Star Wars tiene muertes épicas, otras solemnes, algunas frustrantes… y luego está lo de Padmé Amidala, que no hay por dónde cogerla.
George Lucas tenía un claro objetivo en la trilogía de las precuelas de Star Wars: contar cómo un niño con el corazón de oro como Anakin Skywalker podía terminar convirtiéndose en la misma encarnación del lado oscuro:, Darth Vader.
Convertir al niño en el más ferviente seguidor del Emperador Palpatine no iba a ser fácil, como tampoco lo sería convertirlo en la máquina despiadada que dejó a todos sin respiración en la trilogía original.
Un elemento narrativo clásico capaz de hacer caer a todo ser de luz en lo más hondo del pozo es el amor, especialmente cuando hay matices como el secretismo de una relación para no contravenir las doctrinas jedi.
Es ahí donde entró en juego Padmé Amidala, el personaje encarnado por Natalie Portman por el que Anakin bebería los vientos y, quien daría al linaje de los Skywalker continuidad a través de Luke y Leia.
Padmé Amidala también es el personaje que muere porque patata. George Lucas quiso darle simbolismo a su muerte, y resultó en un absurdo narrativo que aún colea en nuestros días.
Por recapitular, retrocedemos a Star Wars: Episodio III - La venganza de los sith para rememorar la muerte de Padmé Amidala y los eventos que la precedieron.
¿Cómo murió Padmé Amidala en Star Wars?
Anakin es enviado a Mustafar para encargarse de los dirigentes restantes de la Confederación de Sistemas Independientes. Solo le dijo a Padmé adónde se dirigía por lo que Obi-Wan Kenobi aprovecha para pedir ayuda a la senadora.
Pero Amidala se niega a ayudar al jedi a matar a su amado, aunque acto seguido parte hacia el planeta volcánico… con un pasajero de más en la nave.
Cuando Obi-Wan Kenobi se revela ante Anakin, ya convertido en Darth Vader, aunque no en apariencia, el jedi caído estrangula mediante la Fuerza a Padmé hasta que ella pierde el conocimiento y se desmaya.
Anakin y Obi-Wan se baten en duelo, redecorando el paisaje de Mustafar hasta que el maestro le enseña al alumno una última lección: no subestimes la ventaja que ofrece la altura.
Obi-Wan se llevó a Padmé a la base secreta de los asteroides Polis Massa, donde ella daría luz a sus dos hijos y, acto seguido muere, pero no por el parto, ni por el shock del estrangulamiento, ni por tener alguna complicación física… simplemente, muere.
Cuando la ficción excede sus límites y estropea una narrativa
No se me escapa que Star Wars es una saga de ciencia ficción y fantasía, por lo que la verosimilitud de muchas situaciones se puede retorcer a la carta de lo que necesite el narrador, en este caso, George Lucas.
Pero la muerte de Padmé Amidala porque "sencillamente, la estamos perdiendo", como dijo el droide médico GH-7, porque "no tiene ganas de vivir".
"Se muere porque se le ha roto el corazón al ver a Anakin caer al lado oscuro", puedes pensar, y ciertamente es el enfoque que Lucas tenía en mente, pero no funciona, simple y llanamente.
Al final de Star Wars: Episodio III - La venganza de los Sith, Padmé Amidala está "clínicamente sana", por lo que su muerte no encaja con la explicación más lógica. Si Lucas quería darle impacto, que Anakin la hubiese matado, y mira que me mola el momento "mentirijilla" de Palpatine, más por la sonrisa de sádico que se le dibuja que por la reacción de Darth Vader.
Una muerte que juega en contra de los valores del personaje
Un aspecto curioso es que Padmé Amidala pasa de combativa, y rebelde en Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones, a decoración de ambiente en La venganza de los sith.
El personaje pierde toda su fuerza, y la excusa de que es por el embarazo es bastante pobre. No sugiero que se la hubiese puesto a pegar tiros, pero sí que mantuviese la línea de convicciones de las dos entregas anteriores, más allá de un "así es como muere la democracia, me voy a casa a llorar".
Padmé aparece rendida mucho antes de su muerte, y es casi tan trágico como la mala explicación de su fallecimiento. Pero vamos de vuelta a Polis Massa, donde da a luz a dos mellizos, les pone nombre y adiós, me muero, que papá se ha vuelto malo.
Lucasfilm
Durante dos películas, George Lucas construyó un personaje fuerte y empoderado; una líder a la que su pueblo no quería renunciar. Después de dar a luz, y sin una causa clínica que excuse su muerte, deja a ambos niños "solos" en una galaxia que se hunde en la oscuridad.
Luke y Leia son la "nueva esperanza" de la película original de Star Wars, especialmente Luke, puesto que la naturaleza de Leia no se revela hasta El retorno del jedi.
Esos dos infantes eran motivo más que suficiente para querer seguir viviendo, aunque Anakin se hubiese mudado a un castillo con vistas en Mustafar y adoptado un estilo de cybermacarra imperial.
George Lucas no lo vio así y decidió que el dolor de Padmé era más poderoso que la esperanza que representaban sus dos hijos, suficiente para matarla. Nunca estaré de acuerdo con esa decisión que pudo resolverse con alguna complicación física, sin más complicaciones.
Es más… si eliminas la explicación del droide médico y Padmé muere, dejando la interpretación a expensas del espectador, queda incluso mejor.
Por supuesto, esta es mi opinión personal e intransferible, y no me impide disfrutar de la película en cuestión, o del resto de la saga, pero siempre que llega ese momento me llevan los infiernos. ¿Qué te parece a ti la muerte de Padmé Amidala en Star Wars?
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