Análisis de Astro Bot, el mejor homenaje posible a 30 años de historia jugable de PlayStation

Desde su debut en 2013, con su primera aparición en The Playroom, la fama de Astro Bot no ha dejado de crecer, un merecido reconocimiento a la enorme calidad que ha demostrado con sus dos primeros juegos, Astro Bot Rescue Mission para PS VR y el juego gratuito Astro's Playroom para PS5, obra de Team Asobi, que viene preinstalado en todas las consolas.

Como voy a contaros en este análisis de Astro Bot para PS5, si su debut en PS5 fue la mejor celebración posible para los 25 primeros años de PlayStation, con especial énfasis en el hardware, el nuevo juego hace lo propio con la celebración de los 30 años de videojuegos de PlayStation, centrándose en muchos títulos y sagas clave que han pasado por sus PSone, PS2, PS3, PS4 y PS5.

Porque, para quien no lo recuerde, el próximo 3 de diciembre se cumplirán 30 años del lanzamiento de la primera PlayStation en Japón, ¿y qué mejor momento para celebrarlo con un nuevo juego de Astro Bot que repase toda la historia de la marca? 

Asobi ha compartido que era, a la vez, una gran responsabilidad para el estudio y también un divertido honor y privilegio que, en mi opinión, tras haber completado el juego, han sabido aprovechar al máximo, aun con algún "pero".

Partiendo de una fórmula familiar, que combina plataformas, acción, coleccionables y mucho humor, Astro Bot es, en algunos sentidos, más que un juego. Vuelve a ser una gran demostración de todo lo que puede hacerse con el mando (o casi todo), además de ser un gran vehículo para despertar la nostalgia del jugador.

Pero no me quiero precipitar. Estos son algunos de los aspectos que voy a abordar en el análisis y opinión de Astro Bot para PS5.

• El argumento de Astro Bot, una excusa para repasar 30 años de historia de videojuegos
• La jugabilidad de Astro Bot: plataformas, acción, coleccionables ¿y qué más?
• Astro Bot es un homenaje que te va a tocar la fibra
• La dificultad de Astro Bot: ¿es un juego difícil?
• La duración de Astro Bot, ¿es un juego largo?
• El apartado técnico de Astro Bot, una cara simpática con muchos trucos bajo las mangas
• Precio y ediciones de Astro Bot y dónde puedes jugarlo
• La opinión de HobbyConsolas de Astro Bot
• Nota, lo mejor y lo peor de Astro Bot

El argumento de Astro Bot, la excusa para repasar 30 años de historia de videojuegos

Como en otros muchos plataformas, la historia de Astro Bot es un mero pretexto para presentarnos el planteamiento general del juego aunque, eso sí, aquí es una excusa bastante graciosa y sobre todo plasmada de una manera muy, muy simpática.

Así las cosas, comenzamos la aventura a bordo de nuestra flamante PlayStation 5 (que era la última consola que conseguíamos en Astro's Playroom), con la que nos lanzamos a la exploración del espacio, con bastantes semejanzas al famoso primer plano de Star Wars con el Destructor Imperial.

Todo va sin sobresaltos hasta que nos chocamos con un gigantesco alienígena, un viejo conocido de anteriores juegos, quien tras retirar de manera bastante bestia las cubiertas de la consola, termina desguazándola y robando la CPU, abandonando la consola a su suerte, seriamente dañada, y en caída libre sobre un planeta desértico.

Así, tras sobrevivir a la colisión, este árido planeta se convertirá en nuestro mundo central (cuenta con varias zonas pequeñas bloqueadas de inicio, en las que nos aguardan algunas tareas menores y coleccionables. Desde aquí tendremos que ingeniárnoslas para recuperar las piezas, reparar la nave y retomar nuestro viaje.

Este planteamiento general adopta la forma clásica de muchos juegos de plataformas, con un total de 6 "mundos adicionales", aparte del central, que vienen a ser como una constelación compuesta por su propia ristra de niveles, que iremos desbloqueando progresivamente hasta llegar al jefe final. Si le derrotas, conseguirás una pieza de la nave.

Entre estos niveles hay un poco de todo, desde niveles en zonas heladas, volcánicas, submarinas, espaciales, agrestes, en un lúgubre y lluvioso castillo ... o incluso que cambian entre el dia y la noche al pulsar unos interruptores. Lo cierto es que no falta ningún cliché y la sensación es que son bastante variados, con ambientaciones que poco o nada tienen que ver entre sí.

Además, dentro de estas constelaciones o mundos hay niveles que tendremos que "desbloquear" nosotros "por las bravas", por ejemplo, destruyendo un veloz meteorito que cruza la pantalla como quien no quiere la cosa o reventando unos asteroides estáticos. Como otros aspectos de Astro Bot, invita a "jugar", a probar, porque no todo es evidente de primeras, y eso es parte de la divertisión.

Además, todo está regado con la imaginería PlayStation de mil y unas maneras imaginables: los clásicos botones  X, Cuadrado, Triángulo y Círculo tienen hasta sus propios niveles, sin olvidar juegos y sagas que también tienen sus momentos de gloria, incluso modificando por completo la jugabilidad de Astro Bot... como veremos más adelante.

La jugabilidad de Astro Bot: plataformas, acción, coleccionables ¿y algo más?

El núcleo básico de la jugabilidad sigue siendo el mismo que en los dos anteriores juegos protagonizados por el pequeño robot blanco, es decir, llegar hasta la meta de los niveles, intentando rescatar al mayor número de bots posible (hay 300 en total) y, de paso, recoger el mayor número de monedas posible, que aquí tienen más usos que gastarlos en la máquina de gashapones. 

Cada nivel adelanta cuántos hay (de media 7, aproximadamente). Estos bots pueden estar a la vista o muy bien escondidos, como los otros dos coleccionables que puede haber en cada nivel, como son piezas de puzle o un portal que nos lleva a niveles secretos extra.

La vedadera gracia del asunto es que, la mitad de estos bots, son personajes que han marcado los 30 años de historia de PlayStation. El juego no indica claramente el título al que pertenece cada bot, por lo que es un metajuego dentro del propio juego.

Aparte de la apariencia del personaje, que en todos los casos está muy lograda, solo nos da una frase descriptiva para adivinar quién es el personaje si no lo tenemos del todo claro. En la galería de abajo podéis ver la que usa para Chris Redfield y como lo denomina. Es solo un ejemplo, pero muchas están tiradas con bastante gracia.

La gran mayoría son primeras espadas muy reconocibles y pertenecientes a todas las generaciones PlayStation (de clásicos como Crash Bandicoot, Spyro, Metal Gear Solid, Resident Evil, Wipeout, InFamous, Street Fighter, The Last of Us, Shadow of the Colossus, Demons Souls...), aunque también hay hueco para joyas olvidadas o que fueron clave en la historia de sus estudios.

¿Recuerdas Devil Dice? ¿Motor Toon Grand Prix, el precursor de Gran Turismo de Polyphony Digital? ¿Mr. Moskeeto? ¿Toro, la mascota japonesa en los orígenes de PlayStation en Japón? Son solo algunos ejemplos, tampoco quiero destriparlos todos, de los bots más raretes que te vas a encontrar aquí... aunque hay más.

Para salvarlos tendremos que, como en los anteriores juegos, usar las habilidades básicas de Astro Bot, que siguen siendo la norma de los juegos de plataformas. Contamos con un botón de salto (que podemos pulsar y presionar para "mantenernos" en el aire unos segundos) y un botón para golpear a los enemigos, y que libera un ataque giratorio si lo mantenemos presionado.

Sobre esta base se van añadiendo muchas más capas, que hacen que cada nivel sea una pequeña sorpresa distinta de la anterior, como es el caso de los power ups que nos confieren un poder especial en algunos niveles. Algunos de estos poderes regresan de anteriores juegos, como es el caso de las manos de mono con las que trepamos, aunque la mayoría son nuevos.

Uno de ellos es un reloj que ralentiza el tiempo (imprescindible para detener plataformas que se mueven a la velocidad del demonio, como por ejemplo, los cuchillos que lanzan unos fantasmas); otro es una trompa de elefante que nos permite absorber líquidos y crear plataformas temporales con ellos mientras que los guantes de rana nos dan brazos extensibles a lo ARMS.

Otro nos convierte en una bola metálica, que aparte de colarnos por conductos estrechos al más puro estilo Metroid, nos permite resistir disparos; otro nos hincha como un globo. ¿Y qué me decís de menguar de tamaño como un ratón? ¿Convertiros en una esponja que absorbe agua? ¿O una gallina o un perro para alcanzar grandes alturas o lanzarnos como una flecha hacia delante?

También hay objetos de un uso que añaden más capas a la jugabilidad, como una bombilla que revela plataformas invisibles, imanes que atraen piezas metálicas para formar grandes objetos arrojadizos...

Por supuesto, no faltan secciones en las que usamos características específicas del Dualsense, como el giroscopio (por ejemplo, para usar el propio mando como un cañón o como una nave o deslizador al principio de los niveles) o la respuesta háptica para resolver un nuevo tipo de puzle, que con el "tácto" y una vibración diferente nos dice que baldosa debemos empujar de una hilera.

Entre la búsqueda de los coleccionables (algunos rebuscados, otros muy bien escondidos, como los portales), los variados momentos de acción, el plataformeo, los cameos de personajes y la propia y distinta ambientación de cada nivel, lo cierto es que el desarrollo de Astro Bot es muy variado y resulta difícil soltar el mando... aunque la jugabilidad en sí es familiar a la de los anteriores juegos.

Además, también hay niveles especiales, como los protagonizados por los botones PlayStation, en los que plataformas y peligros pueden adoptar su forma, o los que generamos al destruir meteoritos, que proponen retos de dificultad creciente, como acabar con un grupo de enemigos en una plataforma con el suelo de cristal que se va rompiendo a nuestro paso. 

O superar circuitos repletos de trampas y enemigos para rescatar un bot especial, de los que rinde homenaje a un juego, y que te llevarán más de uno y dos intentos. Lo cierto es que el juego siempre se saca algo de la manga para sorprender, y eso incluye a los jefes finales de cada mundo.

Algunos regresan de anteriores juegos, como el gigantesco mono o el no menos enorme pájaro, con nuevas mecánicas para derrotarlos, que se suman a otros bosses y mid bosses (como un genio de la lámpara) que sin duda están también entre lo más espectacular del juego, y son el culmen al uso de los power ups. Derrotar a los jefes, por supuesto, no está exento de humor y muchísima simpatía.

En cualquier caso, una vez finalizado un nivel, los bots rescatados son enviados al mundo central, donde podemos usarlos de distintas maneras en puntos concretos, siempre que tengamos la cantidad necesaria. Cantidades que, lógicamente, siempre van a más.

Así, si pulsamos triángulo en uno de estos puntos (en zonas marcadas con un un haz de color azul), llamaremos con un silbido a los bots y empezarán a trabajar para formar una liana, una pared, empujar una roca o rasgar una lona con nuestro peso. Ver a 200 bots apilarse, y pasar corriendo por encima de Ryu, Rachet, Pyscho Mantis o The Wanderer no deja de tener su guasa.

Este trabajo en equipo nos permitirá acceder a nuevas zonas del mundo central, donde nos aguardan más bots para rescatar, más piezas de puzle o, una vez derrotado el jefe final de un mundo, a un satélite que nos permitirá escanear y desbloquear a la siguiente constelación (o mundo).

Además, las piezas de puzle que vayamos consiguiendo nos permitirán completar imágenes y desbloquear nuevas zonas de este mundo central, como la máquina de Gashapones. En esta máquina conseguiremos objetos de todo tipo, accesorios para los bots que hayamos rescatado (y así ir completando los "dioramas" de los personajes y sagas que vayamos rescatando en los niveles).

De este modo, si tenemos un personaje y su "juguete" (puede ser una espada, la bola en Katamari Damacy...), podemos buscar al bot en cuestión y darle un cachetazo para ver una animación única, que siempre, siempre, siempre son tronchantes. Cuando veas a Lara perseguida por un velociraptor, y los golpees, lo entenderás.

O a ver a Leon S. Kennedy de Resident Evil 2 interactuar con un puzle con estatua o simplemente dejar quieto a Astro y que saque una PSP para jugar... Hay cientos, pero cientos de ejemplos, y algunos que ni tan siquiera explotan la vena "videojueguística", que pueden ser tan absurdos e inesperados como subirse a lomos de una vaca y acabar echándose una siestecita juntos. 

Si conseguimos más piezas de puzle, también desbloquearemos el vestidor, y de este modo, entre los gashapones también aparecerán trajes especiales para Astro Bot (de personajes como Sly Cooper, ICO o el mono de Ape Escape), y que también son uno de los extras en algunas tiendas por reservar el juego o de la edición Deluxe.

Con más piezas de puzle también lograremos desbloquear una espacio para modificar el diseño de nuestro planeador Dualsense, con colores planos, texturizados o diseños especiales, que también nos pueden tocar entre los premios de los gashapones (y como los trajes, también hay en la edición Deluxe).

No es lo único que podemos desbloquear con las piezas de puzle. También está el safari fotográfico, que es una especie de "eco" de otro de los secretos de algunos niveles, unos carteles troquelados para meter la cara de Astro Bot y posar en una foto. 

Lógicamente también explota la vena simpática del juego, ya que  nos pueden rodear monos, pájaros cagones y más criaturas para completar la foto. El safari tiene de estos puntos donde nos podemos hacer fotos... y animales para interactuar, que también los vamos desbloqueando en los gashapones. Una curiosidad, pero tampoco es la locura.

Astro Bot es un homenaje que te va a tocar la fibra

Sin ningún tipo de duda, más allá de lo divertido y simpático que resulta Astro Bot, lo mejor son los 150 cameos que incluye el juego, entre los que, insisto, hay de todo, incluidas rarezas como Tokyo Jungle. Es posible que muchos jugadores encuentren cameos que les toque personalmente la fibra, o que te traigan al recuerdo juegos olvidados, como ha sido mi caso.

Es una de las cosas que más me ha gustado del juego, ese factor "recuerdo" que va aguijonear tu nostalgia a lo grande (no te digo ya la escena final del propio juego, que es una preciosidad sobre la que no diré nada salvo que, es tan buena, que al terminar el juego podrás volver a jugarla todas las veces que quieras).

También es posible que eches en falta que algunos juegos no tengan una presencia más pronunciada, o que directamente no tengan cameo... pero condensar 30 años tampoco es una tarea sencilla. 

Pero lo mejor de todo es que Astro Bot guarda todavía una sorpresa más. Me he planteado seriamente hasta qué punto comentarla en este análisis... pero si no lo hago, creo que dejaría fuera una de las cosas que hace grande a este juego, así que avisado quedas: lo que viene a continuación pueden considerarse spoilers. Si quieres llegar "inmaculado" al juego, para de leer ahora.

Al derrotar a los jefes finales de cada mundo o constelación, rescataremos a uno de los bots que han sido especialmente importantes para la marca PlayStation. Sí, te puedes imaginar algunos de estos nombres, otros, quizá no tanto.

Al hacerlo, en lugar de enviarlos al mundo central, desbloquearemos un último nivel, en los que Astro Bot se convierte en ese notable personaje, utiliza sus armas características y protagoniza una miniaventura que recrea la jugabilidad y estilo de sus respectivos juegos, en la que además tendremos varios bots para rescatar, basados en personajes de esa licencia.

¿Que quienes protagonizan estos niveles? Pues lo dicho, no voy a desvelarlos todos porque creo que es arruinar una de las principales sorpresas del juego, así que solo me voy a centrar en uno de los casos que más me han gustado. Por si has leído hasta aquí y no quieres saber más, deja de leer. Estás avisado.

Cuando salvas a Kratos y Atreus y visitas su nivel, Kratos comienza pasándonos su hacha, y nos trasformamos en Kratos Bot. Solo daré algunas pinceladas, por no desvelar todas la sorpresas, pero si has jugado a God of War y God of War Ragnarok, en este nivel vas a encontrar muchos elementos de ambas aventuras, con el humor y la simpatía del juego de Asobi.

Cofres, cuervos de Odin que podemos destruir (y que tienen recompensa en el árbol), lanzar el hacha o usarla para congelar el agua, los "armarios" que nos cuentan el lore del juego... y más guiños y detalles detalles de la jugabilidad de la saga de Kratos están aquí concentrados, pero derrochando una simpatía como se ve en pocos juegos.

No diré más sobre este aspecto del juego, salvo que, probablemente echarás en falta que alguna gran licencia no tenga uno de estos niveles, o que alguna de las que lo tiene, para ti no sea realmente top... pero ninguna sobra y dan variedad una enorme variedad al juego. Y rinden homenaje al legado de la casa. Desde luego, es uno de los aspectos que difícilmente vas a olvidar de este juego.

La dificultad de Astro Bot: ¿es un juego difícil?

Astro Bot es un juego pensado para toda la familia, y realmente cualquiera puede coger el mando y completar la aventura sin excesivos problemas. Habrá algún momento que cueste más, algún coleccionable que no encontremos... pero no es necesario tener el 100% para acabar la aventura. Si has rescatado 200 bots, puedes ver los títulos de crédito (que son geniales).

Eso sí, como he adelantado, algunos niveles suben el nivel de desafío, y algunos te llevarán varios reintentos. ¿Es imposible? Para nada. Tienes vidas infinitas y puedes intentarlo cuantas veces quieras, pero sí es cierto que algunos niveles pondrán a prueba tu paciencia.

Por último, y como he adelantado al principio, en Astro Bot las monedas sirven para algo más que los gashapones. Tras superar un nivel, puedes regresar a él para encontrar los bots y secretos que te falten y puedes "comprar" una ayuda, que te acompañará en la nueva visita al nivel y te indicará cual sónar, la proximidad de los coleccionables que te falten, lo que sin duda también facilita las cosas.

La duración de Astro Bot, ¿es un juego largo?

Pues depende de varios factores. ¿Eres de los que hasta que no completas un nivel no pasas al siguiente? ¿O te da igual? ¿Te paras a explorar en busca de todos los secretos o vas a saco a terminar cuanto antes el nivel? Porque jugar de un modo u otro, afecta directamente a la duración.

Un jugador que vaya a saco, puede completar Astro Bot en torno unas 12 horas, aproximadamente. A poco que te pares a buscar las piezas de puzle o los bots, es probable que muchos niveles los tengas que rejugar y entonces ya esa duración se disparará. Y lo mismo para encontrar los portales secretos, que algunos te obligarán a inspeccionar a fondo el entorno, usar un objeto inocente del nivel...

Lo mismo es aplicable a desbloquear todos los Gashapones, que requieren de 100 monedas para cada tirada. Y pueden salirte latas de bebida que no te dan nada y es tirar el dinero a la basura.

También hay trofeos por realizar acciones concretas en escenarios y sitios específicos. Si vas a jugar sin guía ni ayuda, esto también contribuye a engordar las horas, que fácilmente se puede ir a las 25 horas para completarlo al 100%. O puede que menos si eres habilidoso. O más, si eres de los que examina hasta la última micra.

Astro Bot, una cara simpática con muchos trucos bajo las mangas

Frente a otros juegos como Horizon Forbidden West Burning Shores, que está entre los más bestias técnicamente de PS5, Astro Bot no transmite ese efecto de ser el techo de la consola. Pero tampoco lo necesita, ni lo busca. Su encanto está en otra parte, y eso sin ser precisamente un juego "feo".

De hecho, es un juego precioso, con momentos brillantes (ojo a los jefes y ciertos niveles) y muy bien ejecutado, sin fallos graves (no petardea ni en los momentos más recargados) y que hace gala de una arroladora personalidad propia, huyendo de gráficos hiperrealistas, aunque reflejos y otros efectos estén muy cuidados y sorprendan por lo vistoso del resultado.

Eso no quiere decir que no tenga detalles muy molones o que te vayan a dejar con la boca abierta, que los hay, como secciones en las que estamos rodeados por cientos de pequeños objetos que interactúan de manera realista a nuestro paso o personajes gigantes que aparecen de la nada y llenan la pantalla.

Es sólo que su diseño pone el foco en otras cosas, y aquí los gráficos no son el fin, sino un medio más para conseguir el objetivo, que es entretener y provocar sonrisas. Y aún así, reflejos, texturas, materiales, vegetación... todo tiene un acabado muy top.

Lo único, en este sentido, es que recicla unos cuantos assets y elementos de anteriores juegos de Astro Bot, como los mencionados jefes finales (el mono o el pájaro), el robot gigante (o gran hermano) o incluso detalles de los propios niveles. 

Pero, en mi opinión, no es algo que afecte realmente a las sensaciones generales que deja el juego. Dudo que mucha gente haya jugado a Rescue Mission de VR (¿por qué no sacarlo en PC o PS VR2, a todo esto?), que es de donde provienen muchos de estos elementos.

Por su parte, la banda sonora cuenta con algunos temas conocidos de anteriores juegos, junto a nuevas composiciones y lo cierto es que muchos temas son muy pegadizos, lo que sumado a las vocecillas y efectos, dejan una parcela sonora de esas que se pegan, y que, además, hace un espectacular uso del altavoz del Dualsense. Bueno, en general de todo el mando.

De nuevo, Asobi se lleva el gato al agua demostrando que saca partido del Dualsense como no hace otro estudio, permitiéndote distinguir entre distintas superficies al andar, sentir la lluvia o que estás rodeado de decenas de pequeños objetos, o el uso del giroscopio para mover elementos, como plataformas.

Además, hay determinados usos del mando que solo vemos en momentos muy concretos del juego, como por ejemplo, al reparar las piezas de PS5 e insertarlas en el chasis de la consola, momentos en los que usamos sierras, vertemos líquidos, usamos un destornillador, fijamos clavos... y siempre consigue arrancar una sonrisa. 

Y aunque haya dicho que técnicamente no sea de esos juegos que sorprende, lo cierto es que no deja de tener mérito que nos sigan 200 o más bots por la pantalla y con su peso, por ejemplo, rasguen lonas mientras escuchas sus agudas vocecillas, que ayudan a que arrancarte una sonrisa sea todavía más fácil.

Precio y ediciones de Astro Bot y dónde puedes jugarlo

Astro Bot solo está disponible en PS5, tanto en formato físico como en digital, por 69,99 euros. La edición física incluye algunos extras interesantes, como un poster "manual de usuario", la mar de simpático.

Además, existe la edición Astro Bot Deluxe Digital, que cuesta 79.99 euros e incluye algunos trajes (de Bloodborne, traje dorado, colores para el Dualsense, banda sonora digital y avatares de PSN).

La opinión de HobbyConsolas de Astro Bot

No os voy a engañar, ni tampoco quiero marear la perdiz. He disfrutado de lo lindo con Astro Bot, de principio a fin. Es uno de esos juegos que tiene alma y personalidad propia, que está hecho desde el cariño y que, aunque tenga una jugabilidad familiar, logra explotar como nadie el legado de 30 años de videojuegos PlayStation. 

De hecho, creo que va a ser muy difícil que alguien vuelva a hacer un "juego-homenaje" y le salga tan redondo, porque está todo muy bien medido y calculado para dar en la patata de los jugadores que hayan estado ligados al universo PlayStation (y los videojuegos en general).

En cierto modo, Astro Bot es nostalgia pura, una mirada al pasado que repasa decenas de títulos icónicos desde la simpatía y el respeto, algunos importantes hitos importantes de la historia de los videojuegos lanzados en consolas PlayStation. Tiene guiños para para un tren, derrocha simpatía a cada paso y me ha resultado IMPOSIBLE no emocionarse con el final. Avisados quedáis.

Como juego, y aun a riesgo de que algunos no lo interpreten como un cumplido, Astro Bot es el plataformas "más Nintendo" que no ha salido en una consola de Nintendo. Su preciso control, junto con unas mecánicas claras y sencillas, jugabilidad adictiva, fácil de coger pero con momentos difíciles, repleto de secretos y, sobre todo, divertido, hacen que sea un "clásico" de lanzamiento.

Creo que está tan, tan bien diseñado que Astro Bot seguirá siendo un juego muy disfrutón dentro de 40 años. Como lo es el Super Mario Bros. original. Como lo será Super Mario Wonder en unas décadas. Dejando a un lado homenajes y simpatía, es un grandísimo y divertido plataformas.

Podría seguir alabando sus virtudes, pero creo que ya ha quedado más que claro: si tienes una PS5, Astro Bot es la gran exclusiva que vas a poder disfrutar estas navidades. ¿Qué mejor manera de celebrar el 30 aniversario de PlayStation? A mí no se me ocurre ninguna, la verdad. 

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