John Wick 4 pudo tener problemas con una decisión de la tercera película, pero la convirtió en un símbolo
Chad Stahelski encuentra divertido el revuelo que un dedo montó entre los ejecutivos de Lionsgate cuando se confirmó John Wick 4.
Ah, las sagas… fruto de alegrías y dolores de cabeza por igual. Cuando varias películas —o novelas, juegos, etc.— dan forma a una saga, surge siempre el mismo problema: hay que rendir pleitesía a las decisiones del pasado. La franquicia de John Wick no es ajena a este tipo de tribulaciones, ya que cada película necesita mirar a las anteriores para no incurrir en errores de continuidad.
John Wick 4 se topó de lleno con un problema gordo para el departamento de efectos visuales, y dicho problema viene de una decisión tomada por Chad Stahelski y Keanu Reeves cuando creían que John Wick 3: Parabellum iba a ser la última película de la saga.
Nos referimos al momento en que el Anciano, aquel que está sobre la mesa, da la opción a John Wick de amputarse el dedo anular para demostrar su lealtad o afrontar la muerte. El personaje de Keanu Reeves se corta el dedo y ofrece su anillo de bodas como tributo.
Tras el rotundo éxito de la película, el actor volvería a ponerse el traje blindado en John Wick 4, pero ese dedo no podía volver a crecerle.
Chad Stahelski no se arrepiente de cortarle un dedo a John Wick
En una entrevista reciente con Collier, Chad Stahelski, director de las películas de la saga, ha compartido la preocupación inicial que hubo en Lionsgate por la decisión de que John Wick se amputase el anular. De paso, el cineasta ha destacado el simbolismo del acto en sí y sus consecuencias, tanto a efectos prácticos como narrativos.
"¿Crees que el estudio pensó que era buena idea? En la tercera, lo cortamos porque creíamos que sería la último. Tengo un amigo en Lionsgate y, tan pronto se confirmó la cuarta entrega, dijo: "Ese dedo nos va a joder".
Pero no, hombre, a Keanu y a mí nos gustan los estigmas y el simbolismo: no se trataba de entregar el anillo, sino de quitar el dedo en el que estaba para que nunca más pudiéramos volver a ponernos un anillo de bodas.
Es un pequeño mecanismo poderoso para lo que tratamos de contar. Entonces no, no me arrepiento del todo. En todo caso, lo encuentro divertido. Eso volvió loco a mi supervisor de efectos visuales: imagínate que en cada toma con Keanu en la película se quitaba ese dedo. Ya sabes, un poco de dolor, que al final mereció la pena".
De hecho, la decisión ha contribuido a aportar riqueza al imaginario de la Alta Mesa: el Heraldo, el personaje interpretado por Clancy Brown en la cuarta película, presenta una lesión idéntica a la de John Wick.
John Wick 5, si es que se decide hacer la película, ya que hay declaraciones contradictorias, también deberá lidiar con decisiones de sus predecesoras, y esta vez no será un dedo desaparecido.
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