Arnold Schwarzenegger ha contado su superpoder para tener éxito en la vida

Arnold Schwarzenegger tiene una de las historias de éxito más espectaculares de las últimas décadas. No solo llegó a lo más alto en el deporte, también consiguió ser una estrella de cine, la mejor pagada durante algunos años y, más difícil todavía, llegó a ser Gobernador del Estado de California, con una población de más de 40 millones de personas.

Arnold Schwarzenegger nació en Thal, un pueblecito de Austria hace 75 años dentro de una familia humilde. Desde luego, en su caso, nada tuvo que ver la suerte y mucho más el esfuerzo y la determinación.

Y, como comenta en el documental que actualmente se está proyectando con gran éxito en Netflix, Arnold, su verdadero superpoder, el que realmente le ha llevado a conseguir todo lo que se ha propuesto es el que cuenta en un momento de la serie:

“Yo sabía que tenía un poder muy especial, algo que otras personas no tienen y es que soy capaz de visualizar muy claramente mis objetivos y, una vez que los visualizo, los persigo sin descanso hasta conseguirlos. Cuando visualizas algo con claridad, de verdad crees que lo vas a lograr”.

Gracias a este poder de visualización Arnold consiguió ser Mister Olimpia en los años 70, que es la competición de culturismo más prestigiosa que hay a nivel mundial, empezando desde cero y sin apenas recursos. 

Algo que, según el protagonista confiesa en la serie, había visualizado que ocurriría  muchísimos años antes, cuando apenas comenzaba a trabajar su cuerpo y ya estaba obsesionado con el bodybuilding. Después consiguió ese mismo título seis veces más.

Años más tarde, a pesar de tener unos comienzos decepcionantes en el mundo del cine, que casi le llevan a la depresión, y sin ninguna formación como actor, consiguió tomar las decisiones adecuadas y aprovechar su impresionante físico.

Protagonizó películas como Conan el bárbaro y Terminator, que acabaron llevándole a lo más alto de la meca de Hollywood en los 80 y los 90, con un caché de entre 20 y 30 millones de dólares por película. Incluso, y esto es algo que mucha gente no sabe, tiene un Globo de Oro a la nueva estrella del año por la película Stay Hungry de 1976, en la que interpretaba… a un culturista.

Pero lejos de conformarse con todo eso, decidió continuar con algo aún más difícil como la política, y aprovechó la oportunidad que se le presentó para llegar a ser Gobernador de California, cargo que ejerció además durante dos mandatos de 2003 a 2011.

Esa ambición y ese carácter competitivo que le han llevado a lo más alto en todos los ámbitos en los que se lo ha propuesto, los explica de una manera muy gráfica a través de uno de sus referentes, el escalador Edmund Hillary, el primer hombre que alcanzó la cima del Everest:

“Cuando Hillary llegó a la cima del Everest, le preguntaron qué es lo primero que sintió y él contestó que lo único que veía era la siguiente cima que quería escalar. Eso es exactamente lo que me ha pasado a mí siempre, que cuando he conseguido algo que casi nadie pensaba que podría conseguir, lo único que quería es alcanzar el siguiente reto”.

En el documental explica, además, que nunca habría logrado esos extraordinarios éxitos sin la ayuda de personas clave en su vida, como el promotor y creador de Mr. Olimpia Joe Weider o el director de cine James Cameron.

Y también confiesa que, aunque sus éxitos profesionales han sido deslumbrantes, también ha tenido que asumir grandes fracasos, sobre todo en su vida personal.

De lo que no hay duda es de que ese superpoder de "visualización" ha sido absolutamente eficaz en el caso de aquel humilde niño austríaco que ya es, con todo merecimiento, un icono de varias generaciones.