punto de trabajar en los inicios de su carrera. 

Todas ellas son candidatas perfectas para seguir avivando la fiebre por el cine de Ridley Scott, una que nunca se ha apagado y el cineasta sigue alimentando con cada nueva producción.