Análisis de Mario vs. Donkey Kong, el renovado regreso de uno de los duelos más especiales de la historia de Nintendo

Mario vs. Donkey Kong se estrena el 16 de febrero en Nintendo Switch dispuesto a renovar y a refrescar una de las subsagas más interesantes y olvidadas del personaje, que además dio sus primeros pasos como uno de los mejores juegos de Game Boy Advance.

Para la ocasión, la gran N ha preparado un remake muy interesante que nos ofrece mucho más que simples plataformas, además de añadir nuevo contenido como ya hizo, por ejemplo, en Super Mario World 3D + Bowser's Fury, algo que por supuesto vamos a ver en este análisis de Mario vs Donkey Kong para Nintendo Switch.

Un juego que llega cuando Super Mario ya ha sido casi de todo en Nintendo Switch... Futbolista en Mario Strikers Battle League Football, piloto en Mario Kart 8 Deluxe, tenista, luchador e incluso ha vuelto a la senda del rol con un remake de Super Mario RPG, pero le faltaba algo... 

Nintendo quiere que este final de ciclo de su consola híbrida sirva para recordarnos algunos de los tesoros "olvidados" del personaje de peto y bigote. Por ello, en este 2024, nos llegan dos joyitas clásicas en forma de remake como son este Mario vs. Donkey Kong y Paper Mario y la Puerta Milenaria.

El primero de ellos ya está aquí y tras haberlo jugado y disfrutado, te voy a contar todo sobre él para dejarte claro si merece la pena darle una oportunidad. 

Estos son los aspectos que voy a tratar en el análisis de Mario vs. Donkey Kong para Nintendo Switch.

• El origen de Mario vs. Donkey Kong y breve repaso a la saga
• La jugabilidad y novedades de Mario vs. Donkey Kong en Nintendo Switch
• Nivel de dificultad de Mario vs. Donkey Kong
• ¿Cuántas horas de juego dura Mario vs. Donkey Kong?
• Cuánto cuesta Mario vs. Donkey Kong y dónde puedes jugarlo
• La opinión de HobbyConsolas de Mario vs. Donkey Kong
• Nota: lo mejor y peor de Mario vs. Donkey Kong

Breve historia de la saga Mario vs. Donkey Kong

¿Qué es Mario vs. Donkey Kong para Nintendo Switch? Nos encontramos ante un remake del juego homónimo de Game Boy Advance lanzado en 2004, que procedía de un título cancelado (Donkey Kong Plus) que solamente se pudo ver en el E3 de 2002 y cuya idea se basaba en Donkey Kong de 1994 para Game Boy, que a su vez renovaba lo visto en Donkey Kong original de 1981.

Así que queda claro que este juego está ligado a los mismísimos cimientos de Nintendo. Y es que... Super Mario le debe TODO a Donkey Kong. Fue en ese lejano 1981 cuando el fenómeno de masas comenzó. A los mandos de Jumpman teníamos que saltar los barriles que nos lanzaba un furioso gorila... y el resto ya es Historia.

Jumpman fue renombrado a Mario y en 1985 llegaba a NES Super Mario Bros, el comienzo de un mito y un símbolo para millones de personas que continúa hasta el día de hoy con propuestas renovadas como Super Mario Bros. Wonder.

Mientras tanto, Donkey Kong ha ido a su bola protagonizando títulos muy famosos y participando en donde le han dejado, pero fue en 2004 cuando fontanero y gorila retomarían su rivalidad. Hace 20 años nacía Mario vs. Donkey Kong en Game Boy Advance.

Una vez más, Nintendo lo volvía a conseguir y reformulaba las plataformas para ofrecernos un juego lleno de personalidad donde los puzles asumían gran parte del protagonismo. Una nueva propuesta de saltos y rompecabezas se establecía.

Sin embargo, pese a su originalidad, Mario vs. Donkey Kong ha ido cayendo en el olvido en gran parte porque la gran N fue relegándola al cajón de los juguetes rotos. Digamos que se empezó a tratar a la saga como si fuera el último... mono.

Tras una sólida entrega como fue March of the Minis! en Nintendo DS, los siguientes juegos de una lista cerrada con Amiibo Challenge en 2016, dejaron claro que la saga comenzaba a decaer perdiendo frescura y originalidad. 

Por suerte, tras casi una década, una nueva oportunidad se nos ha brindado a los fans. ¿Merece la pena volver? Ya te vamos adelantando que sí.

Gameplay de Mario vs. Donkey Kong en Nintendo Switch y todas sus novedades

En esta entrega, ni Bowser ha raptado a Peach, ni Donkey Kong a Pauline. Sin embargo, el gorila ha hecho de la suyas robando a Mario sus nuevos juguetes de cuerda, los Minimarios, que son toda una... monería.

El fontanero, como empresario celoso de su producto, tendrá que perseguir a Donkey Kong a lo largo de más de 130 niveles para recuperar a todos los Minimarios robados. La premisa es simple, pero ahora luce mejor que nunca gracias a las nuevas cinemáticas que nos hacen desear un nuevo Donkey Kong Country aún más si cabe.

La estructura del juego es muy tradicional y episódica teniendo ocho mundos que desbloquear con ocho niveles cada uno, más otros ocho mundos adicionales con siete niveles y 16 pruebas extra para expertos.

En los ocho primeros mundos, cada nivel tiene dos fases. En la primera, Mario debe recuperar una llave para abrir una puerta y en la segunda le espera uno de los minimarios. Este conjunto además ofrece tres cajas coleccionables que debemos obtener si queremos sacar la estrella (que luego se usan para canjear los geniales desafíos expertos).

Cuando reunimos a los seis minimarios desbloqueamos un nivel especial en el que tenemos que guiar a nuestro pequeño grupo de seguidores mecánicos mientras recogen las letras de la palabra "TOY" (juguete). Tras superarlo nos espera una batalla contra Donkey Kong al más puro estilo retro.

Una vez llegamos a los mundos +, la fórmula cambia ligeramente. Los niveles son completamente diferentes (no son mundos espejo) y ahora son mono-fase (este es el último juego de palabras simiesco, lo prometo). Desde el primer momento nos seguirá un minimario que es la llave para superar la prueba.

Este formato hace que nunca te llegues a cansar de la propuesta de Mario vs. Donkey Kong porque cuando ya llevas un tiempo repitiendo los mismos procedimientos, el juego te ofrece ligeros cambios que son muy de agradecer para renovar el gameplay.

Porque es la jugabilidad lo que más destaca en esta entrega. Aquí abandonamos lo de dar saltos a toda velocidad para hacer del arte de las plataformas un puzle. Cada nivel es un rompecabezas y toca resolverlo mediante calculados saltos y movimientos antes de que se acabe el tiempo.

El set de acrobacias de Mario es el que todo fan conoce, pero cada una de las acciones tiene su utilidad dentro de unos niveles exquisitamente diseñados. De verdad, todos y cada uno de ellos son una maravilla gracias a sus particularidades.

Cada mundo se apoya en una mecánica concreta y consta de unos enemigos propios. La ardiente lava, tener que trepar por cuerdas, accionar interruptores, servirnos de los Shy Guys patrulleros para cruzar zonas de pinchos, jugar con cintas transportadoras y más pruebas nos esperan.

Mario vs. Donkey Kong exige darle al coco y pararte a pensar antes de dar un paso, lo que le convierte en un juego muy especial dentro de la saga. No hay nada igual en la franquicia estrella de Nintendo y con este remake todo mejora.

Porque en materia audiovisual, el juego es una delicia, ya que el original ha envejecido un poco mal. Nintendo ha renovado los gráficos y ha regrabado una fantástica banda sonora que tiene mucho más impacto de lo que podríamos llegar a pensar para hacer de este remake una gran experiencia.

Todo luce genial en Nintendo Switch, tanto en modo dock, como en portátil. Dicho sea de paso, Mario vs. Donkey Kong es uno de esos juegos que casa a la perfección con la filosofía de la consola híbrida y partidas rápidas en cualquier sitio. Los niveles apenas duran un par de minutos, por lo que siempre podrás sacar tiempo para pasarte un par de una sentada.

Después de contar esto, cualquiera que haya jugado al título original ya se habrá dado cuenta de que el remake no aborda cambio alguno dentro de la jugabilidad, pero sí que añade una considerable cantidad de contenido.

Dos nuevos mundos (Alegre Minilandia y Cima Resbaladiza) llegan para ofrecer niveles e ideas frescas con mecánicas y puzles propios basados en las corrientes de aire y el deslizamiento sobre hielo. En general, sus fases son bastante originales, pero echamos en falta algo más en esta sentido.

También se han sumado divertidos y estimulantes niveles bonus (ya no tenemos el pequeño minijuego en el que Donkey Kong aplastaba cajas), pese a que recoger champiñones verdes no es un gran aliciente dentro de esta entrega porque morir tiene pocas consecuencias negativas.

Lo que es absolutamente genial es el modo cooperativo local para dos que, prácticamente, convierte a Mario vs. Donkey Kong en "otro juego". Al poder jugarse con solo un Joy-Con para cada jugador, resulta sumamente accesible. Así que, no hay excusa para no probarlo.

Controlando a Mario y a Toad es estupendo cooperar para resolver los niveles, que pese a no presentar cambios, adquieren otra dimensión cuando piensas en repartir tareas y objetivos. Lo que antes hacías solo, ahora lo puedes dividir entre dos.

Por lo tanto, la coordinación es fundamental y se presentan nuevas opciones para resolver cada una de las fases. Si juegas acompañado o acompañada estarás todo el rato hablando, discutiendo planes y riéndote. Pese a que el control con un solo mando es más tosco, este cooperativo es "puro Mario".

Por último, tras haber completado los ocho primeros mundos, se desbloquea la novedad más "tryhard", la que ha sido pensada para los jugadores más masoquistas: el modo contrarreloj. Todos los niveles jugados y por jugar se pueden experimentar ahora con un límite de tiempo mucho más reducido.

Este reto contra el crono (solamente disponible para un jugador) añade una nueva capa de dificultad en donde se pone a prueba la coordinación y habilidad a los mandos del jugador. Aunque, paradójicamente, veo este modo como lo opuesto a lo que pretende generar el juego, que es tomarse las cosas con más calma.

¿Es difícil Mario vs. Donkey Kong?

En lo que respecta a la complejidad de completar Mario vs. Donkey Kong dejamos claro que este no un juego difícil como tal, aunque la curva de exigencia va aumentando conforme accedemos a los mundos más avanzados.

El juego cuenta con niveles ciertamente complicados que pueden costarte más de lo esperado, pero en términos generales considero que Nintendo plantea un desafío equilibrado. Naturalmente, si ya jugaste a la entrega original, muchas de las pruebas seguro que te las conoces.

Eso sí, en donde muchas veces no hay piedad es en el modo contrarreloj en los niveles "Experto". Superarlos es algo que te va a llevar muchos intentos; a no ser que seas un prodigio en los juegos de plataformas.

Aunque, para que el juego sea mucho más accesible para los peques de la casa y para aquellos que simplemente quieran disfrutar al máximo sin preocuparse por perder vidas, se puede cambiar a un "modo relajado" que pone las cosas mucho más fáciles.

Este funciona de una forma muy simple: si un enemigo u obstáculo te golpea, una burbuja protectora salvará a Mario y le depositará en un lugar seguro. Tampoco hay límite de tiempo, así que te puedes tomar todo con infinita calma.

¿Cuántas horas dura Mario vs. Donkey Kong?

Mario vs. Donkey Kong tiene una duración de 15-18 horas de juego aproximadamente, si te propones reclamar todas las estrellas de todos los niveles, aunque esta duración puede variar considerablemente dependiendo de tu habilidad a los mandos.

Este título tiene su toque rejugable gracias al modo contrarreloj, que alarga la partida y la duración enormemente otras 10 horas o más gracias a su alto grado de desafío. Hemos tenido que reintentar niveles más de una decena de veces en ocasiones. Mario se ha hartado de decir "Mamma mia".

Precio y plataformas

Mario vs. Donkey Kong se encuentra disponible para Nintendo Switch en formato físico y en digital a un precio reducido de 49,99 euros en la eShop y desde 39,99 euros en tiendas y establecimientos físicos seleccionados.

No hay ediciones Deluxe o Coleccionista de esta entrega, aunque si eres un fan en potencia de la saga, siempre puedes intentar hacerte con el pack Mario vs. Donkey Kong + Puzle + Set de 3 pegatinas por 53,99 euros desde My Nintendo Store.

Jugar a Mario vs. Donkey Kong es una experiencia tan divertida como única

Nintendo rescata una de sus sagas perdidas y la trae de vuelta de una forma muy acertada. Tras muchos años siendo poco más que una franquicia para salir al paso, Mario vs. Donkey ha vuelto con fuerza y energía.

No estamos ante una nueva entrega, pero este remake se siente fresco mientras rinde homenaje a una saga y a un grandioso juego que merecían ser conocidos por millones de jugadores y fans gracias a su distintivo planteamiento jugable.

Solo se le queda en el tintero alguna novedad más, como un homenaje/nivel a las entregas de Nintendo DS, extras en forma de desbloqueables o una remodelación más imaginativa para la estructura de los mundos y la manera de acceder a cada nivel. 

La entrega original se renueva en lo que era justo y necesario para mantener toda su esencia y pese a que aquellos que ya resolvieron sus puzles en GB Advance verán ante si un título muy similar, animo a todo el mundo a que lo pruebe y disfrute. 

¿Cuál es el futuro de la franquicia rompecabezas? No lo sabemos, pero tras muchos años de incertidumbre, no podía terminar este análisis de Mario vs. Donkey Kong sin decir que, por fin, ha regresado para demostrar que, al igual que los Minimarios, esta saga tiene cuerda para rato.