Análisis del Razer Huntsman V2 Analog, el teclado con los switches más avanzados del mercado

De un tiempo a esta parte, Razer parece haber puesto la quinta marcha, con una batería de productos y lanzamientos contínuos. Sólo en las últimas semanas hemos analizado los auriculares Kaira Pro y BlackShack V2, el teclado Huntsman Mini... y parece que este año va a seguir la misma línea con un bombardeo continuo.

Y uno de sus primeros lanzamientos de 2021 no es ni más ni menos que el nuevo miembro de la familia de teclados mecánicos Huntsman, uno de los modelos más vendidos y exitosos del fabricante. Tras abrir fuego con el modelo original, lo mejoraron en Razer Huntsman Elite y, después, con el Huntsman Tournament Edition, con un tamaño más compacto y sin teclado númerico. 

La novedad aquí no está en el factor forma de Razer Huntsman V2 Analog, sino en la tecnología que se esconde tras los switches o interruptores, y que abrazan un nuevo y atractivo concepto que poco o nada tiene que ver con los sistemas y mecanismos que montan actualmente los switches disponibles en el mercado.

Lo que sí debéis saber, para ir abriendo boca, es que Razer Huntsman V2 Analog nace con la vocación de ser el teclado definitivo para todo, ya sea jugar, escribir o usar el ordenador como centro de entretenimiento multimedia gracias a sus controles dedicados. Pero no nos precipitemos, y vayamos por partes. Primero, un repaso a sus características generales:

• Interruptores óptico analógicos de Razer
• 100 millones de pulsaciones garantizadas
• Iluminación Razer Chroma RGB personalizable
• Iluminación inferior del teclado
• Teclas PBT Razer Doubleshot
• Passthrough USB 3.0
• Reposamuñecas magnético con iluminación RGB
• Dial multiusos con 4 teclas multimedia
• Almacenamiento híbrido en placa (hasta 5 perfiles)
• Teclas totalmente programables con grabación de macros al vuelo
• N-key roll-over con anti-ghosting
• 1000 Hz Ultrapolling
• Modo juego
• Cable de fibra mallado
• Superficie de aluminio mate

Razer Huntsman V2 Analog: de nuevo un teclado completo, teclado numérico incluido y con extras

Las familia de teclados Huntsman ha ido mutando, y hemos visto modelos con el layout completo como el original que dio pie a esta familia, así como evoluciones sin teclado numérico (Tournament Edition) e modelos incluso más compactos y pequeños, como el Huntsman Mini, además de cambios en las tecnologías de switches.

Con Huntsman V2 Analog, Razer ha vuelto al diseño de teclado completo, con teclado numérico incluido, y los ya característicos controles multimedia en la esquina superior derecha, entre los que destaca la rueda o dia para controlar el volumen (u otras funciones, gracias a la configuración total del teclado con el software Synapse de Razer).

Por tanto, estamos hablando de un teclado de dimensiones grandes, que huye de lo visto en anteriores modelos. Es decir, es un teclado pensado para setups y escritorios amplios, despejados y que disponen de espacio suficiente. 

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Como en otros modelos de la gama Huntsman, encontramos una superficie de aluminio sobre un chasis de policarbonato con textura mate. Es un teclado pesado, pero tampoco es un factor ni determinante ni negativo, ya que ayuda a que se asiente y no se mueva una vez colocado (en parte también gracias a los parches antideslizantes de la parte inferior). No es un teclado pensado para estar moviéndolo.

Como en todos los teclados gaming lanzados por el fabricante en los últimos tiempos, las teclas o keycaps son de doble capa de PBT, o de doble inyección, lo que garantiza una mayor vida útil, y que detalles como las serigrafías de cada tecla no se deterioren.

Sin ni siquiera empezar a utilizarlo, una de las primeras novedades de Huntsman V2 Analog está en el propio cableado. El cable mallado es doble, y uno de los extremos cuenta con conector USB-C (se incluye adaptador a USB-A), que es el que da corriente al teclado para que podamos usarlo, así como alimentación Chroma RGB (es decir, el cable es un "todo en uno").

El segundo cable, USB 3.0, es para que podamos usar el puerto USB passthrough que hay en el lateral izquierdo del teclado, para conectar por ejemplo directamente un ratón. Es un cambio acertado, que no obliga a usar dos puertos USB, y que Razer ha implementado escuchando las sugerencias de los usuarios. 

Como el modelo Elite, Huntsman V2 Analog cuenta con un reposamuñecas imantado, que se acopla al chasis con un cómo sistema de imanes, aunque esta nueva versión prescinde del marco y eso erradica uno de los problemas de anteriores modelos: aquí toda la superficie es mullida y francamente cómoda. Es, quizá, uno de los mejores reposamuñecas que henos probado. Y no se queda ahí.

Además, la parte inferior del reposamuñecas cuenta con su propia banda de luz RGB que también ayuda a iluminar el escritorio, prolongando los efectos del chasis principal. Además, gracias al software Synapse podemos configurar distintos efectos para distintas partes de esta banda.

Remata el diseño la inclusión de dos patas plegables para levantar el teclado si lo preferimos con esa disposición para encontrar nuestra posición óptima. Por todo esto, desde el punto de vista físico, se puede decir que Razer Huntsman V2 Analog es un teclado muy bien construido, muy sólido y que transmite unas muy buenas sensaciones... pero a estas alturas, ¿no es lo que se espera siempre de Razer?

Razer Huntsman V2 Analog: la verdadera revolución está en los switches óptico analógicos

La gran novedad de este teclado no está en la parte visual, que es continuista respecto a otros modelos, sino en lo que hay debajo de las keycaps, los switches óptico analógicos de Razer. Se trata de un nuevo interruptor con tecnología propia de Razer y, como el propio nombre adelanta, su objetivo es dar una respuesta analógica. Pero, ¿qué quiere decir esto?

Los switches del Huntsman V2 Analog son completamente nuevos, y combinan la tecnología óptica de anteriores interruptores (un haz de luz y un sensor recogen la actuación o pulsación de la tecla) con una respuesta analógica, que registra la presión gradual. Es decir: su respuesta no es simplemente "pulsado" o "no pulsado", sino que registra la presión que ejercemos sobre la tecla. Aquí debajo podéis ver uno de estos switches seccionados, con la tecnología al descubierto.

Por poner un ejemplo, imagina en un juego como Cyberpunk 2077. Al conducir un coche con un teclado normal, los controles pueden resultar algo bruscos, por lo que acabamos de decir: las teclas sólo reconocen dos posiciones, por lo que si pulsamos A, giramos a la izquierda (al máximo) y cuando dejamos de pulsar, no giramos.

Pues bien, los interruptores analógicos de Razer lo que hacen es que, como un mando analógico, la pulsación tenga recorrido, y registre la presión que ejercemos, de modo que el giro al conducir es progresivo, o el control de la velocidad también sea progresivo (al pulsar el acelerador, no lo pisamos a fondo). Esto se consigue, a nivel interno del switch, por la cantidad de luz que deja pasar el mecanismo, y que registra el sensor. El esquema de aquí abajo lo explica perfectamente.

Es, en cierto modo, Razer Huntsman V2 Analog adapta a las teclas de un teclado las funciones que encontramos en los gatillos y palancas de cualquier mando convencional. Así pues, podemos asignar a cada tecla de manera independiente, o a un grupo de ellas, una configuración distinta, bien porque queramos que se comporten de manera analógica (por ejemplo, WASD para mover a nuestro personaje) y el resto que tenga la respuesta lo más rápida posible. Así, pulsando la tecla suavemente nuestro personaje puede andar, y si la pulsamos al máximo, correr.

De este modo, a través del software Synapse de Razer podemos configurar el punto donde se registra la pulsación, entre 1,5mm para una respuesta rápida o 3,6mm para una pulsación "más profunda". Pero no sólo eso: también podemos regular el comportamiento analógico de cada tecla, pudiendo ajustar la sensibilidad analógica entre esas dos distancias (podemos hacer que sea sólo 1 mm... o los 2,1 que separa esa distancia). 

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Estos dos milímetros dan margen a que ejerzamos más o menos presión, y con ello, la respuesta en el juego sea acorde a esta pulsación. Se nota incluso en el desaplazamiento de nuestro personaje en shooters como Call of Duty Black Ops Cold War, juegos en mundo abierto como Fortnite, donde al pulsar dos botones de dirección se traduce en unos giros más graduales y controlados.

Es, sin duda, la novedad más importante que introduce Razer Huntsman V2 Analog. Al principio puede costar pillarle un poco el punto, y dar con la configuración que más nos gusta a través de Synapse... pero una vez que lo encuentras, es un verdadero lujo poder disfrutar de juegos de velocidad con un control más en sintonía al que ofrecen los mandos.

Razer Huntsman V2 Analog, el teclado perfecto para jugar... y trabajar

Como ya hemos adelantado, el Razer Huntsman V2 Analog es un teclado perfecto para jugar... ya sea a un nivel "de andar por casa", o al más alto nivel competitivo. La posibilidad de ajustar su doble actuación, es ya de por sí una garantía de una respuesta rápida, y que suele adaptarse a las necesidades de cualquier tipo de juego.

Lógicamente, esta doble actuación y comportamiento analógico no afecta a la respuesta, ni física ni auditiva. Sigue siendo un teclado "clicky", pero el nivel de ruido se ha reducido considerablemente frente anteriores modelos de Razer, o al menos esa sensación es la que transmite. Nos pasa un poco lo mismo con la luz, que parece haberse atenuado ligeramente, aunque sigue siendo un teclado bien iluminado y vistoso.

Como decimos, es las sensaciones son altamente gratificantes, aunque requieren un mínimo tiempo de adaptación para disfrutar al máximo de los controles analógicos. El recorrido de una tecla con comportamiento analógico es ligeramente inferior al que ofrece una dirección de un stick, pero es fácil y rápido acostumbrarse.

De nuevo, al configurar nosotros el comportamiento de cada tecla, podemos definir si queremos que la pulsación sea casi inmediata, o que necesite recorrer más distancia, lo que también facilita que no haya pulsaciones accidentales en juegos como LoL u Overwatch. Y nos sigue pareciendo un acierto que podamos configurar incluso a rueda multimedia para usarla en los juegos y macros, bien para lanzar alguna acción o cambiar de arma. 

Del mismo modo, las teclas no ofrecen una excesiva resistencia, de hecho son muy cómodas de pulsar, lo que lo hace también un teclado idóneo para trabajar. Si además ajustas la respuesta del switch a 1,5, es un teclado muy rápido y nos ha gustado la experiencia mientras escribíamos este y otros artículos de las últimas semanas.

Como decimos, es algo a lo que es fácil acostumbrarse, y una clara muestra de la versatilidad de este teclado. Y como todos los modelos recientes del fabricante cuenta con N-Key Roller y Ultrapolling, lo que viene a decir que no perderemos ninguna pulsación aunque apretemos medio teclado a la vez, y con un tiempo de respuesta prácticamente inmediato, inferior a 1 ms.

Razer Synapse, el arma secreta para configurarlo todo

Una vez más, la memoria híbrida en placa y Razer Synapse permiten que el teclado sea todo lo versátil que queramos que sea, creando perfiles específicos para juego, almacenándolos en la nube y subiendo y bajando los que queramos en cada momento. Tiene capacidad para hasta 5 de estos perfiles, y cambiar entre ellos al vuelo vuelve a ser muy sencillo con atajos de teclado, incluso en un ordenador donde no esté instalado Synapse (lo mismo es aplicable para los distintos efectos de luz).

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Razer Huntsman Analog Synapse (4 imágenes)

La configuración con Razer Synapse sigue siendo impresionante, y nos permite aplicar comportamientos analógicos a cada tecla de manera individual, a todo el teclado por igual, configurar macros y asignarlas a un botón o incluso comportamientos específicos para cada tecla (como si fuera parte de un mando).

Luego está todo lo relativo a Chroma RGB, que es otro mundo y que permite, de nuevo, configurar el teclado como quieras. Puedes asignar un color y efecto a cada tecla de manera individual, creando "capas" o estilos también por grupos de teclas (por ejemplo, todas las movimiento con una luz fija y un color concreto y las macros con efecto onda y color que va rotando).

Es una opción en la que puedes invertir mucho, mucho tiempo para lograr unos resultados impresionantes, aunque no pocos juegos cuentan ya con ajustes personalizados para que todo tu setup Razer se ilumine de forma consistente y acorde al juego. 

Conclusión: Razer Huntsman V2 Analog

Por si no ha quedado claro, Razer Huntsman V2 Analog es uno de los mejores teclados que ha pasado por nuestras manos. Es increíblemente versátil, y los interruptores analógicos, aplicados a gaming, marcan un antes y un después. Es una nueva tecnología y desde esta primera versión nos ha convencido con lo bien que funciona su registro de presión gradual.

Algunos seguirán prefiriendo usar un mando como oficial de Xbox y PC el Wolverine V2 de Razer, pero para otro amplio grupo de jugadores, poder tener un teclado con esta respuesta analógica, complementada con un buen ratón (como el Viper 8K, del que pronto os traeremos nuestra review) , supondrá justo lo contrario, dejar de usar un mando en PC... o al menos en algunos tipos de juego. 

Porque Razer Huntsman V2 Analog ofrece un mayor control en juegos de velocidad, en shooter, aventuras en mundo abierto, juegos en tercera persona... quizá en otros géneros no suponga un cambio tan importante, pero en esos, la forma de jugar cambia. 

Eso sí, todo tiene un precio, y en el caso del Razer Huntsman V2 Analog, es bastante alto: 269,99 euros. Sí, es más caro que una Nintendo Switch Lite, pero como hemos dicho es nueva tecnología... y es lo que suele pasar con las novedades. Razer Huntsman Analog no está al alcance de todos los bolsillos, y es quizá su mayor "defecto", pero como lo pruebes, es harto probable que te resulte muy difícil volver a usar tu anterior teclado.