Análisis del DLC Splatoon 3: La Cara del Orden, el triunfal estreno de Nintendo en los roguelite que no debes pasar por alto

Splatoon 3 ha recibido por fin su esperado DLC de pago, La Cara del Orden, una campaña nueva, solo para un jugador, en un mundo virtual estilo Matrix y con una peculiaridad: es un roguelite. ¡El primero de Nintendo!

Nintendo se estrena con este popularísimo género, sobre todo en indies como Dead Cells, Hades o Slay the Spire, pero también algún AAA como The Last of Us 2 Remastered o God of War Ragnarok.

Lo hace como parte del pase de expansión del juego de Switch, a la venta por 24,99 euros, similar al de la Octoexpansión que tuvo Splatoon 2, pero en vez de ser una nueva campaña, es una torre con 30 pisos, o sea, 30 niveles aleatorios, muy desafiantes, que debes completar seguidos, pero con un poco de perseverancia, lo lograrás... y disfrutarás una barbaridad por el camino.

Análisis de Splatoon 3: La Cara del Orden en Hobby Consolas:

• La historia de Splatoon 3 La Cara del Orden
• Jugabilidad de Splatoon 3 La Cara del Orden
• Duración de Splatoon 3 La Cara del Orden
• Dificultad de Splatoon 3 La Cara del Orden
• Precio del DLC de Splatoon 3
• Nuestra opinión de Splatoon 3 La Cara del Orden
• Nota: Lo mejor y lo peor

La historia del DLC de Splatoon 3

Aunque Splatoon solo tiene tres juegos, llevamos ya cuatro campañas single player: la del primer juego de Wii U, la de Splatoon 2 en 2017, la Octoexpansión de 2018, y la campaña de Splatoon 3 de 2022. 

Splatoon nació como un juego multijugador online por equipos, pero sus modos individuales, aunque con vocación de tutorial para el online, siempre han sido muy aplaudidos como ingeniosos juegos de acción y plataformas 3D.

Pero daba la impresión de que estas campañas se estaban quedando algo cortas y muchos pedían que Nintendo fuera a lo grande con niveles más amplios que explorar y escalar con nuestros poderes de Inkling. Pero lo que nos han dado con este DLC no lo vimos venir... y ha resultado ser una decisión acertada.

Para entrar en este DLC, debes coger el metro en la plaza de Tintópolis e ir a la "Plaza de Cromópolis"... solo que en realidad no es el mundo real, sino una realidad virtual estilo Matrix creada por Marina, una de las cantantes pop de Splatoon 2.

Este mundo virtual ha sido corrompida por un "virus" que amenaza con lavar el cerebro a todo el mundo y crear un mundo sin color ni música ni alegría. ¿Un comentario social sobre cómo la tecnología (y la IA) amenaza con destruir la creatividad?

Una premisa muy loca, no muy explotada, pero sí atractiva: Splatoon sigue siendo uno de los mundos más originales y con más estilo de Nintendo, y no queremos desvelar todas las sorpresas, así que vamos al meollo: ¿cómo se juega?

La jugabilidad de Splatoon 3 La Cara del Orden explicada

Nintendo nunca se ha referido oficialmente a Splatoon 3 La Cara del Orden como un roguelite, pero es clara su inspiración. Una vez que pasas el extenso tutorial, comienza el juego de verdad: un desafío para superar una torre con 30 pisos, cada uno formado por un nivel corto, mucho más breves que los niveles de la campaña, y que se suceden de forma aleatoria.

Si has jugado a un juego del estilo como Hades verás todas sus piezas en su sitio, pero si no, el juego hace un buen trabajo en explicártelo todo, aunque a veces tanta información es un poco abrumadora.

Antes de cada piso tienes la opción de escoger tres niveles, cada uno con tres recompensas diferentes, que van de Fácil, Normal, Difícil o Dificilísimo. Los niveles siempre son variantes de los siguientes:

• Destruir nidos de enemigos
• Empujar bolas ocho por el nivel hacia su hoyo (como en Octoexpansión, aunque aquí no se pueden caer)
• Llevar una turbina hacia la meta (como el modo Torre del online)
• Defender una zona (estilo Pintazonas del online)
• Atrapar a dos o tres enemigos muy escurridizos

Las recompensas de cada nivel son Cromochips, mejoras de diversos tipos con varias categorías: más potencia en las armas, velocidad de recargar, de movimiento, mejoras y ampliaciones para un dron que te ayuda, más objetos y combos...

Si mueres, vuelves al vestíbulo y tienes que comenzar la escalada de nuevo, perdiendo todas tus mejoras. 

Pero estas transforman en perlas, que puedes usar para conseguir "hackeos", mejoras permanentes (como más vidas, más fuerza y defensa, más armas para el dron, posibilidad de restablecer las recompensas en cada nivel, descuentos en las tiendas dentro de la torre...).

En los pisos 10, 20 y 30 hay jefes finales de varios tipos. La primera vez que los completas con una "paleta" (build de arma, secundaria y especial indivisible) te dan llaves para poder desbloquear otras paletas, con otras armas, por lo que, aunque te pases la torre una vez, tienes incentivos para pasártela muchas otras veces con todas las armas y desbloquearlo todo.

¿Cuántas horas de juego tiene el DLC de Splatoon 3?

Como este DLC es un modo roguelite, es algo más difícil determinar cuánto dura. No es como la Octoexpansión, donde había 80 niveles diferentes: aquí pasarte el juego son 30 "niveles", pero siempre son variaciones de lo mismo.

Muchos de ellos duran menos de un minuto, aunque los jefes y los más difíciles pueden llevaros bastante más rato. Puedes hacerte una run completa en una hora, pero claro, seguramente nadie va a pasarse el juego en su primer, ni segundo, ni tercer intento.

La clave de los roguelite es desafiarte a ver lo máximo que puedes llegar cada vez, y aunque morir y perder tu progreso puede ser frustante, cuando vuelves has amasado una buena cantidad de perlas con las que comprar hackeos para hacer el siguiente intento un poco más fácil. Poco a poco, pico y pala. 

La duración real de la experiencia completa, viendo créditos, será equivalente a la de la Octoexpansión o la campaña, quizás algo menos: aproximadamente cinco horas. Pero luego vas a querer seguir jugando. 

Parece menos porque siempre repites los mismos niveles, pero estos juegos vician lo suyo, y el tiempo se te pasa volando si te engancha su desafío (y es probable que lo haga).

Al final, lo rejugarás mucho más que una campaña normal, que probablemente una vez que la termines ya no tocará. El DLC te saldrá rentable... aunque queda esa sensación de haber poco verdaderamente nuevo para el precio que tiene.

¿Es muy difícil el DLC de Splatoon 3?

Como está pensado como expansión para los jugadores que ya tienen Splatoon 3, este contenido adicional es más difícil de lo habitual en los juegos de Nintendo. 

Te puede sorprender lo difícil que es, lo que te va a costar sobrevivir con la única vida que tienes al empezar y los errores imprudentes que cometerás hasta que le pilles el truquillo a cada tipo de nivel.

Sin embargo... pico y pala. Con una gestión inteligente de nuestras perlas al comprar hackeos y de los cromochips que acumules en tu partida, verás en tiempo real cómo te haces más y más fuerte y cada vez te cuesta menos llegar a pisos altos. 

Y cuando lo consigues, es tremendamente satisfactorio. Diríamos que la dificultad es alta, pero tampoco excesiva, y muy modulable por las mejoras que puedes comprar y activar (hay incluso ayudas con las que puedes revivir o recomenzar en el piso en el que te quedaste pagando perlas, si te da mucha rabia, pero no las recomendamos).

Precio y plataformas disponible

Splatoon 3: La Cara del Orden forma parte indivisible del Pase de expansión de Splatoon 3. Este DLC se lanzó hace un año y tienes dos "partes", pero lo primero fue anecdótico: la posibilidad de visitar la Plaza de Cromópolis, la misma que la del primer Splatoon de Wii U, que uses como hub del juego en lugar de Tintópolis.

Este Pase de Expansión solo ha cobrado sentido a raíz de La Cara del Orden, por lo que básicamente pagarás 24,99 euros por este DLC. Y solo si ya dispones de Splatoon 3 (59,99 euros) en Nintendo Switch, claro, no se vende por separado.

El DLC Splatoon 3 que mejora todo el juego

El DLC de Splatoon 3 nos ha encantado. También nos ha puesto en un dilema, porque aunque lo hayamos disfrutado más que la campaña principal del juego (que también estaba muy bien) da la impresión de que sabe a poco.

Mezclando muy pocos ingredientes (básicamente tres mundos, cinco tipo de niveles, una docena de enemigos nuevos y las mismas armas) y reordenándoles en formato roguelite, consiguen algo que se siente muy diferente a las campañas a las que ya estamos acostumbrados. 

La sensación es que menos es más. Pero menos ¿también es menos? S lo juzgas al peso, es mucho menos contenido que el DLC de Splatoon 2 por cinco euros más, de ahí que apenas haya habido tráilers e información hasta casi su lanzamiento, porque... no hay mucho que mostrar. 

Sin embargo, el formato roguelite lo cambia todo. Extiende la duración del DLC haciendo por razones obvias (repetir una y otra vez), ofrece muchos mejores motivos para rejugarlo (superarlo con todas las armas, que cambia mucho la experiencia), y sobre todo nos fuerza a cambiar nuestros esquemas mentales a la hora de jugar. Nos involucra mucho más.

Una campaña tradicional, con una sucesión de niveles, puede ser más o menos difícil, más o menos variada, pero simplemente es avanzar en una línea recta hasta el final (o hasta que te canses). 

En un roguelite, tus decisiones importan mucho más: decidir en qué mejoras permanentes invertir, qué clase atributos fortalecer en cada partida, decidir jugártela con misiones más difíciles con mejores recompensas... o decidir ser un cobarde y coger los niveles fáciles.

Es un modo que logra que disfrutes mucho más de Splatoon, como conjunto. Al tener que superar la torre con cada arma para desbloquearlo todo, y no solo en niveles sueltos como las campañas, te obliga por narices a tener que dominarla... y quizás acabes cogiéndole el tranquillo a un arma que nunca usabas en el online.

Incluso como la mayoría de tipos de niveles están basados en modos online (Pintazonas, Torre, Salmon Run) acabarás importando estrategias de tus partidas online al roguelite y vice versa: single player y multijugador se complementan mucho mejor.

Y sí, los cromochips se notan. Casi todos son del tipo aumentar un 10% tu potencia, dispersión o cadencia, que parecen poca cosa, pero cuando acumulas muchas (sobre todo si usas la cabeza y escoges muchas mejoras del mismo tipo en cada run) acabas convirtiéndote en una máquina de matar, enfrentado a hordas de enemigos mucho más fuertes de lo que salían en las otras campañas. Algunos niveles son una locura.

Splatoon 3 tiene todas las piezas de un roguelite habitual (en forma de cromochips, paletas, hackeos) y están muy bien medidas para que la progresión sea constante y satisfactoria, que siempre estás mejorando, pero sin que sea demasiado rápido como para desmerecer tus logros. 

Intuimos que su largo desarrollo (fue anunciado hace un año entero, y sale año y medio después del juego original) ha servido para medir y mezclar cuidadosamente todos sus elementos y hacer que, además de lo pulido que está siempre todo lo que saca Nintendo, tenga el equilibrio perfecto entre diversión, frustración y satisfacción tan delicado de los roguelites.

Splatoon 3: La Cara del Orden es un experimento de Nintendo en un género que no dominaba, y que resulta plenamente exitoso. Te hará disfrutar de Splatoon como nunca antes habías imaginado, ¡y queremos más!