Algunos vecinos de Springfield están hechos para generar apatía, otros, son odiosos y otros, bueno, cuesta odiarlos, pero no son el mejor ejemplo cívico.
Si llegásemos a Springfield en un viaje donde nuestra realidad y la de Los Simpson se cruzasen por algún motivo, llegaríamos a una ciudad llena de personajes y situaciones tan fascinantes como fáciles de generar un odio visceral en nuestras personas.
A lo largo de sus casi 35 años de historia, la serie creada por Matt Groening ha alumbrado a un plantel de personajes casi inabarcable que, naturalmente, no siempre son del agrado de todos.
Algunos están escritos deliberadamente para escocer a algunas personas. Otros, por su empleo en la serie, terminan causando hastío y, en otros casos, hay personajes que encerraríamos y tiraríamos la llave, aunque nos encante verlos en pantalla.
Basándonos en distintos debates en la comunidad, hoy, en Hobby Consolas, te traemos un repaso a 10 de los personajes de Los Simpson más odiados.
Cletus Spuckler
Muchos personajes de Los Simpson han evolucionado a lo largo de los años: Cletus fue uno de ellos. Aunque la serie no hace envejecer a sus personajes, sí que ha ido puliendo o diversificando el uso de algunos de ellos.
En el caso de Cletus, el entrañable paleto comenzó su periplo por Springfield siendo eso, entrañable. Sí, su nivel cultural era bajo y estaba claro que era una sátira de una parte de la población, pero no era tan descarado.
El tiempo convirtió a Cletus en el arquetipo de la cultura redneck más exacerbada, con chistes sureños carentes de humor real.
También parece haber un énfasis desmedido por mostrar la cara incestuosa de Cletus con Brandine casi siempre que aparece, algo que no gusta cuando ha sucedido 40 veces.
Herman Hermann
Mientras que algunos personajes de Los Simpson evolucionan, otros se quedan atascados y no parece que los propios guionistas sepan qué hacer con ellos.
Un buen ejemplo es Herman Hermann, aquel veterano que perdió el brazo y que la serie comenzó a utilizar como el dependiente de la armería de Springfield. Posteriormente, el rol de Herman ha sido tan difuso que parte del público ha empezado a cansarse de sus apariciones, aunque cada vez son más escasas.
Patty y Selma Bouvier
Las hermanas de Marge Simpson están escritas deliberadamente para ser personajes detestables por muchos aspectos.
En la ficción, son dos ególatras que solo aparecen para mostrar desprecio por su hermana, no ayudar y meterse con Homer Simpson.
Fuera de lo estrictamente ficticio, sus tramas secundarias han generado episodios que parecen calcos y que, con frecuencia, implican el matrimonio donde el amor tiene menos valor que un euro de madera.
Por suerte, el episodio donde Selma se casó con el actor secundario Bob nos dejó algunos de los mejores momentos de la serie. Algo es algo.
Nelson Muntz
Otro personaje escrito deliberadamente para causar desprecio es Nelson Muntz, el abusón del colegio de primaria de Springfield.
Narrativamente, muchas de las apariciones de Nelson se limitan a soltar su ya icónica risa, aunque han tratado de darle algo de profundidad con el tema del abandono de su padre y similares.
Es una pena que en 35 años, apenas haya dos o tres episodios que desarrollen debidamente a Nelson sin limitarse a convertirlo en el niño del "Ha, ha".
Lisa Simpson
Ser la resabida que siempre tiene que tener la razón es, en gran medida, la razón de ser del personaje de Lisa Simpson.
No es difícil ver por qué Lisa puede ser un personaje odiado cuando siempre tiene que dar la lección moralista y, habitualmente, intransigente con otros puntos de vista.
No deja de ser una pieza fundamental en la serie de Matt Groening, pero Los Simpson ha convertido a Lisa en la voz de los sermones.
De vez en cuando, está bien, pero la tendencia de la serie hace que tenga rachas en las que desearías que el personaje se tomase unas vacaciones.
Helen Lovejoy
La esposa del reverendo tiene muy definido su rol en Springfield desde bien temprano en Los Simpson: es la cotilla del pueblo.
Es un estereotipo de personaje muy frecuente en todo tipo de comedias de situación y, por lo general, es difícil no cultivar una animadversión exagerada hacia ellos. Helen Lovejoy es la que nunca piensa en los niños.
Rod y Todd Flanders
Los querubines de los Flanders parecían tener capacidad para convertirse en personajes secundarios solventes, con suficiente desarrollo e historia como para usarlos más allá de los clichés.
Los escritores de Los Simpson incluso convirtieron en rivales a Todd y Bart Simpson en aquel campeonato de minigolf.
Luego, la serie decidió que los retoños de los vecinos tenían más valor como dos irritantes hijos adoctrinados por el fervor religioso de sus padres.
Sus apariciones son, casi siempre, para acentuar más una personalidad que parece atascada en la que tenían en 1995.
Actor secundario Mel
Uno de los personajes más infrautilizados en décadas. Teniendo la antítesis que tiene con el actor secundario Bob, Melvin Van Horne es, básicamente, un cono.
Sí, tiene algunas frases, pero es más un personaje para rellenar fondo que para aportar algo. Esto, por sí solo, no lo convierte en odioso. Lo que sí lo vuelve detestable es que ha dejado destellos de que podría tener mucho que ofrecer.
Charles Montgomery Burns
No hay que ser una lumbrera para saber que el señor Burns es un personaje que la serie busca que detestemos desde que lo conocemos.
Tiránico, egoísta, irresponsable… El señor Burns es de lo mejor y lo peor de Los Simpson. Es un villano increíble, pero representa un arquetipo muy real en la vida real que nos hace desear que no existiera.
Homer Simpson
No nos hemos vuelto locos. Bueno, quizá un poco, pero va con el trabajo. Sí, Homer Simpson es un personaje que, a pesar de que adoramos como al que más, es odioso.
El cabeza de la familia Simpson es alguien a quien no dejarías al cuidado ni de una piedra en medio del desierto. Además de su afición por la bebida, es un padre agresivo y, frecuentemente, déspota.
Nos encanta, ojo, Homer es la viva esencia de Los Simpson desde su propia concepción, pero es un ejemplo de todo lo que podría salir mal en una familia con un padre conflictivo.
Seguro que se te ocurren otros cuantos personajes de Los Simpson más que aptos para ser odiados, así que no dudes en compartir tus apuestas con nosotros en la sección de comentarios.
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