Adorable, pero... ¿Suficientemente innovadora? Crítica de Red, lo nuevo de Pixar

Red llegará de manera exclusiva a Disney Plus el próximo 11 de marzo, sin haber pasado antes por las salas de cine, como viene siendo habitual en los estrenos de Pixar de los últimos años. Sin embargo, tanto Soul como Luca como Redtienen algo en común: la alta calidad de su animación a pesar de su estreno doméstico. 

Es una pena que no vayamos a poder ver Red en cines, pues seguramente una gran parte del público se animaría a ver la cinta en pantalla grande, pero con este tipo de contenido exclusivo y de calidad, Disney se asegura de darnos buenos motivos para suscribirnos a su plataforma de streaming. 

En todos los carteles y en todos los tráiler de Red, lo que más destaca es ese panda rojo gigante, pero Pixar se toma su tiempo para presentarnos al personaje. 

Primero conocemos a Mei Lee, la adolescente de 13 años que protagoniza esta película ambientada en la década de los 2000, y unos minutos más tarde vemos sus garras, su cola, sus orejas, y finalmente su rostro asustado en el espejo. Ya tenemos nuestro panda, ya tenemos la metáfora.

Red es un relato sobre la adolescencia, sin ninguna sutileza para el público adulto pero un cuento de fantasía protagonizado por un animalito adorable para el público más joven. En cuanto Mei-Mei tiene la más mínima emoción sufre una metamorfosis, pues cuando deja de ser una niña todos sus sentimientos se vuelven más viscerales y le hacen perder el control.

Sin embargo Mei-Mei no es una adolescente cualquiera, es una adolescente china-canadiense que por un lado intenta encontrar su propia identidad e independencia con su grupo de amigas, con los chicos que le atraen, y escuchando la música que le gusta, y por otro quiere ser la hija ideal para su familia conservadora, que le exige perfección y rectitud. 

Suscríbete a Disney+

Tus películas y series favoritas están en Disney+. Suscríbete por 8,99€/mes o ahorra 2 meses con la suscripción anual, en comparación con 12 meses a precio de suscripción mensual.

Comenzar suscripción

Esta lucha interna y externa, será uno de los ejes centrales de la película. ¿Cómo controlar tus emociones para que ver a un chico guapo o a un gatito no hagan salir al panda rojo que hay en ti? ¿Cómo ocultar quién eres cuando se hace evidente cada vez que intentas negarlo? ¿Cómo no sentirte el centro de atención?

Pero aunque todo esto suene tan bien, aunque tenga puntos muy acertados con los que mucha gente se sentirá identificada, aunque haya una gran diversidad cultural y física, siguen permeando los temas de siempre. El objetivo último de Mei-Mei es ver el concierto de esa boyband llena de chicos monísimos, mientras realiza el habitual viaje de autodescubrimiento que entendemos de manera casi universal.

En parte por su ambientación asiática, en parte por las cosas que nos cuenta y por los diseños genéricos de sus personajes secundarios que no llegan a sorprender, Red recuerda más a producciones de Netflix como a Más allá de la Luna o El dragón de los deseos, pero consigue superarlas al ser más carismática y por aportar un pequeño extra en su animación.

Domee Shi, la directora de la película, es una enamorada del anime, hasta el punto de que su influencia es notable durante parte del metraje. Con Red estamos ante una cinta de animación en 3D marca de la casa, pero que también está salpicada por algunos detalles diferenciadores. Y no sólo hablamos de que en cierta escena se imiten los dibujos de pergaminos tradicionales chinos. 

El hiperrealismo de la comida es posiblemente uno de los aspectos que más destacan de cualquier anime. En Red la comida no es el centro de la historia, como sí lo era en Bao, el anterior trabajo de la directora, sin embargo en los momentos en que se cocina se nos caerá la baba como si estuviéramos viendo Food Wars!

Pero hay otras características todavía más notables, como los personajes que acentúan exageradamente sus rasgos, con ojos que se agrandan y se llenan de brillos, con sudores que se marcan en la cara o con batallas en las que desaparecen los fondos para dar protagonismo a las líneas cinéticas y a las explosiones. 

También se rompe la cuarta pared, y los efectos de iluminación encuadran a Mei-Mei como único personaje en escena. 

Aunque el auténtico protagonista de la película es el panda rojo gigante, no sólo en el argumento sino también en la parte visual. El panda es adorable, visualmente suave y blandito, es la mascota perfecta para el merchandising, y la propia película está repleta de ideas sobre cómo explotar el producto con camisetas, peluches y demás.

Quizá Redno sea un relato sobre la adolescencia tan original como lo fue en su día Del revés, quizá sus conflictos sigan siendo los mismos de siempre y sus mensajes tengan el sello Disney grabado a fuego, pero tiene un buen ritmo, una buena animación, y nos hará soltar alguna carcajada.

¿Es Red motivo suficiente para que nos suscribamos a Disney+? Podrías pasar sin verla, pero con todo el contenido exclusivo que ya hay disponible en la plataforma, merece la pena darle una oportunidad, y ya de paso ver lo nuevo de Pixar.