Análisis de Octopath Traveler II, una secuela que mejora en (casi) todo al original

Tras conquistar al mundo replicando el estilo de los JRPG tradicionales y entrar por los ojos con el ya icónico HD-2D, Square Enix y el Team Asano (responsables de Bravely Defalt II, Triangle Strategy y el remake de Live-A-Live) nos traen Octopath Traveler II, la secuela del juego de rol japonés lanzado en 2018 para Nintendo Switch.

Y siguiendo los pasos de la saga JRPG de Square Enix que sirve como principal inspiración, Octopath Traveler II es una secuela independiente que nos lleva hasta un mundo completamente nuevo, con personajes nuevos y una historia nueva. Lo que no cambia es su propuesta: volvemos a tener ocho viajeros, con orígenes y motivaciones dispares, que se lanzan a la aventura.

También se mantienen intactos el desarrollo y mecánicas inspirados en los JRPG tradicionales, principalmente de los 16 bits, pero Octopath Traveler II ha tomado nota de los aspectos que no terminaron de cuajar en Octopath Traveler, y viene dispuesto a demostrar que no sólo vive del homenaje y es capaz de mirar de tú a tú a los clásicos del género. Veamos si lo consigue.

El análisis de Octopath Traveler II para PS4, PS5, Nintendo Switch y PC de HobbyConsolas:

• El gameplay de Octopath Traveler II
• La historia de Octopath Traveler II
• Nivel de dificultad de Octopath Traveler II
• ¿Cuántas horas de juego dura Octopath Traveler II?
• Los gráficos y el sonido de Octopath Traveler II
• Cuánto cuesta Octopath Traveler II y dónde puedes jugarlo
• La opinión de HobbyConsolas de Octopath Traveler II
• Nota: lo mejor y peor de Octopath Traveler II

Jugabilidad y gameplay de Octopath Traveler II en PS4, PS5, Nintendo Switch y PC

Como su antecesor, Octopath Traveler II es un homenaje a los JRPG clásicos; a aquella época en la que controlábamos a "muñecos" hechos con píxeles, los combates eran por turnos y los encuentros eran aleatorios. 

Recorremos el mundo de Solistia por tierra y mar, visitamos pueblos y ciudades, nos abastecemos de equipo en tiendas, encontramos tesoros, exploramos mazmorras... Y en cualquier momento puede asaltarnos un enemigo o enemigos, lo que da paso a la pantalla de combate mediante transición.

Los combates por turnos de Octopath Traveler II merecen una explicación aparte, porque ademas de contar con un sistema con mucha miga, son muy, muy buenos. Como en el juego original, todos los enemigos empiezan los combates con un escudo que hace que nuestros ataques causen menos daño y que sólo se puede destruir usando las armas y elementos adecuados.

De esta forma, los combates de Octopath Traveler II giran principalmente en torno a descubrir las debilidades enemigas para dejarlos indefensos y golpear con todo. Esto se combina directamente con la mecánica de impulso, que permite a los personajes acumular cargas cada turno para golpear varias veces o aumentar la potencia de las habilidades y hechizos.

Se crea así un sistema de combate por turnos que exige mucha planificación, obligándonos a estar pendientes continuamente de la barra que indica el orden de actuación para determinar cómo proceder. Está muy bien pensado y resulta súper satisfactorio, especialmente cuando finiquitamos un combate sin dejar que los enemigos actúen.

A todo eso hay que sumarle que cada uno de los ocho personajes que protagonizan Octopath Traveler II son completamente diferentes y cuentan con habilidades que los hacen únicos. Y no hablamos sólo de que uno sea un guerrero y otro un mago, sino de cosas que van mucho más allá.

Por ejemplo, Hikari, el guerrero, puede aprender técnicas únicas al retar y derrotar a NPCs, Castti, la boticaria, puede mezclar dos ingredientes para crear efectos beneficiosos para el grupo o perjudiciales para los enemigos y Ochette, la cazadora, puede capturar a casi cualquier criatura e invocarla en combate. Como veis, hablamos de mecánicas diferentes para cada personaje.

Por supuesto, y también como en el primer Octopath Traveler, a medida que los personajes suben de nivel podemos aprender nuevas habilidades activas y pasivas o cambiar de trabajo para aumentar aún más las posibilidades. La gran novedad de Octopath Traveler II es el potencial, que viene a ser una especie de ataque definitivo.

Y, de nuevo, se trata de algo único para cada personaje. Porque en algunos casos es algo directo, como un ataque muy poderoso, pero en otros el potencial nos da acceso a útiles ventajas, como cargar por completo los puntos de impulso o concentrar un hechizo múltiple sobre un único enemigo para incrementar enormemente su poder.

Se trata sin duda de un gran adición que, junto al resto de bondades, redondea un sistema de combate que es de lo mejorcito que hemos visto. Si sois defensores de los turnos, os lo vais a pasar en grande.

Pero como bien sabrán los que jugaron al primero, Octopath Traveler II también se caracteriza por tomar elementos de otros JRPG menos conocidos, pero igualmente clásicos, como Live-A-Live o la saga SaGa (valga la redundancia).

Esto lo podemos apreciar nada más empezar a jugar, pues debemos elegir entre uno de los ocho personajes. Esta elección determina en qué parte del mundo empezamos la aventura y, además, hace que ese personaje sea fijo en el grupo para el resto del juego.

Pero una vez terminado el primer capítulo con ese personaje, el mundo se abre ante nosotros y podemos ir donde queramos. Podemos ir al siguiente capítulo de nuestro personaje elegido, pero también podemos ir a reclutar a cualquiera de los otros personajes, lo que también nos da la opción de empezar sus historias. O, si lo deseamos, podemos simplemente explorar el mundo.

Esto hace que Octopath Traveler II sea un JRPG que ofrece una libertad inusitada dentro del género. La única barrera que vais a encontrar al explorar el mundo es el nivel de los enemigos, pues si nos metemos en una zona donde nos superan por mucho... es bastante probable que salgamos escaldados.

Otro aspecto en el que Octopath Traveler II es único dentro del género JRPG es la forma en que nos permite interactuar con los NPC. Si jugasteis al primer Octopath recordaréis las acciones de senda, que son habilidades únicas de cada personaje que nos permiten hacer cosas como obtener información extra de los NPC o convencerlos para que nos apoyen en combate.

En Octopath Traveler II la novedad es que ahora las acciones de senda se dividen en acciones de día y acciones de noche. Es decir, que por el día un personaje como Castti puede preguntar a los NPC para recabar información, pero por la noche su acción sirve para sedar, lo que nos puede abrir muchas puertas... literalmente.

Los veteranos del primer Octopath Traveler probablemente estarán pensando: «un momento... ¿cómo que día y noche?» He ahí otra novedad de esta segunda parte: con tan solo pulsar un botón, podemos hacer que el día pase a la noche o viceversa. 

Esto, además de influir en la acción de senda que puede realizar cada personaje, también provoca pequeños cambios, como que aparezcan NPCs que sólo salen de noche. Creemos que es una mecánica interesante pero un poco desaprovechada, porque supone que tengamos que explorar cada localización dos veces si no queremos perdernos nada.

Donde sí tiene utilidad es a la hora de combatir, pues por la noche aparecen enemigos más poderosos, lo que a su vez se traduce en una forma más rápida (y arriesgada) de subir de nivel.

Argumento y narrativa de Octopath Traveler II

Una de nuestras mayores quejas con el primer Octopath Traveler fue que los ocho personajes y sus historias eran demasiado independientes los unos de los otros; daba la sensación de estar controlando a un grupo de desconocidos que viajaban juntos sin mediar palabra.

Octopath Traveler II trata de remediar esto de varias formas. En primer lugar con pequeños detalles, como que durante los combates, los personajes alaban la actuación de sus compañeros al hacer cosas como romper el escudo de un enemigo. Y lo cierto es que escuchar a los personajes refiriéndose a los demás por su nombre contribuye a generar sensación de grupo.

Pero también hay cosas mucho más trabajadas, como capítulos opcionales en los que las historias de dos personajes se cruzan, dando lugar a interacciones, diálogos y situaciones de grupo reales, que es lo que tanto se echaba en falta en el primer Octopath.

Sigue sin ser perfecto y todavía hay momentos en los que es inevitable sentir esa desconexión entre los personajes, pero es un buen paso respecto al primer Octopath. 

Sin embargo, no todo se ha corregido en lo referente a la narrativa: durante las primeras horas, y más concretamente en el capítulo uno de cada personaje, Octopath Traveler II tiene serios problemas para mantener nuestra atención. Esto se debe a la forma en que está presentada la historia, pues los diálogos suelen ser demasiado estáticos y se acusa cierta repetición y lentitud. 

Por suerte, a partir del segundo capítulo las historias despegan y todo es mucho más interesante. Realmente las historias no son el problema; en todo caso, pecan de ser un poco manidas, pero destacan por su gran variedad, tanto en lo que cuentan como en su tono.

Porque pasamos de la historia de una bailarina que quiere llevar sonrisas a todo el mundo... a otra sobre un hombre que ha sido encarcelado injustamente por el asesinato de su mujer e hija. 

Inevitablemente es más fácil conectar con unas que con otras, pero nos gusta mucho que en Octopath Traveler II haya espacio tanto para la épica grandilocuente habitual del JRPG, como para historias más pequeñas y más humanas. 

¿Es difícil Octopath Traveler II?

En Octopath Traveler II no existen los niveles de dificultad, pero lo hemos encontrado algo más asequible que el primero, que es recordado porque podía llegar a ser muy desafiante. 

Es decir, sigue habiendo combates complicados en los que vais sudar y vais a tener que organizaros muy bien, pero la progresión y la curva de dificultad están mejor medidas en esta secuela.

Y como comentábamos hace un momento, el nuevo sistema de día y noche sirve como una suerte de nivel de dificultad improvisado que se puede alternar en cualquier momento: si queréis desafío jugaréis siempre de noche, y si notáis que en una zona los enemigos os superan, basta con pulsar un botón para que se haga de día y las cosas se faciliten.

¿Cuántas horas dura la historia de Octopath Traveler II?

Dado que se trata de un JRPG, os podéis imaginar que Octopath Traveler II es un juego muy largo. Completar las ocho historias os puede llevar sin problema entre sesenta y ochenta horas, dependiendo de cuánto exploréis y de si os entretenéis realizando misiones secundarias, completando los encargos de los gremios y otras actividades opcionales.

Y si además también queréis darle caña al post-juego, donde os esperan unos cuantos secretos, entonces Octopath Traveler II se os va a ir a más de cien horas.

Apartado audiovisual de Octopath Traveler II

Probablemente no haga falta decirlo, pero Octopath Traveler II es una maravilla audiovisual. Y no sólo porque el Team Asano haya perfeccionado el estilo HD-2D, que es una auténtica delicia. 

También porque el mundo de esta entrega está dando los primeros pasos de su revolución industrial, de manera que además de pueblos y ciudades de corte medieval, visitamos localizaciones bañadas por luz eléctrica y movidas por máquinas de vapor. Es decir, que la variedad de escenarios es muy elevada.

La mezcla de píxeles y alta resolución sigue dando unos resultados maravillosos; en combate, los efectos de los hechizos y las habilidades nunca dejan de sorprendernos, y se han añadido nuevos movimientos de cámara que aportan un gran dinamismo y resaltan los ataques más potentes. 

A la hora de explorar, los escenarios tienen ese conseguido efecto que genera la sensación de estar caminando a través de un diorama. Ahora bien, para disfrutarlo a tope, recomendamos desactivar la intensidad de efectos de pantalla en los ajustes, pues de lo contrario la imagen se difumina demasiado e impide apreciar los geniales escenarios.

¿Y qué podemos decir de la banda sonora? Pues que es apoteósica. La del primer Octopath se convirtió en una de nuestras bandas sonoras favoritas de JRPG, y en esta segunda entrega Yasunori Nishiki se ha superado a sí mismo.

Además de las pegadizas melodías de los combates y los hermosos temas de exploración (entre los que encontramos algún remix del primer juego), en Octopath Traveler II se escuchan algunas piezas muy sorprendentes, como el tema principal de Partitio en el que se combinan la guitarra eléctrica y el saxofón. Todo un deleite.

Precio y plataformas disponibles

Otra de las grandes novedades de Octopath Traveler II es que se lanza para PS4, PS5, Nintendo Switch y PC. 

Esto deja en un lugar un poco incómodo a los usuarios de PlayStation, pues el primer Octopath sólo está disponible para Nintendo Switch y PC, pero dado que las historias son independientes, no lo necesitan para disfrutar de esta secuela.

En cuanto a las ediciones, Octopath Traveller II se distribuye tanto en formato físico como en formato digital (excepto en PC, donde sólo está disponible en digital). Independientemente de la plataforma o el formato, su precio es de 59,99 €.

A través de la tienda oficial de Square Enix se vende también la edición coleccionista de Octopath Traveler II que, además del juego, incluye un libro de arte, una mini banda sonora y una colección de bustos de los ocho personajes a un precio de 189,99 €.

La senda hacia el JRPG definitivo

Octopath Traveler II consigue exactamente lo que se propone: ofrecer una experiencia JRPG clásica, muy similar a la de su antecesor, limando las asperezas para dar como resultado un título mucho más redondo y satisfactorio.

Sigue habiendo algunos aspectos que le impiden alcanzar el estatus de clásico y, si no os gustó el primero, este difícilmente os va a convencer. Pero si sois amantes de los juegos de rol japoneses, y en especial de los títulos lanzados durante la época dorada del género, vuestra senda conduce hacia Octopath Traveler II.