Cómo Todo a la vez en todas partes dinamita lo que pensabas que sabías sobre los géneros cinematográficos

Meter tantas cosas en la coctelera y que te salga algo delicioso ha debido ser una tarea titánica por parte de los Daniels (Dan Kwan y Daniel Scheinert), guionistas y directores de Todo a la vez en todas partes.

Hay que tener una visión de conjunto muy clara para que fundan bien humor, drama, sátira, acción, musical, animación y aventuras.

Os lo hemos contado en nuestra crítica sin spoilers de Todo a la vez en todas partes, un pepino de película que llega este viernes a nuestras carteleras y le disputará los primeros puestos de la taquilla a Top Gun: Maverick, Doctor Strange en el multiverso de la locura y Jujutsu Kaisen 0, situadas en el podio en este momento.

Con permiso de Chip y Chop: los guardianes rescatadores, estamos ante uno de los estrenos más excéntricos y rabiosamente divertidos por su manera de mezclar influencias, personajes y, por supuesto, técnicas de filmación. Está claro que cada vez se redobla más la apuesta en esta materia con la idea de sorprender a los espectadores.

Hemos tenido otros ejemplos notables en películas como Los Mitchell contra las máquinas y en series como The Afterparty: la creatividad se abre paso ahora que los estudios de animación y los multitudinarios departamentos de efectos especiales permiten hacer prácticamente cualquier cosa.

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Es probable que lo que busque el espectador medio que acuda a la sala de cine a ver Todo a la vez en todas partes sea una comedia y desde luego tendrá ocasión de reír, pero también de emocionarse, sorprenderse y maravillarse ante el recital de unos intérpretes entregados a la enorme dificultad de poner en pie una película tan compleja y llena de recovecos.

Los géneros cinematográficos son una invención de los críticos para tratar de aferrarse a códigos con los que describir lo que ven y de los creadores para tener una pauta que oriente a los espectadores. Vamos, que la idea es orientar las expectativas del respetable.

Nunca han sido algo puro y estanco que haya necesitado respetarse con pulcritud, pero hoy día subvertir lo que el espectador espera es una práctica tan común como deseable. Con todo el bagaje audiovisual que tenemos gracias a la polarización de las plataformas digitales y la avalancha de estrenos en salas, ¿quién no desea encontrarse una sorpresa?

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Todo a la vez en todas partes - Galería de imágenes (8 imágenes)

En el caso de Todo a la vez en todas partes no solo tenemos una completa mezcolanza de géneros sino que además cada uno de ellos es dinamitado desde dentro. ¿Como en cualquier película de acción al uso esperas un clímax final de enfrentamiento? Pues prepárate para algo bien distinto.

¿Te parece incompatible un planteamiento filosófico en una comedia que juega con el humor absurdo y el escatológico? Te vas a sorprender riendo a carcajadas pero también teniendo un nudo en la garganta... planteándote quizás no solo quién eres sino cómo te relacionas con los demás.

A todo lo anterior hay que sumar la ecléctica banda sonora cuya lista de canciones puedes ver en Spotify: los temas remezclados están a la altura musical de lo que se puede esperar de una película en la que la clave es juntarlo todo.

Su espíritu conciliador irradia buen rollo y deja con una sonrisa así que... ¡larga vida a la bendita locura de los Daniels!