En los 90, mientras las consolas seguían su propia "guerra" de revoluciones técnicas, el mundo del PC avanzaba por su lado a golpe de tarjetas aceleradoras y motores rompedores. Antes de que acabara la década, el juego Outcast revolucionó el panorama técnico con su Voxel Engine. 24 años después, su héroe Cutter Slade regresa con Outcast: A New Beginning para PS5, Xbox Series X|S y PC.

THQ Nordic es la encargada de resucitar la franquicia, pero es consciente de que la mayoría del público actual seguramente no la conozca, así que han planteado esta aventura como un nuevo comienzo, tal y como indica su título. Vuelven Cutter y sus habilidades recnológicas, vuelve el mundo de Adelpha, pero todo se explicará paso a paso hasta dar pie a una aventura enorme.

Se encarga del proyecto Appeal Studios, creadores del flojete Gangs of Sherwood (por suerte, este nuevo juego pinta mejor), que se ha lanzado a finales de este mismo año.

La historia de Outcast: A New Beginning tiene lugar después de lo visto en el juego original con un Cutter Slade que se ve forzado a regresar al mundo de Adelpha. Él apenas recuerda nada sobre su pasado, pero sabe que ha de ayudar a los talans, la raza autóctona de ese mundo, a librarse de sus opresores, a la par que intenta averiguar qué ha pasado con su hija desaparecida.

Así pues, no hará falta conocer los juegos previos para sumergirse de lleno en la historia, aunque los veteranos notarán varias conexiones interesantes.

Hemos estado hablando con los desarrolladores del proyecto y tienen claro que quieren concebir una experiencia versátil, en la que el jugador avance a su ritmo y sin sentirse "obligado" a seguir la estructura clásica de los juegos de mundo abierto, con misiones principales rodeadas de secundarias que se noten forzadas.

En lugar de eso, aquí tendremos algunos objetivos principales para que la trama avance, pero todo estará conectado dentro de un diagrama para que podamos ver la forma más útil de avanzar en cada caso. Cuando superemos determinados desafíos, eso podrá abrir acceso a otros nuevos que nos den ventajas o rutas con las que no contábamos.

La idea es que el progreso resulte más orgánico y que, además, veamos cómo el mundo a nuestro alrededor también va reflejando nuestras acciones. Así, podremos ayudar a que determinadas aldeas prosperen y, como consecuencia, mejoraremos su economía y ganemos acceso a habilidades nuevas. O que incluso entablemos vínculos con la fauna que nos den pie a más formas de transporte.

Será muy satisfactorio ir ganando la posibilidad de lanzar bombardeos a grandes áreas enemigas o incluso hacerlos levitar mientras los tiroteamos sin piedad.

Si interceptamos convoyes o tomamos bases enemigas, también obtendremos nuevas ventajas, por lo que estar atentos a todo lo que nos rodea será fundamental.

El propio mundo de Adelpha, como podéis suponer, jugará un papel crucial en la experiencia de juego: encontraremos tribus que hablan su propio idioma y con las que deberemos dialogar, extraños seres de todo tipo... Y todo lo que veamos en el horizonte será visitable, siempre que contemos con las habilidades necesarias.

Ahí es donde entra el personaje de Cutter, que volverá a contar con su fiel jetpack (el cual podremos ir mejorando con varios impulsos) o su pistola. Combinarla con el escudo de energía o con las fintas laterales será clave para superar los combates.

Podremos ir añadiendo diferentes módulos al arma para aplicar efecto conmocionador, un flujo de disparos tipo ametralladora... Habrá 30 módulos para incorporar.

Pero también habrá plataformeo y mucha verticalidad en el diseño de los escenarios, para que sintamos que vamos conquistando poco a poco un mundo con personalidad propia. Por suerte, podremos activar los tradicionales portales para viajar en un pestañeo de un lugar a otro del enorme mapa o ganar la habilidad de planear con nuestro jetpack.

Sus desarrolladores nos hicieron mucho hincapié en que quieren crear un mundo que, por supuesto, suponga un desafío, pero que no se haga frustrante para el jugador, ni en la exploración ni en los momentos de acción. La dificultad será muy progresiva y en muchas ocasiones podremos diseñar nuestra propia estrategia a la hora de superar el siguiente reto.

Podremos recopilar plantas que nos ayuden a sanarnos en pleno combate y, cuantos más desafíos superemos, más podremos mejorar nuestro propio rendimiento y el del jetpack, hasta el punto de encadenar varias propulsiones seguidas y escalar enormes estructuras.

Otro de los puntos clave que quisieron resaltar los desarrolladores es que la experiencia recordará a la "ciencia ficción soft", tanto en el uso de la tecnología como en el tono distendido de los acontecimientos y conversaciones.

Así, será como ver las películas clásicas de Star Wars y Star Trek, con algún momento dramático pero también bastantes chascarrillos por parte de Cutter y acción sin complejos. La propia estética beberá de los clásicos del cómic de ciencia ficción de los años 80 y 90.

A nivel técnico, nuestras primeras sensaciones tras probarlo en persona son bastante buenas, con una flora frondosa que da sensación de "vida" dentro de un mundo grande, en el que desde el principio se nota que hay mucho por descubrir. La sensación de tenerlo todo al alcance de nuestro jetpack es muy gratificante.

Es cierto que el propio modelo de Cutter es algo extraño (no puede tener menos cara de héroe, la verdad), pero su personalidad y la estética de los enemigos y NPCs que nos vamos encontrando sí hacen que nos sintamos dentro de un mundo distintivo y reconocible.

Por ahora, apenas hemos rascado la superficie de los diálogos, en los que se vislumbra que podremos dar pie a diferentes desafíos secundarios en función de lo que vayamos respondiendo.

Enormes ciudades tribales, bosques llenos de extraña vegetación y efectos de partículas muy vistosos quieren lograr que nos sintamos dentro de una pequeña gran epopeya de ciencia ficción, una muy colorida y luminosa, por cierto.

El lanzamiento será el 15 de marzo de 2024 y en ese momento veremos si el nuevo comienzo para Cutter Slade de Outcast: A New Beginning se encuentra a la altura de las expectativas. Por ahora, este mundo abierto nos recuerda por qué el juego original nos resultó tan fascinante. El resto de recuerdos, como los del propio Cutter, tendrán que regresar poco a poco...