Análisis de King Kong 3 Pro Controller, el mando Pro multiplataforma ¿definitivo? y Docking Station 7 en 1, un dock con un inesperado extra

Puede que su nombre no te diga nada, pero desde 2019 Gulikit lleva lanzando todo tipo de accesorios compatibles con PC, Android, iOS y Nintendo Switch de manera regular, como fue el caso de esta batería de originales accesorios. 

Ellos crearon unos de los receptores bluetooth más pequeños de Nintendo Switch mucho antes de que fuera una función de la consola). También el primer pad a prueba de drift, gracias a una tecnología propia patentada, los sticks con sensores hal effect, que poco a poco más y más dispositivos van incorporando.

Y justo de su sucesor es de lo que vamos a hablar en este análisis de King Kong 3 Pro, el mando "pro" que añade botones traseros entre otras muchas novedades que abarcan prácticamente todos los frentes, desde la vibración, a la cruceta o los gatillos. 

Pero no solo eso, también vamos a dar un vistazo rápido a otra de sus novedades, el Docking Station 7 en 1, o lo que es lo mismo, un dock compatible con Steam Deck, Rog Ally,  y otros PC consolizados, además de Nintendo Switch.

Accesorios que siguen fieles a la filosofía "todo en uno", es decir, creados para que puedan ser utilizados en una amplia variedad de sistemas, algo que seguro agradecen los jugadores multiplataforma.

Análisis de King Kong 3 Pro, cuando el "pro" es más verdad

No tiene sentido volver a cantar las virtudes del King Kong 2 Pro, un mando que sorprendió por su ergonomía, funcionalidad y compatibilidad con distintas plataformas, incluidos PC, Android e iOS.

El punto de partida de esta nueva versión King Kong 3 Pro es el modelo anterior, al que se le han aplicado numerosas mejoras. Es decir, desde el punto de vista de diseño y ergonomía, es un mando casi idéntico, muy, muy cómodo y con las formas y disposición del mando de Xbox Series X|S.

Decimos casi porque lo que es el chasis también ha mejorado: la parte trasera tiene zonas texturizadas en las asideras para un mejor agarre, un nuevo acabado que repele la grasilla que pueden dejar las manos y además es más resistente al deterioro por el uso que en el anterior modelo.

Además, todas las características del anterior modelo (es decir, compatibilidad con PC -y Steam Deck, ROG Ally y similares), Nintendo Switch, Android e iOS), sigue aquí presente, así como las funciones extra como APG (o Auto Pilot Game, que nos permite grabar macros o una secuencia de pulsaciones), Rapid Fire o fuego rápido para cualquier botón...

El sistema de macros ha mejorado sensiblemente, con menor tasa de error al repetir las acciones y, como en el primer modelo, se pueden grabar en memoria sin un software ni PC, realizando una combinación de botones (el botón Ajustes + Autopilot, el botón inferior de la parte central), como para configurar otras nuevas funciones que veremos más adelante.

Los sticks propiamente dichos, que fueron uno de los elementos que más ruido hicieron gracias a su tecnología "anti drift" Hal Effect, al no tener fricción ni desgaste, vuelven a ser uno de los principales reclamos, y regresan con una "versión 2.0 mejorada", que una mayor sensibilidad y más opciones.

Así, por ejemplo, podemos cambiar al vuelo la sensibilidad de los sticks a elegir entre tres niveles, así como recalibrarlos, todo desde el propio mando, sin necesidad de un software de PC o app para móvil, con una simple combinación de botones. 

Además, el área de los sticks está rematada con un disco antifricción que facilita el giro por el contorno y también minimiza el deterioro de la parte metálica del stick (cuyo "capuchón" o parte superior es extraíble y reemplazable, aunque por ahora el vendedor no ofrece piezas de recambio).

También mantiene el lector NFC, el giroscopio y acelerómetro para poder usar el control por movimiento (incorpora una tecnología propia para que la respuesta sea todavía más rápida), incluye funda de plástico rígida transparente para transportar el mando de manera segura... Entonces, ¿dónde están las novedades?

Las novedades de King Kong 3 Pro

Para poder apreciar algunas de las principales novedades, basta con abrir la caja. En el interior encontraremos una pequeña cajita de plástico transparente, que incluye todas las piezas que podemos acoplar o cambiar en el mando.

Empezamos por seis pequeños paddles o palancas metálicas que se insertan en la parte trasera del King Kong 3 Pro, donde están alojados los interruptores de cuatro botones traseros personalizables. Estas seis piezas metálicas se organizan por parejas, es decir, hay 3 juegos de dos palancas distintos, que se diferencian por la longitud y forma.

Un par tiene casi forma de "L", otro son una barra recta y el último casi parece un par de botones, más que palancas. Puedes colocarlos como te resulten más cómodos, según la logitud de tus dedos, tamaño de manos...

Lo cierto es que estas piezas están bien acabadas, tienen un buen tacto y en general son un gran añadido a un mando de por sí bastante completo. Incluso el pequeño estuche donde vienen está bien diseñado para que no se muevan en su interior.

La forma de acoplar y retirar estas palancas es muy sencilla, ya que el extremo de cada pieza tiene una forma que solo encaja en el hueco de la parte trasera de una forma concreta, tras ejercer una leve presión (y a la inversa para extraerlas). Es un sistema bastante más sencillo que en mandos pro como el SCUF Impact, y está diseñado para durar... siempre que seas mínimamente cuidadoso.

Para configurar la función de cada botón trasero, basta con pulsar a la vez el botón de ajustes (con el dibujo de un engranaje) y la palanca trasera que queremos configurar. Una vibración corta nos indicará que podemos pulsar el botón que queremos replicar, incluidos L3 y R3. Al hacerlo, una vibración larga indica que el proceso ha terminado correctamente.

Las únicas limitaciones a los botones traseros son que no podemos guardar macros, ni combinaciones de botones, ni funciones de sistema, ni nada parecido. Solo sirven para duplicar la función de los botones principales. 

El único "pero" que podemos encontrarle a esta novedad es que no se ha tenido en cuenta de cara al estuche de transporte. Si le añades botones traseros, la funda de transporte rígida no cierra. ¿Grave? Para nada, pero quizá deberían rediseñarla de cara a futuras versiones.

¿Más novedades? Aparte de los nuevos sticks, los gatillos también han sido rediseñados para ofrecer una experiencia progresiva más natural, y también cuentan con tecnología "hal effect" para evitar el desgaste de este componente.

Además, cuentan con dos nuevos interruptores "Smartrigger", gracias a los cuales podemos bloquear el recorrido de los gatillos para que se comporten como botones digitales, algo recomendable para tener una respuesta más rápida en géneros como los shooters o los juegos de lucha.

Y hablando de botones, la pequeña cajita transparente trae también un juego de botones de reemplazo. Pensaba que eran con diseños diferentes (letras con serigrafía mate en lugar de transparentes), pero en mi unidad no es así.

El proceso de cambio de los botones es también muy sencillo, gracias a una pequeña pinza que viene escondida bajo el mando en la funda de transporte. Con esta pieza retiramos el botón fácilmente, y basta con elegir el que quieres poner en su lugar y hacer que encaje en el interruptor, que también es una versión mejorada del modelo anterior (su tacto parece de membrana, no un switch mecánico).

Junto a la pinza para retirar los botones también hay un pequeño receptor USB: se trata del adaptador Hyperlink, gracias al cual, el mando consigue unas tasas de 1000 Hz de manera inalámbrica en PC (como si jugaras con cable).

Esta alta tasa de "polling" quiere decir que la actualización de la información que envía el mando es mayor, y por consiguiente, su respuesta es más suave y fluida que jugando por bluetooth, algo imprescindible sobre todo si juegas a alto nivel competitivo. Por desgracia, este receptor USB no funciona en otros dispositivos que no sea el PC, lo que sin duda es una verdadera lástima. 

Por si todo esto fuera poco, King Kong 3 Pro también incluye la friolera de tres modalidades de vibración, con dos intensidades cada una. Podemos cambiar ambas con sendas combinaciones de botones, para disfrutar de una vibración más básica (rotor), vibración HD o con una nueva tecnología llamada Maglev Super Haptic.

Se trata de una tecnología con algunos más matices que la vibración HD, aunque no llega a la respuesta háptica de Dualsense, pero es más detallada que en otros mandos, y otro gran añadido. Y, al final se trata de otra posibilidad más, de un creciente abanico de opciones para que juegues con la vibración que más te guste (o desactivada directamente).

No contentos con todo esto, King Kong 3 Pro también cuenta con una cruceta mejorada para evitar el ghosting de pulsaciones y, lo que es mejor, también podemos ajustarla con una combinación de botones para que se comporte como una cruceta de 4 o 8 direcciones, algo que algunos jugadores agradecerán, por ejemplo, a la hora de jugar a juegos de lucha, puzles...

Lo he podido comprobar con juegos como King of Fighters XIII (que recientemente tuvo edición física), donde los movimientos especiales y "ultras" salen a la perfección. Es una cruceta cómoda, la verdad, aunque sin llegar a los niveles de excelencia de la incomparable y legendaria cruceta de Nintendo.

Por último, el mando también cuenta con iluminación RGB, aunque su uso está muy limitado. No podemos cambiar de color, y los dos colores que tienen son o estéticos, o para indicar, por ejemplo, que estamos configurando algún elemento del mando. Dicho de otro modo, es una extra que tiene margen para mejorar de cara a hipotéticas futuras revisiones.

Además, tiene un efecto directo en la duración de la batería. Es un mando que puede dejar más de 25 horas de autonomía, aunque la luz puede rebajarlo a unas 15 (y verse afectado también por otros aspectos, como el tipo de vibración e intensidad que tenemos activado). Pero no es una mala autonomía,  y se carga por USB-C.

La opinión de HobbyConsolas de King Kong 3 Pro

Sin ningún tipo de duda, su antecesor era un gran mando, y King Kong 3 Pro es todavía mejor. Sus extras lo acercan más a la funcionalidad de un mando Elite Series, Dualsense Edge o SCUF Instinct Pro, pero sin disparar su precio y manteniendo su manejo sencillo: todas las configuraciones y ajustes se realizan desde el propio mando.

Y lo mejor de todo es que incorporan novedades como unos sticks mejorados y sin efecto deriva (aunque pueden resultar un poco "blandos"), gatillos con limitadores para los shooters, distintas opciones de vibración, conectividad ultrarápida en PC, buena autonomía, ergonomía y diseño optimizados...

Muchas buenas ideas que además se ven respaldadas por un precio razonable: actualmente cuesta 79,99 euros, menos que los mandos antes citados, y está disponible en 3 combinaciones de tonalidades (negro, blanco, con detalles grises...).

Sin ningún tipo de duda, King Kong 3 Pro es una gran alternativa para quienes busquen un mando que les permita jugar en distintas plataformas, y en todas ellas con unos extras y una experiencia de control verdaderamente óptima. 

Un vistazo a Docking Station 7 en 1, el dock multiplataforma

Gulikit tambien ha lanzado su primer dock multiplataforma. Ya hemos visto a otros fabricantes que han lanzado docks para Steam Deck, ROG Ally y otros PC consolizados. Por haberlos, los hay hasta con luces RGB, ranura para unidad M.2...

Y todo eso sin descuidar la conectividad: suelen tener salida HDMI, varios puertos USB, Ethernet para conectarnos a Internet vía cable. Algunos incluso han adoptado un original formato que casi les hace parecer una navaja suiza por la cantidad de extras que incorporan.

En el caso de Docking Station 7 en 1 lo primero que llama la atención es su diseño, que remite al cuadradote diseño de Super Nintendo en Estados Unidos, hasta en detalles como los botones superiores, que aquí no tienen ningún uso, solo replicar la estética de aquella consola.

La tapa superior puede desplazarse y regularse para alojar en el espacio interior cualquiera de los PC consolizados lanzados hasta la fecha, incluida la Legion Go, que es la más grande de todas (aunque en este caso puede que quede algo muy justa... aunque siempre podrás conectarla por USB-C). 

La novedad es que también sirve como dock de Nintendo Switch, una funcionalidad que en otros modelos no está presente (lógicamente, tendremos que ponerla boca abajo o sobre el dock para poder conectarla al puerto USB-C inferior de la consola). Pero funciona, por si te vas a llevar varias máquinas de viaje y solo quieres llevar un dock contigo.

En la parte posterior encontramos los habituales puertos (3x USB 3.0, HDMI, Ethernet, USB-C alimentación, USB-C para conectar al dispositivo...). No hace nada que no hayamos visto antes, salvo la conectividad con Switch.

Su diseño retro, que siempre es un plus, es verdaderamente robusto, y aunque no tiene luces led, ni ningún detalle adicional que lo haga sobresalir, es un buen dock que funciona sin problemas en todos los dispositivos que hemos probado.