Stellar Blade viene dispuesto a convertirse en el nuevo Nier Automata: impresiones tras jugar y completar la demo

A tan sólo un mes para su lanzamiento, Stellar Blade quiere convencernos de que pasemos por caja. Y qué mejor forma de hacerlo que demostrando sus virtudes mediante una demo que estará disponible -de manera completamente gratuita- para todos los usuarios de PS5 a partir del próximo viernes 29 de marzo. 

Por si habéis pasado los últimos meses en hibernación, Stellar Blade es un juego de acción para PS5 desarrollado por el estudio coreano Shift Up y que hasta hace no mucho era conocido como Projet EVE. PlayStation parece tener mucha confianza tanto en el juego como en el estudio, pues desde noviembre del año pasado son el primer second party coreano de Sony.

Stellar Blade también ha hecho bastante ruido a raíz de las polémicas que han surgido en torno al diseño de su protagonista, que cuenta con unos atributos físicos bastante exagerados. Algo que su director justifica señalando que "la parte trasera es lo que se ve todo el tiempo".

Polémicas aparte, la verdad es que teníamos muchas ganas de comprobar el resultado. ¿Es Stellar Blade un juego de acción competente o sólo busca entrar por los ojos con sus provocativos diseños? En Hobby ya hemos tenido la oportunidad de jugar a la demo y en estas impresiones os contamos qué nos ha parecido.

Impresiones de Stellar Blade para PS5

La demo de Stellar Blade nos permite jugar el inicio de la historia. Y ya desde la primera secuencia de vídeo nos quedó claro que la principal influencia del juego de Shit Up es NieR Automata, el hack'n slash desarrollado por Platinum Games y dirigido por el excéntrico Yoko Taro. 

La premisa, de hecho, es muy parecida: la Tierra ha sido devastada por unas grotescas criaturas conocidas como Naytibos, obligando a la raza humana a exiliarse en una colonia espacial. EVE, la protagonista, forma parte de un escuadrón de mujeres soldado que tienen como objetivo acabar con los Naytibos y salvar a la humanidad. Además, suele ir acompañada por un dron flotante que hace las veces de arma de fuego.

Y no sólo eso: la banda sonora también es clavada a la de Nier, y decimos esto como el mayor de los cumplidos dado que son dos de las mejores bandas sonoras que se han compuesto jamás. Y no es ninguna casualidad: MONACA, el estudio dirigido por Keiichi Okabe, compositor de ambos Nier, se ha encargado de la banda sonora de Stellar Blade.

Antes de pasar a detallar la jugabilidad, que seguramente es lo que más estáis esperando, queremos hablar de dos elementos que nos sorprendieron al empezar a jugar: el primero es que Stellar Blade tiene un gran sentido del espectáculo. 

Ya sean naves espaciales explotando, edificios derrumbándose o coreografías de combate con movimientos finales a cámara lenta, el juego de Shift Up ha conseguido arrancarnos unos cuantos "wow". Y el segundo es que Stellar Blade está doblado al castellano, algo que no esperábamos pero que se agradece muchísimo (y que de nuevo demuestra la confianza de Sony en el proyecto).

En materia jugable, y pese a que es descrito como un hack'n slash, lo cierto es que Stellar Blade es una combinación de hack'n slash y soulslike. Y sí, ya sabemos que muchos odiáis que usemos este término, pero al final es la forma más fácil de entendernos.

En combate, podemos mezclar los botones de ataque rápido y ataque fuerte para obtener diferentes combos y tenemos acceso a una serie de ataques especiales, conocidos como habilidades beta, que causan un gran daño pero consumen energía. Y todos los movimientos son muy espectaculares, como cabría esperar de un hack'n slash. De hecho, también hay algún que otro QTE.

Pero a la hora de la verdad, el combate de Stellar Blade tiene mucho de soulslike. No es un juego en el que podamos abrirnos paso machacando botones. Fijar a los objetivos es esencial, porque cuando hay más de dos enemigos las cosas se pueden complicar bastante. Pero aquí, por suerte, no hay que ir en busca del cadáver ni se pierde nada al morir.

El parry tiene una importancia enorme y hay que dominarlo rápidamente si queremos sobrevivir. Al hacer parrys con éxito no sólo se recarga la energía de las habilidades beta, también se reduce la barra de equilibrio de los enemigos. Y, cuando llega a cero, quedan expuestos a una potente ejecución. 

Incluso hay una mecánica de "esquiva por colores" que nos ha recordado al mikiri de Sekiro: si vemos un brillo azul debemos esquivar hacia delante (parpadeo) y si vemos un brillo morado debemos esquivar hacia atrás (rechazo). Por su parte, los objetos curativos se reponen al usar los campamentos... Al igual que los enemigos, que reaparecen cada vez que descansamos.

Los escenarios, sin ser de gran tamaño, tienen cierto grado de verticalidad y conectan unas calles con otras mediante atajos. La verdad es que pese a que la demo no es muy amplia en lo que a extensión del mapa se refiere, hemos pasado un rato considerable registrando a conciencia todos los recovecos en busca de cofres, objetos coleccionables y otros secretos.

Fuera del combate, tenemos varios árboles de habilidades centrados en diferentes aspectos para obtener nuevas ventajas o mejorar las que ya poseemos. Contamos también con ranuras para equipar elementos como las exoespinas, que ofrecen distintos enfoques jugables, o el equipo, que altera diferentes parámetros como la velocidad de ataque o el daño sufrido.

Stellar Blade da una especial importancia a la apariencia física de EVE, permitiéndonos elegir entre una serie de modelitos (algunos de ellos innecesariamente provocativos), pendientes o accesorios para la cara como gafas. Desde el menú de opciones también es posible determinar la longitud de su coleta, que por defecto le llega hasta las rodillas.

Al concluir la demo, se desbloquea un desafío de jefe en el que EVE dispone de un mayor número de habilidades y opciones ofensivas, como el dron para realizar ataques a distancia. Han sido muy inteligentes al hacer esto, pues cualquier duda que tuviésemos con el combate se disipa en el momento en que aumentan las herramientas a nuestra disposición.

Y la verdad es que se trata de un desafío bastante intenso (y complicado; ya nos contaréis cuántos intentos os lleva derrotarlo) con el que el combate de Stellar Blade ha terminado de convencernos del todo. Es pronto para emitir veredictos, pero creemos que tiene potencial.

Lógicamente la demo cubre una parte muy pequeña del juego completo, así que todavía hay muchas cosas que desconocemos y aspectos de los que necesitamos saber más antes de opinar, como puede ser el caso de la historia y los personajes. Habrá que esperar al juego final para salir de dudas. 

Lo que sí podemos decir es que Stellar Blade tiene cierto espíritu de juego de PS3. Y no lo decimos como algo necesariamente despectivo: contiene todos los ingredientes que eran propios de aquella época, cuando los juegos nos conquistaban con cosas más sencillas como explosiones, movimientos a cámara lenta, mucha sangre y música de videoclip.

Como reflexión final, podemos decir que Stellar Blade nos ha dejado con ganas de seguir jugando. Lo suficiente como para haber terminado la demo dos veces y haber reintentando el desafío de jefe otras tantas. Ahí queda eso.