Análisis de Bright Memory en Xbox Series X, el modesto prólogo de la acción que está por llegar

Cuando se dieron a conocer los primeros juegos para Xbox Series X, uno de los que más llamaron la atención fue Bright Memory Infinite, un nuevo representante de la "stylish action", en el que la protagonista encadena espadazos y disparos más rápido que Falete devora croquetas.

Aunque aún falta para que llegue ese juego completo, el desarrollador FYQD ha lanzado una especie de prólogo llamado Bright Memory a secas. Y ojo, decimos "el desarrollador", porque el juego ha sido creado... ¡Por una sola persona! Pues sí, un señor chino se ha liado la manta a la cabeza y está creando un juego de acción por su cuenta. ¿Va el proyecto por buen camino? Vamos a comprobarlo.

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Como decimos, Bright Memory es una especie de "aperitivo" antes de que llegue el juego final y completo. En él, encarnamos a Shelia, una superagente de la Organización de Investigación de la Ciencia Sobrenatural (la típica organización, ya sabéis) la cual se ve involucrada en un extraño suceso que abre unos inexplicables portales. Por el camino, se cruza con Carter, que le lanza unas palabras amenazantes. ¿Que quién es Carter? ¿En serio no lo sabéis? Pues nosotros tampoco.

Ahí arranca uno de los primeros problemas de Bright Memory: no se nos da ningún contexto. Vale, es una especie de prólogo y se entiende que quieran guardarse misterios, pero explicadnos un poco quiénes somos, qué hacemos o qué pintan tantos bichos por aquí. En lugar de eso, el juego nos lanza directamente a la acción y, tras disparar a un puñado de soldados (suponemos que son malos y Shelia es buena), somos arrastrados a un extraño entorno al aire libre, en el que nos atacan animales monstruosos y toda clase de criaturas imposibles.

No hay tiempo para explicaciones, toca disparar a toda pastilla. Por suerte, tenemos tres armas con munición para aburrir: una pistola, una ametralladora y una escopeta. Solo nos tenemos que preocupar de los tiempos de recarga, pero no nos vamos a quedar sin munición. Además, cada cierto tiempo podemos usar nuestra espada para lanzar tajos sin parar durante unos segundos. Tajos que tienen el mismo alcance que la escopeta y que podemos complementar con "ataques de luz" pulsando la cruceta, así que Shelia es una máquina de matar.

De hecho, esta dinámica de alternar tiros y tajos, junto a la esquiva del botón B, hacen que el "gunplay" sea muy atractivo y, cuando nos desmelenamos y usamos todas nuestras habilidades a la vez, haya espectáculo. Lamentablemente, hacen falta bastantes retoques a esta dinámica. Por ejemplo, el giro del personaje es inexplicablemente lento y no es posible fintar hacia delante o hacia atrás, algo que nos habría dado mucha más fluidez.

Al estilo de los Devil May Cry, recibimos puntuaciones si mantenemos los ataques sin parar y sin recibir daños, con la calificación SSS como tope. Los enemigos, por su parte, son bastante genéricos y parecen un refrito de Dark Souls, Final Fantasy y cualquier boceto que tengáis vosotros por casa.

Además, los encuentros con los enemigos están descompensados y tan pronto despachamos a varios sin problema como de repente nos vemos rodeados por enemigos que nos pueden "canear" de un golpe. Todo ello se ve aderezado por algún puzzle (más propio de un Tomb Raider que de un juego así) que corta el ritmo de golpe.

La lista de problemas se remata con unos gráficos muy irregulares. Sí, es cierto que hay efectos de lluvia y rayos muy llamativos, pero no dejan de ser "capas" que tapan unos modelados y animaciones tremendamente anticuados y limitados, más propios de comienzos la generación de Xbox 360. Esto fastidia especialmente porque el juego se vende como uno de los primeros "optimizados para Xbox Series X / S", pero no se ve por ningún lado en qué puede estar aprovechando unos hardwares nuevos tan poderosos.

Por cierto, las voces están en inglés, pero hay subtítulos y menús en español. Como suele ocurrir con estas producciones modestas, incluyen errores propios de quien no habla español de forma nativa, como traducir "resume" por "resumir" en el menú o "pull" por "jalar"... ¡Pero encima ponen "halar", con h aspirada!

Hablando de los menús, es más que evidente que se han convertido al vuelo desde la versión de PC, pues hemos de mover un incómodo cursor para activar las opciones, incluso pulsar una enorme X para cerrar las ventanas. ¡Demonios, se usa el botón B de toda la vida! Por cierto, entrad en las opciones gráficas y activad la V-Sync para que desaparezca el incómodo tearing.

Como veis, no son pocas las trabas que presenta Bright Memory y, por tanto, no podemos sino darle una noti más bien bajita... Es de justicia reconocer que crear todo esto con solo tus dos manitas tiene que haber sido duro y tiene su mérito... Pero claro, el jugador no tiene por qué saber esto y lo que querrá es disfrutar jugando. En cualquier caso no nos "cargamos" este juego del todo, porque es cierto que en el combate se ve el potencial de algo más grande e intenso. Por los 8 euros que cuesta, se vislumbra lo que, esperamos, será un juego final mucho más pulido y atractivo.

Por cierto, podéis pasároslo en menos de una hora y, aunque existe una Nueva Partida+, no hay más atractivo que probar otros trajecitos para Shelia. ¡Pero ey, dan un montón de logros al superarlo! Algo es algo.