Análisis de The Devil in Me o cómo sobrevivir al morbo de los asesinatos en serie

The Dark Pictures (ahora sin el "Anthology" al final) nos ha servido para disfrutar de aventuras de terror cortas y directas y así gozar sin complicaciones del género, pero también ha ayudado a que sus responsables experimenten con ambientaciones y fórmulas diferentes, algo a lo que se adhiere, en parte, este The Devil in Me que ahora llega.

El cuarto juego de la serie es el último de lo que se considera la primera temporada (que arrancó con Man of Medan allá por 2019) y como tal tiene la responsabilidad de dejar el listón en un punto álgido. En lo jugable, aporta sus propias ideas, mientras que en lo argumental, va un poco a lo seguro, pero irónicamente es lo que mejor le funciona.

La historia de The Devil in Me sigue a un pequeño equipo de producciones audiovisuales basadas en crímenes reales. El ladino jefe Charlie y sus desencantados empleados atraviesan horas bajas y se lo juegan todo a una última carta: visitar y grabar un hotel inspirado en los crímenes de H.H. Holmes, el primer gran asesino en serie de EEUU.

Poco después de llegar allí, deberán luchar para sobrevivir en unos pasillos en los que no todo es tan "simulado" como ellos creían... La presentadora del equipo, Kate, es una chica resuelta a la que interpreta Jessie Buckley (Chernóbil, Men), pero sus compañeros también son muy interesantes: su rival irónica, el chico tímido pero con ganas de hacer las cosas bien...

Sus personalidades entran en colisión con el aura de mito que rodea a los asesinatos de H.H. Holmes un siglo atrás (el cual, por cierto, existió en la realidad). ¿Qué tienen que ver esos crímenes con lo que está pasando en el hotel? ¿Quién parece estar asustándolos o "algo más" entre bambalinas? ¿Y por qué los invitaron en realidad a acudir a ese edificio?

Por supuesto, vuelve el Conservador para introducirnos en la historia y ¿guiarnos? con algunas sugerencias sobre lo que espera de nosotros. ¿Nos dará una buena valoración cuando lleguemos al final del viaje?

El análisis de The Devil in Me para PS4, PS5, One, Series X/S y PC de Hobby Consolas:

• ¿Cuántas horas de juego dura The Devil in Me?
• El gameplay de The Devil in Me
• Nivel de dificultad de The Devil in Me
• Cuánto cuesta The Devil in Me y dónde puedes jugarlo
• La opinión de Hobby Consolas de The Devil in Me
• Lo mejor y lo peor de The Devil in Me

Jugabilidad y gameplay de The Devil in Me para PS4, PS5, One, Series X/S y PC

Como ya es habitual en los juegos de Supermassive Games, la dinámica se basa en explorar entornos relativamente cerrados (podemos mover la cámara libremente, como ya instauró House of Ashes) para encontrar pistas, llaves o items que hagan avanzar la historia. Nos movemos en tercera persona con el personaje que nos toque en ese momento.

Si vemos algún elemento que destelle, podemos acercarnos para interactuar, lo que puede llevar a un plano detalle sobre cómo lo cogemos, a una escena... También, claro, puede llegar un quick time event en el que debamos pulsar los botones adecuados en décimas de segundo, aunque son comandos super básicos, al menos en la dificultad normal.

Otros quick time events consisten en colocar una mirilla en el punto exacto y pulsar un botón, para zafarnos de una parada, por ejemplo.

Tampoco faltan a la cita los tensísimos momentos del cardiograma: hay que pulsar un botón con el ritmo justo, como si imitáramos el latido de nuestro corazón, para no llamar la atención de lo que nos esté persiguiendo.

En otras ocasiones, en vez de pulsar un botón, deberemos decidir en un instante entre dos opciones críticas: ¿huir o escondernos? ¿Liberar a una persona o a otra? Todo esto llevará a alterar irremediablemente el destino de los 5 protagonistas: puede que todos se salven, que todos mueran o cualquier punto intermedio...

Estas pautas ya estaban en los anteriores juegos de la serie, pero The Devil in Me aporta retos de cosecha propia: por primera vez, los personajes tienen inventario, que es exclusivo de cada uno. Su uso es super básico y el propio juego nos lo desplegará cuando haga falta, para que elijamos con la cruceta usar una llave, un inhalador para asmáticos... o un arma.

También hay tramos en los que movernos entre paredes, mantener el equilibrio, saltar o incluso mover algunas cajas o contenedores (al más puro estilo The Last of Us) para crear plataformas improvisadas con las que llegar a nuevos lugares. También hay momentos en los que buscar corriendo un escondite, aunque suelen ser fáciles de localizar.

Aunque estas nuevas dinámicas son interesantes, nos da la sensación de que no acaban de explotarse de forma satisfactoria y sus desafíos son bastante simplotes en comparación con otros juegos. Lo mismo sucede con los objetos únicos de los inventarios de los personajes, aunque en algunos momentos (como el uso del micro direccional) sí consiguen aportar puntitos de tensión.

No nos olvidamos de los coleccionables: como ya es tradición, es posible encontrar textos o fotos que nos den pistas sobre el pasado de la trama, pero también imágenes que sirvan como presagio de posibles muertes a las que nos toque enfrentarnos, para que estemos sobre aviso y sepamos reaccionar llegado el momento.

Aquí también hay una novedad simpática: los óbolos o "monedas de los muertos". Podemos encontrar muchas de estas monedas dispersas por los escenarios, que se canjean por puntos para, desde el menú principal, "comprar" modelos 3D de los personajes. Además, al llegar a puntos clave de la trama, desbloquearemos entrevistas y documentales sobre la creación del juego.

Como veis, hay más variedad de actividades que nunca, aunque el conjunto tiene quizá un sabor más clásico, más cercano a Until Dawn, especialmente si lo comparamos con los más "experimentales" Little Hope y House of Ashes.

Y es que, aparte de las decisiones del momento y los QTE que superemos, aquí vuelve a importar mucho la relación que forjemos con los compañeros, así como las facetas de la personalidad que potenciemos: hacer una cosa u otra aumentará nuestro índice de terquedad o de practicidad, por ejemplo, pero a la vez puede provocar que nuestra afinidad con otro personaje empeore.

Esto es importante porque, en ciertos momentos críticos, puede provocar que nuestro personaje tenga una reacción inesperada y lleve a la muerte de un personaje que no habíamos visto venir. El efecto mariposa que tanto gusta a Supermassive, vamos.

Esto a veces puede ser un poco chocante e incluso frustrante, porque nunca se explica exactamente a qué se ha debido una acción o reacción (algo que sí se elabora más en el reciente The Quarry), por lo que en ocasiones hemos de suponer en qué nos equivocamos una hora atrás.

Pero ahí tenemos también parte de la gracia: hemos de estar en alerta constantemente, porque nunca se sabe cuándo puede llegar el momento de triunfar o de meter la pata.

¿Es difícil The Devil in Me?

Como hemos mencionado, buena parte de nuestro éxito se basa en tomar decisiones correctas con poco contexto y en décimas de segundo, pero ahí radica el encanto de la experiencia. En ese sentido, es importante mantener la sangre fría, pero en cualquier caso, siempre se llega al final de la historia, ya sea con la satisfacción de haber salvado a nuestros héroes o todo lo contrario.

El resto de desafíos, como los QTEs o los puzzles (hay alguno sencillito basado en activar interruptores en un orden correcto) son razonablemente asequibles.

Por otro lado, tenemos 3 niveles de dificultad al comienzo de la aventura, por si la experiencia nos parece demasiado dura o demasiado permisiva. 

Además, si no quedamos contentos con alguna muerte, podemos volver al menú principal y cargar la aventura desde el inicio de un tramo concreto. Eso nos puede obligar a repetir varios minutos de juego y puede que el desencadenante de una muerte no se encontrara ahí sino mucho más atrás, pero es mejor que nada...

¿Cuántas horas dura la historia de The Devil in Me?

Aquí encontramos un cambio interesante respecto a entregas previas. Como si de un "season finale" de Netflix se tratara, este juego es el más largo de The Dark Pictures, pues dura unas 7 horas completarlo, de media.

A esto hay que añadir, lógicamente, su enorme rejugabilidad, pues podemos tomar una gran variedad de decisiones que alteren dónde o cómo acaba cada personaje, lo que nos lleve a intentarlo de nuevo para alcanzar un mejor destino.

Siguiendo con las buenas prácticas, no solo podemos superar la aventura en solitario, sino que también tenemos el modo Noche de pelis para pasarnos el mando con hasta cuatro jugadores más y que cada uno maneje a su personaje cuando toque o bien entrar al juego online para superar la aventura junto a un amigo.

Una vez más, esta es la modalidad más interesante, porque vemos que el otro jugador está tomando una decisión pero no sabemos cuál hasta que lo haga. Cooperar y confiar en el otro es fundamental para triunfar.

Precio y plataformas disponibles

The Devil in Me llega el 18 de noviembre a PS4, PS5, One, Series X/S y PC y tiene un precio de 39,99 euros, tanto en edición física como en digital. 

Pero claro, llegados a este punto, nos toca preguntarnos: ¿lanzará Bandai Namco un recopilatorio con los 4 juegos de The Dark Pictures Anthology, reunidos a un precio especial? Desde luego, a nosotros nos parecería un estupendo recopilatorio.

De menos a más, como los buenos thrillers, pero... ¿suficiente, a estas alturas?

Os reconocemos que el concepto de The Dark Pictures nos ha gustado mucho. Ha demostrado ser una buena idea, con la que cada poco tiempo tendríamos una sorpresa nueva, pero a la vez "familiar", con la que sentirnos como en casa mientras pasamos tensión.

Dicho eso, ¿basta con añadir pequeñitas innovaciones y un nuevo contexto en cada entrega para mantener viva la llama del interés? Bueno, es cierto que los juegos son, quizá, DEMASIADO parecidos entre sí.

Incluso a nivel de desarrollo de personajes, aunque están muy bien retratados, se reciclan ideas: antiguos noviazgos, misteriosos traumas pasados... Pero reconocemos que, en este último, el misterio en torno a los asesinatos mola, así como las "triquiñuelas" para engañar al jugador haciéndole creer que alguien ha muerto. Atentos a los nombres de los logros y trofeos, tienen guasa.

Por otro lado, nos ha pasado algo extraño: a nivel técnico, nos ha parecido sorprendentemente flojo en su tramo inicial (un prólogo de lo más siniestro e interesante, por otra parte), con modelados e iluminación que no parecían propios de lo que nos suele traer Supermassive.

Por alguna razón (¿quizá se han encargado diferentes equipos?), en los tramos posteriores, cuando ya estamos en en el hotel, todo esto parece mejorar notablemente.

Nosotros hemos jugado en PS5 y era posible elegir entre modo calidad o rendimiento, pero nuestra conclusión siempre es la misma: mucho mejor el modo rendimiento, pues no notaréis cambio gráfico y todo irá más fluido.

A nivel sonoro, volvemos a contar con voces en castellano de primer nivel, que suelen funcionar muy bien, aunque muchas veces se nota que los actores no sabían el contexto de lo que estaban doblando y hablan demasiado bajo o demasiado alto, por ejemplo.

En cualquier caso, sus interpretaciones junto con la música tensa y bien medida ayudan muchísimo a meternos en ambiente. ¿Es este un juego que dé miedo? No como tal, pero desde luego saber mantener el "crescendo" de la tensión... y algún gritito a traición bien que nos ha robado.

The Devil in Me es, por tanto, un cierre notable a la primera temporada de The Dark Pictures, un conjunto de experiencias que han sabido encontrar su público. Si los juegos anteriores no te convencieron, este tampoco lo hará, pero si eres "parroquiano" del terror de Supermassive, encontrarás en su obsesión por los asesinatos y en su hotel una estancia de lo más acogedora.

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