No todos los días llega a los cines una película como Star Wars episodio IX: El ascenso de Skywalker, en la que se pone fin a una historia que nació hace 42 años en la cabeza de un visionario George Lucas. Y no todas las franquicias tienen legiones de fans capaces de polarizarse de maneras extremas ante lo que se puede ver en la gran pantalla tan fácilmente como lo hace el fandom de Star Wars.
Hoy nos va a tocar hacer un poco de retrospectiva, no solo de la película de J.J. Abrams, sino de toda la Trilogía de las Secuelas de Star Wars. Eso si, antes de que sigáis leyendo, entraremos en numerosos spoilers de la película, por lo que os recomiendo encarecidamente que la hayáis visto antes de leer este blog de opinión.
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Para poder comprender con más perspectiva la opinión que voy a expresar sobre Star Wars episodio IX: El ascenso de Skywalker, es necesario que analicemos en líneas generales toda la Trilogía de las Secuelas. Y es que, si bien como dice J.J. Abrams, "Star Wars es para niños", también hay que tener presente que "Star Wars es para varias generaciones de fans".
¿Era necesaria una Trilogía de las Secuelas?
Una de las cosas que debemos analizar en retrospectiva es que la Trilogía de las Secuelas, a nivel narrativo, solamente ha añadido juguetes. Si bien por un lado podemos entender la intención de Disney y Lucasfilm de utilizar la trilogía para enganchar a una nueva generación de fans, muchos de los ya existentes han quedado olvidados durante gran parte de la narrativa que se desarrolla en la trilogía. Una película o una producción del tipo que sea de Star Wars necesita una dosis importante de fan service para mantener contenta a la vieja guardia del fandom.
Analicemos en qué ha cambiado la narración de estas tres películas y su conclusión si la comparamos con el final de Star Wars episodio VI: El retorno del Jedi... Palpatine es derrotado y su Orden Final cae... fin. Podéis sustituir la Estrella de la Muerte II por la flota de destructores estelares capaces de diezmar un planeta y el resultado es el mismo. La historia galáctica ha vivido un bucle y ha regresado al mismo punto que Luke, Han y Leia dejaron tras la Batalla de Endor... pero sin Luke, Han y Leia...
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Evidentemente, ya es tarde y poco hay que hacer al respecto, pero hace años que Lucasfilm debería haber abierto el melón por otra parte. Lo mejor que tiene Star Wars es que ofrece casi infinitas posibilidades si se sabe aprovechar, y es algo que no se ha hecho correctamente. Se puede enganchar a nuevas generaciones al tiempo que se cautiva a las más veteranas, pero en esta trilogía ha habido momentos en los que parecía que no estábamos viendo Star Wars.
Una herencia difícil de afrontar
Ahora, teniendo en mente que esta Trilogía de las Secuelas como tal es narrativamente fútil, veamos lo que ha heredado J.J. Abrams para poder desarrollar Star Wars episodio IX: El ascenso de Skywalker. El resumen sería que Rian Johnson le dejó una patata caliente del tamaño de un rancor. El director se pasó todo Star Wars episodio VIII: Los últimos Jedi lanzando el mensaje de "dejar morir el pasado", algo que provocó que miles de fans de Star Wars salieran del cine con un cabreo considerable.
La ruptura de la continuidad argumental entre las tres películas hace que el episodio VIII no deje un cliffhanger interesante. De hecho, el cliffhanger es precisamente con lo que arranca El ascenso de Skywalker. Toda la secuencia inicial con Kylo Ren encontrándose al Emperador Palpatine debería haber sido el gancho con el que hubiera terminado Los últimos Jedi, pero Johnson estaba ocupado destartalando la narrativa.
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J.J. Abrams intenta rescatar todas las referencias factibles a las películas originales de Star Wars. Incluso el ritmo de Star Wars episodio IX: El ascenso de Skywalker nos recuerda al de las películas de la Trilogía Original. El fan service se convierte en una fórmula para aplacar a aquellos más escépticos que no tienen ninguna fe en las películas, aunque ha quedado lejos de surtir el efecto deseado en muchos casos. Y es que el fan service de esta película debería haberse extendido por toda la Trilogía de las Secuelas, no solo en esta película.
¿Entonces es mala película?
En realidad, si analizásemos Star Wars episodio IX: El ascenso de Skywalker como una película independiente, sin pertenecer a una saga, estaría bien. Es una película con un villano cargado de carisma, una cinta trepidante que mantiene un buen balance entre acción e historia; una película con dos protagonistas que hacen todo lo posible por estar a la altura de las expectativas, pero que se ven y verán siempre eclipsados por la sombra de los personajes a los que han venido a sustituir en esta trilogía de Star Wars. Y es que otro de los problemas es que se ha buscado un tipo de historia para Rey y Kylo Ren que se asemeja demasiado a la de Luke Skywalker y Darth Vader.
Creo que J.J. Abrams ha hecho hasta donde ha podido ante un panorama bastante perturbador. Ha arreglado cosas que Rian Johnson había descuajeringado, pero los agujeros de guión, inevitables y masivos en muchos casos, están ahí. Dentro de lo malo, es un buen final de trilogía, si tenemos en cuenta todos esos factores, pero eso no hace que la ya conocida y terminada como Trilogía de las Secuelas sea una buena trilogía.
En cuanto al punto final que supone para la Saga Skywalker: la verdad es que, como hemos dicho, no es una película que aporte nada nuevo a la Saga Skywalker, ya que esta saga no necesitaba de una Trilogía de las Secuelas con esta línea narrativa. La Trilogía de las Precuelas aportó una visión diferente de la galaxia antes de que el Imperio se alzase, pero esta trilogía no aporta nada novedoso. De hecho, está aportando más perspectiva The Mandalorian, siendo una serie, que lo que se ha visto en esta Trilogía de las Secuelas a la que están teniendo que dar sentido los cómics y las novelas.
Si le tuviera que dar una valoración personal en base a las notas que ponemos en las críticas de Hobbyconsolas, mi nota personal para el Episodio IX sería un 75, es una película que te entretiene y que mejora ligeramente con el segundo visionado, pero la trilogía debió abordar otra época temporal para haber funcionado sin tener que hacer uso de personajes clásicos que han quedado en muchos casos denigrados en favor de las nuevas generaciones.
Esto, como siempre, es una opinión personal, ni busco ni necesito cambiar la de los demás. Solamente espero que, de cara al futuro, Lucasfilm sea capaz de entender que Star Wars es más grande que el Imperio, los Jedi, los Sith y la Fuerza, y que abordar una historia con una perspectiva diferente es lo que está demostrando funcionar en una "simple" serie como es The Mandalorian.
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